"Si."
"¿Y lo sabe papá?"
"¿Perdona? ¿Qué tiene que ver el feo de mi ex marido en esto?"
Martin abrió la boca para responder, pero nada le cruzó el cerebro. ¿Su madre se había estado acostando con una tía? No era lo que se había esperado cuando le quiso preguntar por el tema. Es decir, estaba bien. Le daba igual. Por él que se liase con quien quiera. ¿Pero desde cuando aquello era así? ¿Dónde había quedado aquel tío gay que estuvo a punto de pagarle un sueldo porque ella fuese su tapadera? Se sintió avergonzado de lo tonto que debía verse en ese momento, con el ceño fruncido y la sorpresa cincelándole la cara. Le había pillado de sopetón, y necesitaría de unos minutos para entenderlo. Tenía tantas dudas que no sabía ni por dónde empezar.
"¿Mamá?" aquello pareció suficiente. Rebeca rodó los ojos, ahogando un suspiro.
"¿Qué pasa? ¿No has visto las últimas fotos que ha subido a facebook o qué? Le han salido canas, está espantoso. Y las entradas que tiene... en tres años más estará calvo. Menos mal que tu has salido con mis genes, hijo mío" su madre acortó la distancia entre ellos, llevándole una mano al pelo, levantándole el flequillo para poder verle la frente. "Qué buena línea capilar tienes. Deberías darme las gracias, que para algo sufrí tanto dándote a luz. Si fuera por él... El puto vago no hizo más que poner el espermatozoide. Cuando me llame para ponernos de acuerdo con tu regalo de cumpleaños se lo diré, que se eche algún tinte o algo. Por dios, que cada día se parece más al Presidente Snow. Que vergüenza de hombre. Por cierto, ¿quieres que hagamos palomitas y pidamos pizza? No hay manera de salvar el pollo. Es hora de aceptarlo."
Martin se echó un paso hacia atrás, apartando las manos de su madre de la cara. Rebeca estaba hablando demasiado rápido, él llevaba sintiéndose perdido desde que había pronunciado el nombre de su supuesta novia.
"¿Pero qué...? Mamá, no estoy entendiendo nada."
"Bueno, hace mucho que yo tampoco entiendo cosas de tu vida, hijo. Te lías con el vecino, te peleas con Ruslana... ¿Me ves juzgándote por algo de eso? La gente cambia, bebe. Así que quita esa cara de pez sorprendido, anda, que sabes que odio cuando la pones."
El chico notó sus mejillas arder. Cerró la boca y se esforzó por alisar las arrugas de su frente, sin saber si lo estaba consiguiendo o no. Siempre pasaba lo mismo, siempre iba un par de escalones por encima de él. ¿Qué podría responderle? ¿Que lo de Juanjo había sido mucho más complejo que simplemente liarte con tu vecino? ¿Que lo de Ruslana tendría solución? Ni siquiera sabía que responder a sus propias preguntas.
"Escucha, sé que te has enamorado y que echas de menos a tu mejor amiga, ¿vale? Y quiero dejarte claro que yo estoy aquí siempre. Perdona si has sentido que alguna vez te he dejado solo, mi amor. Es que a veces te veo tan independiente y mayor... No me había dado cuenta. Solo te pido que dejes de mirarme así, porque me pones incómoda. A ver, si, he probado unas tetas y me han gustado. Ya está, no es nada muy profundo. ¿Por qué no mejor llamamos a la pizzería de siempre y pedimos algo? En serio, tengo muchísima hambre."
"Yo... Vale, a ver..." probó a empezar Martin, sin saber lo que quería decir. Tenía la mente en blanco, completamente desconectada del momento. Se sintió fatal por estar reaccionando así. Comenzó a mover la cabeza de arriba a abajo, asintiendo con la barbilla, como si con aquello tratase de decir algo. Luego dejó escapar todo el aire que tenía contenido en los pulmones. Vale, su madre se había enrollado con una tía. No había nada de raro en eso, estaba bien. No debería de importarle lo más mínimo lo que decidiera hacer con su tiempo libre.
Dio un paso hacia adelante, recuperando la distancia que había perdido antes. La envolvió con los brazos, estrujándola contra él, notando como suspiraba sobre su hombro. Luego reposó la cabeza sobre la de ella, cerrando los ojos unos segundos. El gesto se alargó durante un buen rato. Martin se sintió extrañamente mejor cuando se separaron. Rebeca lo tomó por las mejillas, acariciándole la piel de las mismas con los pulgares, sonriéndole en agradecimiento.
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Guilty as Sin?
FanfictionDonde Martin, un chico distraído y callado, descubre algo que no debería de haber visto o... Donde Juanjo, el hermano mayor de su mejor amiga, no soporta a la gente entrometida