Ladrón de galletas ; 02

T r e c e

Claro que no sabía dónde vivía, ni mucho menos en donde podría estar, y no tenía a nadie de confianza que le pudiera dar la dirección.

Se rindió, pero entonces recordó el puente que había visto, eso era algo.

Lo había visto de venida a su casa, corrió con todas las fuerzas que tenía en ese momento, y cuando llegó se quedó un momento viendo el cielo y tomando aire.

Miró a todos los lados, esperando que los recuerdos le vinieran de manera súbita, pero no ocurrió nada. Solo eran imágenes borrosas que le causaban dolor y desesperación.

Se tomó otros minutos viendo los candados que las parejas solían poner en el puente por diversión, y cuando se dispuso a salir una voz lo detuvo.

-¿Lucas? – solo era un leve susurro en toda la ciudad, pero a Lucas le detuvo el corazón.

Se volteó y se encontró con Isabella. Estaba tan hermosa, su castaño cabello bailaba al son del viento, traía un lindo vestido que hacían que sus labios parecieran más rojos de lo que eran, estaba perfecta, de no ser por sus ojos, estaban rojos y el maquillaje se la había corrido.

"Parezco un mapache" recordó Lucas, ¡Sí! Eso le había dicho Isabella un día en que estaba igual que ahora, pero... ¿Cuál?

-¡Un mapache!- gritó él, Isabella abrió sus ojos y corrió hacía él, lo envolvió en un abrazo y le dijo con alegría.

-¿Recuerdas? ¡Oh, Dios!- su boca iba en busca de la de él pero la detuvo.

-No, bueno sí. Sólo recordé que un día me dijiste que parecías un mapache, porque tenías los ojos de esa manera- rio- pero aun no sé quién eres.

-Oh, vaya... perdón.

-No hay problema. ¿Quieres sentarte?- la invitó él.

-¿Aquí?

-¿Dónde más?- bromeó.

Una vez que ambos se sentaron y estuvieron mirando al paisaje unos segundos, Lucas continuó:

-Mira, he ido a mi cuarto, he encontrado unas notas, de una tal oreo. No sé qué tienen que ver contigo, o con este puente. Pero me causan cierto sentimiento...

-¿Has recordado este puente viendo las notas?- el asintió.- Lucas, eso es genial, poco a poco irás recordando.

-Yo...

-Espera.- lo interrumpió ella.- Sé que ahora te parezco una total extraña, y lo soy de cierta forma. Pero leíste mis notas y eso te causó algo, ¿No crees que era importante en tu vida? Yo no lo sé, solo sé que nos quisimos, mucho. Y si eso te causo un sentimiento, aunque sea el más mínimo, sé que puedo ayudarte a recordar.

-¿Cómo?- preguntó desconcertado.

-Justo así, reviviendo momentos, recordemos juntos. ¿Has probado alguna vez las galletas oreo?- preguntó con cierta malicia.

-No que yo recuerde.

-Perfecto.- sonrió yse llevó a Lucas de la mano.