Tipo: Imagina Corto
Advertencias: El One Shot contiene, Lenguaje, Indirectas, Dobles Sentidos, Incesto y Contenido Sexual.
-Hola tío -sonreí tiernamente.
-Hola ___ -me regreso la sonrisa. -¿Porque estas despierta? -alzo una ceja y le dio una mordida a su sándwich, mire sus labios por unos segundos y pase mi lengua por los míos humedeciéndolos.
-Nada.. -me acerque un poco a el. -No tengo sueño -me senté en la barra de la cocina.
Había una pequeña ventana en la cocina que estaba enfrente de la barra y alumbraba a esta. Toda la cocina estaba obscura y no se lograba ver casi nada, y en donde me encontraba sentada era el único lugar donde daba la luz de la luna.
Tenia mucho tiempo que no veías a tu tío Pietro, de hecho, al menos unos diez años. El trabajaba para S.H.I.E.L.D, pero en una instalación de Sokovia y por eso no visitaba mucho a tu mamá, Wanda. Hace una semana que le habían dado unos días de descanso y había decidido visitarlas, ya que no los veía desde hace mucho tiempo y te extrañaba al igual que a Wanda.
Viste como sus músculos de la cara se relajaban y te miraba serio de arriba abajo examinándote, quería decir algo, pero no lograba que salieran palabras de su boca, estaba sorprendido y muy confundido, sorprendido porque se había dado cuenta de que ya no eras la niña de siete años que le gustaba jugar con muñecas y soñaba con vivir en un castillo de chocolate. Ahora eras diferente. Vestías como una mujer, usabas ropa provocativa, te habías desarrollado, habías dejado de tener un rostro inocente y tierno, Pietro no se había dado cuenta de que su sobrina había dejado de ser una niña y ahora era una mujer, estaba seguro de que hace unos minutos aun te veía como una niña, pero algo habías causado dentro de el, y no sabia si era bueno o malo.
Trago saliva y subió su mirada a tus ojos, se conectaron muy bien con los tuyos, cosa que no sucedía con su novia, Elizabeth.
-¿Pasa algo? -trataste de sonar inocente, como si no te dieras cuenta de que te estaba comiendo con la mirada.
-No -desvío la mirada hacia el suelo. Reíste internamente.
-Sabes.. -bajaste de la barra. -Creo que ya me dio un poco de sueño. -fingiste bostezar.
-Si -te miro a la cara, tratando de no mirar tu cuerpo. -Yo también -asentiste.
Te acercaste a el lentamente y depositaste un beso en la comisura de sus labios, lo tomaste desprevenido por lo que se sobre salto, te separaste lentamente y sonreíste.
-Buenas noches -dijiste con voz ronca, pero sensual. Giraste sobre tu lugar y caminaste meneando la cadera hasta desaparecer después de cruzar la puerta.
Pietro se quedo ahí mirando como te ibas y se mantuvo por un buen rato mirando por donde te habías ido, preguntándose, que, que mierda le sucedía, y porque su sobrina le estaba volviendo loco, su sobrina de dieciséis años le había dejando con una erección.
(...)
No podías dormir, no con la imagen de los muy bien trabajados pectorales de Pietro en tu mente, tampoco habías podido dejar de pensar en la manera en la que te miraba, estabas segura de que en ese momento te aventarías a sus labios y lo devorarías completo, pero te controlaste, tenias aun un poco de orgullo y dignidad como para no hacerlo. Te levantaste de tu cama y saliste de tu habitación de puntitas corriendo de la misma manera hacia la habitación de Pietro. Entraste sigilosamente sin hacer nada de ruido para que ninguno de tus papas te descubriera o el mismo Pietro lo hiciera, te aseguraste de que estuviera ahí, y si, estaba dormido, lograbas verlo por la luz que entraba por la ventana, te mordiste el labio al verlo en tan solo bóxers, te acercaste a un mas quedando a un lado de la cama, miraste sus bóxers para darte cuenta de que tenía una ligera erección para nada pequeña. Te sentaste en la cama y después te subiste encima de el, exactamente quedando sexo contra sexo, lo único que los separaba eran las delgadas telas de su ropa interior. Pietro se removió haciendo que se frotaran por segundos, soltaste un ligero gemido, pero después te tapaste la boca asustada y lo miraste atentamente, no se movió o se inmutó de tu jadeo, suspiraste aliviada te quedaste mirando su cara, tenias unas inmensas ganas de besarlo, pero sabias que era peligroso y mas si se despertaba.
No lo besarías, pero si te darías el gusto de besar su pecho y tocarlo. Te arquearé mientras que tus labios se dirigían a su piel, comenzaste besando sus pectorales para luego ir bajando.
-Mmh -te sobre saltaste. Pietro se había movido pero no se despertó. Lo miraste por unos segundos mas hasta que bostezaste, te levantaste y regresaste a tu habitación.
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Primera parte, 😉
No fue hot pero el próximo lo será.
