Capitulo 10

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El sonido del telefono me despierta bruscamente, me remuevo en la cama y me caigo al suelo y me doy con la cabeza en el suelo.

-Katniss ¿estas bien?-me pregunta Peeta preocupado, se sienta en la cama y me intenta levantar.

-Si, si.-le digo y cojo el telefono-¿Diga?

-Hola Katniss

-¡Mama! Hola-creo que he dicho demasiado fuerte mama-¿Que tal?

-Bien ¿Y tu?

-Bien bien, ehm, ¿a que se debe tu llamada?

-Queria preguntarte si te apetecería venir al distrito 4 este fin de semana, han puesto muchas tiendas, y creo que tambien un parque de atracciones, he hablado con Annie y Johanna que las llame ayer por la noche, y me dijeron que ya estabas durmiendo, y a ellas les pareció bien, ademas Annie y Johanna ya vienen al 4 el viernes, asi que tu y Peeta podriais dormir en mi casa.-asi que Johanna y Annie ya se van pasado mañana.

-Vale, se lo dire, vale-le digo mirando a Peeta sonriendo.-Bueno ya te avisare cuando vamos.

-Vale adios.

-Adios.-cuelgo y dejo el teléfono en la mesilla de noche. Me levanto del suelo para abrir las cortinas, pero cuando lo hago el sol me da en toda la cara y me tiro a la cama boca arriba. Veo que Peeta me mira, pero estamos al reves, el me da un besito.

-¿Que dice tu madre?

-Me ha dicho que si queremos ir este fin de semana al 4, dice que han puesto tiendas, a las que no voy a ir, pero un parque de atracciones al que si que puede que vaya. Annie y Johanna se van este viernes, asi que iremos todos. Seras el unico chico, asi que si no quieres ir lo entien-

-Katniss, iré, no te preocupes-me acaricia la mejilla, y yo inclino la cabeza para aferrarme más a su mano, cierro los ojos y noto como sus labios rozan los mios, hasta que se juntan, nuestras bocas encajan perfectamente, seguimos con el beso, solo se oyen nuestras respiraciones entrecortadas, nos movemos, hasta que los dos quedamos de rodillas en la cama, hasta que noto un fuerte dolor en la nuca, hace que me separe de él.

-Ahh-grito, llevo mi mano a mi nuca, Peeta tiene una cara.

-¿Que pasa?

Intento hablar pero me duele mucho. Yo solo aprieto los labios y me toco la nuca, Peeta no sabe que hacer. Yo señalo el baño con la otra mano pero no creo que lo entienda. El entra y coge una toalla y la moja, luego viene y me la pone en la nuca, esta fresquita, me sigue doliendo pero no tanto. Cuando ya llevamos un rato Peeta me pregunta:

-¿Estas mejor?-

-Si-la toalla ya no esta tan fresquita asi que me la quito, la dejo en la cama y Peeta me hace un masaje, pero no solo en la nuca tambien en la espalda.

-Peeta no hace falta.

-Si

-No, no hace falta.

-Si Katniss porque yo te quie-la voz de Johanna le interrumpe.

-Ah, ya estais despiertos. Katniss, ayer tu madre llamó-

-Si, me ha llamado hace un rato, iremos el fin de semana.-le interrumpo mirandola.

-Bien, iré abajo, os espero.

-Vale

Johanna se va y Peeta y yo nos quedamos solos, yo me giro para mirarle y nos miramos a los ojos, yo bajo mi vista a sus labios y le beso, le beso como si no lo hubiese hecho nunca, como si me fuese la vida en ello, nos separamos por falta de aire, y mientras recuperamos la respiracion juntamos nuestras frente, el me acaricia la mejilla y envuelvo mis brazos en su cuello, volvemos a besarnos pero esta vez mas apasionadamente, nuestras lenguas se encuentran. Nos movemos y yo me quedo encima de el, le sigo besando, y siento lo mismo que en la cueva y en la playa, algo se me agita en el pecho, algo cálido y curioso, es un beso que me hace desear un segundo. Oimos que tocan la puerta, pero seguimos a nuestro rollo, escuchamos la voz de Haymitch, que saluda a Johanna y le pregunta donde estamos, ella le dice que estamos aqui arriba. Escucho todo, porque no tengo puerta.

Todo puede cambiar | Katniss & PeetaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora