XLIX. Hombre

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– No puede ser que sólo bajaras nueve kilos Taeyong. Este medicamento es muy fuerte y siempre funciona. A mí me hizo bajar como diez kilos en dos semanas y tú llevas un mes.

Minjeong lo jaló del brazo con rudeza para bajarlo de su báscula rosada, resoplando con impaciencia.

– N-no sé qué pasó.

– Si no dejas de comer como un puerquito es lógico que no lo logres. Taeyong ¿En verdad no te da vergüenza esa panza?

– Si, de verdad no me gusta...

– Pues tendrás que hacer dieta. Ya no puedo darte más.

– ¿Son muy caras?

– No es eso. – ella respiró profundo, acariciándole el cabello con suavidad. – No son tan buenas si las tomas mucho tiempo chiquito. Te hacen sentir bien ¿No?

– Si. ¿De verdad ya no puedo tener más?

– ¿Sabes cómo podrías tener más? Si las haces rendir.

– ¿Cómo?

– Espérame aquí.

Minjeong salió de su habitación y él se quedó de pie frente a su computadora. La recámara de ella era lila, tenía algunas fotos de ella y de Jaehyun alrededor, así como de Seoa. Incluso había una foto de Taeyong en la repisa.

– Si las tomas con una cerveza te deja felíz como por dos días seguidos. Y también te quita el hambre más rápido. – avisó cuando regresó, ofreciéndole una de las latas de cerveza que llevaba. Taeyong y ella se tomaron la pastilla con una cerveza juntos y luego se acostaron en la cama, abrazándose.

– ¿Tú por qué tomas esas pastillas? Si eres tan bonita.

– Porque a veces como por ansiedad. Sin ellas estaría súper gorda. Así como tú.

– Uhm. Yo también como por ansiedad. Galletitas que hace mi mami. Y dulces que me manda Jaehyunnie.

– Pero las faldas si te quedan mejor últimamente. Te ves muy lindo con ellas.

– Ya no me gusta mucho hacer esto por Yuyu. M-me gusta ser un niño. – susurró Taeyong, sintiéndose libre de confesarselo a ella. Minjeong le besó la mejilla varias veces.  – Extraño salir con él como antes.

– Pues no lo hagas más Taeyong. Es muy fácil.

– ¿Tú crees?

– Si. Aunque puede pasar que él te deje ¿O no? Yuta ha hecho un montón de cosas para estar contigo. – Taeyong entreabrió un ojo. – Ya llevan años juntos y siempre ha demostrado que te quiere.

– Pero es que es difícil...

– Cuando quieres a alguien lo intentas sin importar qué. Mira a Jaehyun y a mí, seguimos juntos a pesar de que estamos muy lejos ¿Crees que él no ha salido con alguien más este tiempo? Pero aún así lo sigo esperando.

– Jae te quiere mucho. No creo que él haya hecho eso.

– Ay bebé, por favor. El punto es que Yuta siempre te ha demostrado que te ama. Nada te cuesta seguir con esto un tiempo más.

– Su familia ya vive aquí...

– No seas tonto Taeyong. Yuta en verdad te ama mucho. Seguramente después ya no tendrás que hacer esto. Pero si no quieres en verdad no tienes por qué hacerlo. Aunque pienso que ya avanzaste mucho, no te rindas ahora.

Taeyong y ella pusieron música. El tiempo platicando y riéndose se les fue volando y luego tocaron el timbre dos veces. Taeyong se levantó con rapidez, mirando a la chica dormida a su lado.

Angel Baby - Jaeyong Where stories live. Discover now