Capítulo 16

9 2 88
                                    

Gabriel

—Entonces una vez que recibió la carta del juzgado, ya no puede salir del país — pregunté.

—No, de echo, tendrá un espía que la estará vigilando en el caso de fuga—hizo una pausa — a ella y a las demás — agregó.

—¿A mí prima también?— pregunté.

—Sí, aunque se viniera a vivir aquí, ella está metida en esto— contestó mi abogado cerrando  la carpeta.

—Joder, ¿Y no hay nada para salvar del juicio a mi prima y a Jess?— crucé los brazos, este negó con la cabeza.

—Para evitar que vayan al juicio, tienes dos opciones o quitar la denuncia, o demostrar que los cuatro no fueron cómplices, eso incluye a Harry, Chiara, Jessica y Cintia, pero sí haces esto, a Adriana, le caerá cadena perpetua o condena de muerte, pero para eso, tienes que demostrar que Adriana, mató a más de treinta personas.

—Osea mentir, y culparla de múltiple asesinato — exclamé.

—Exacto— agarró su maletín — Yo me voy, piénsatelo y luego me dices— agregó dirigiéndose a la puerta.

—Gracias, me lo pensaré — respondí mientras se dirigía a su coche.

—¿Qué te tienes que pensar?— exclamó mi prima entrando por la puerta.

—¿Sabes? Escuchar a las personas hablar es de marujas— exclamé soltando una risa.

—Ja ja, que risa—  contestó irónica.

—Bueno, ¿Qué te trae por aquí? ¿Me extrañabas?— pregunté mientras ella se sentaba en el sofá; yo me senté a su lado.

—¿Sabes? Hacerse el importante es de creídos — hizo una pausa — pero sí te extrañaba.

—¿Todo bien con Jess, Chiara y la otra?— apoye mi brazo en el respaldo del sofá.

—Mira vale que sea tu ex, pero ella está muy jodida — respondió sacando algo de su bolsillo.

—¿Acaso crees que yo no sufro? Mi prima y mis dos amigas viven con una asesina — me pegó en el brazo.

—Adriana no es ninguna asesina, está claro— amenazó.

—Lo que tú digas primita.

—Por cierto te traigo esto, ¿Te acuerdas del colgante que me regalaste?— asentí— Adriana tenía la otra mitad, mira lo que está grabado.

Cintia me entrego el colgante de gato que yo le regalé hace una semana, solo que ahora está entero, pero, ¿Por qué Adriana tenía la otra mitad? Enseguida el nombre de “Emma” apareció. Emma fue la que me dio el colgante, giré el colgante como había ordenado  mi prima, y estaba vez no estaba solo la “G” de Gabriel, si no estaba graduado el G x A, Gabriel x Adriana. Levanté mi cabeza para entregarle el colgante a mi prima, pero no estaba, se había ido, había desaparecido por arte de magia.

Apreté el colgante en mi mano y lo tire sobre la mesa, me levanté del sofá y me dirigí a la puerta sacando el móvil del bolsillo.

—Martin, ¿Dónde estás?— pregunté abriendo la puerta del coche.

—Estoy en una fiesta de la piscina, cerca de tu casa— contestó mientras cerraba la puerta del coche.

—¿La casa de la playa?— pregunté poniendo el manos libres.

—Sí— contestó mientras me abrochaba el cinturón.

—Voy para allá — respondí colgando la llamada. Di marcha a atrás y giré el volante para luego pisar el acelerador y tomar rumbo a la casa de la playa.

                                                                                   ****

Aparqué el coche y a mi lado estaba un coche del mismo modelo que el de Adriana, sólo qué de color negro.

—No creo que sea ella, ella seguro está llorando como los bebés— me dije a mí mismo mientras cerraba el coche.

Guardé las llaves en mi pantalón y entré en la casa. Me dirigí a fuera ya que estaba prohibido estar dentro.

—Ey, Bro — me sorprendió Martin  colocando su brazo sobre mis hombros— Tienes que saber algo— agregó mientras caminábamos.

— ¿Que pasa?— pregunté .

—Adriana está aquí, con las chicas — contestó.

—¡¿ Qué?!— exclamé alterado— Bro me tengo que ir— agregué mientras me giraba.

—No, no, no, tenéis que hacer las paces— me giró y caminamos hasta ellas. Mierda, porfavor que no se enteré el juez. Y mucho menos mi abogado.

—Hola chicas— saludó Martin, dirigiéndose a Valentina y abrazándola por la espalda. Adriana torció su cabeza disimulando que le había entrado en el ojo. Llevaba el mismo vestido rojo que llevo el día que conocí a Martin.

—Voy por algo de beber— exclamó Adriana —¿Queréis algo?— agregó.

—Sí ve yendo, ahora te alcanzo — respondió Jessica. Adriana levantó el dedo pulgar con el puño cerrado mientras se iba.

—A qué esperas— me habló Jessica.

—¿Qué?— exclamé.

—Mira, me da igual que la hubieses denunciado — habló mi prima— pero hablar porfavor — agregó.

Suspiré.

—Esta bien, hablaré con ella, pero no prometo que vaya a quitar la denuncia — advertí mientras caminaba hacia ella.

Caminé hasta la barra, ella tenía los brazos posados sobre la barra. La agarré del brazo y la llevé hasta un lugar apartado. La empuje contra la pared .

—¡¿Qué haces?!— preguntó alterada.

Me lancé sobre ella y  empecé a besarla.

Colocó su mano en mi nuca y yo posé mis dos manos en su culo, la besé con insistencia y mi lengua jugaba con la suya como dos niños, mi boca buscaba la suya, comencé a besarla mientras nos metimos en la casa y entramos a una habitación.

—¿Quieres?— asintió — Recuerda será nuestra última vez.

—Para siempre — agregó.

La volví a besar mientras le quitaba el vestido y ella me desbrochaba la camisa. Agarré su espalda y la tire a la cama mientras ella me quitaba el pantalón.

----
¡Hola, familia!

Os traigo el capítulo 14 de: Detrás de tí

Contarme, ¿Que les pareció?¿Les gustó? ¿Quién será esa misteriosa persona?

Déjenme-lo en los comentarios.

Como siempre, ya sabéis que una votación se agradece un montón.

Recuerden de seguirme en mi segunda cuenta: X_Paula_xx_xx y en mi Facebook: Paulita AMEC

Recuerden que si quieren que les dedique un capítulo, escríbanme al privado.

#2 Detrás De Tí [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora