CAPITULO 41: "Apariencias"

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-Ahora que está todo aclarado, quiero hablar con ese tipo de abajo, nadie se acerca a mi hermanita sin antes hablar conmigo –le dice intentando avanzar a la puerta

-No, tu no me vengas con eso ahora, porque no me cuentas que dijo nuestra adorada mami –pidió Victoria, sin dejar de abrazarlo para que se olvidara de su idea de "hablar" con Matt

-No querrás saberlo –sonrió provocándola

-¿Qué? –soltó fingiendo estar enojada

-Ay nada, todavía cree que soy un señorito –sonríe burlón

-Si supiera que tiene un pervertido por hijo, se le caerían esas uñas tan feas que se pone –ambos hermanos rieron estando de acuerdo con el tema de las uñas

-Me prohibió buscarte, nunca lo había hecho directamente, tienes que haberla hecho enojar pero muuuy en serio

-Me trató como una mierda en casa de Rothschild y el... creo que despidió a Hank y la llamó, mm... en pocas palabras la llamó mala madre muy educadamente y los echó de la casa –suspiró al recordar cómo la había defendido

-¿Qué te dijo? Dime ahora mismo, todo –al escuchar eso, su enojo volvió a crecer y le exigió saber toda la historia

-Que tenía una cabeza limitada y que era vulgar y maleducada

-¡¿QUE?! –chilló Evan

-¡Ah! Y también me dijo idiota

-Bruja interesada –espetó Evan, apretando a su hermana en un fuerte abrazo

-No puedo respirar –rió con la cara aplastada en el pecho de su hermano

-Lo siento Victoria...

-Evan –le dedicó una leve sonrisa cargada de cariño

-Todo esto se habría evitado si hubieses aceptado la oferta que te hizo mi padre

-Irme a vivir contigo a California, ser una mantenida, no gracias

-Pero Vic, todavía puedes hacerlo, de hecho el estirado de mi papi el otro día me preguntó si habías "recapacitado", a pesar de ser un come-mujeres, no le gusta dejarme solo mucho tiempo

-Eso está bien –evita el tema

-Me rindo, por ahora, te juro que apenas termine ese contratito te meto en mi auto y te subo a un avión, y me va importar una mierda ese Rothschild

-Eres tan malo amenazándome, tienes que ver más películas si quieres ser un buen abogado o uno malvado, tienes que mejorar tus amenazas –rió una divertida Victoria

-Victoria –la regaño Evan

-Solo espero no tener que verla nunca más en mi vida –suspiró aliviada de haberlo dicho en voz alta

-Mi enana –se preocupó por ese suspiro, uno que él, conocía perfectamente

-Listo, te puedes largar, tienes exámenes que preparar, no quiero un hermano tonto –una sonora carcajada salió de sus labios al ver las cejas de su hermano alzadas con esa mueca divertida en el rostro

-Yo a ti tendría que llevarte conmigo y amarrarte a la pata de mi cama, para que nadie se te acercara

-Como una maldita mascota –gruño Victoria

-Como mi esclava y secretaria –corrige divertido

-Si claro, ¿solo viniste a buscarme? ¿O una de tus admiradoras te espera?

-Nadie es más importante que tu

-Hay hermanito, que sentimental

-Recuerda que somos casi inseparables, no me dejes de lado, puedo ser un idiota el 80 por ciento del tiempo, pero tú sigues siendo mi prioridad, toda la vida

El Contrato ©️(SIN EDITAR)⚠️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora