Guilty as Sin?

introducción

Juanjo era solo un niño cuando vio a Martin por primera vez, hacía ya cinco años. No recuerda con precisión qué fue lo primero que pensó de él, pero sí que sabe lo mal que le cayó desde un principio. 

Martin tenía solo once años cuando dejó Getxo para mudarse con su madre a un pueblo cerca de Madrid. No estaba ni contento ni triste por eso, solo confundido. Sus padres se acababan de separar y él no entendía lo que eso significaba. Pero tampoco tuvo tiempo de darle vueltas, porque no tardó mucho en conocer a Ruslana, la hermana pequeña de Juanjo. 

Ninguno de los dos chicos tardó en descubrir lo fácil que era ignorarse mutuamente, así que, a pesar de haber crecido juntos, ni Juanjo ni Martin recuerdan haber mantenido una conversación que incluyera el intercambio de más de dos palabras. 

Pero ahora, cuando a Juanjo tan solo le quedaban seis meses para acabar el instituto y poder escapar del suplicio que era su casa, Martin mete la pata y descubre algo que nadie debería haber visto. 

Y ya no pueden jugar a fingir que no se conocen, porque de ninguna manera Martin puede olvidar aquello, y por supuesto que Juanjo jamás lo dejaría irse en paz.