Moments décisifs .

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"Solo se ve bien con el corazón".

Alec Pov's:

 —Es hora de un par de consejos.

 —Jace, por novena vez, no necesito tu ayuda —replicó secamente, Alexander. 

 —Te ayude con todas y cada una de tus citas con Magnus, no veo porque con esta no deba hacerlo. A demás, Jane es mi hermana. Se supone que se como debes tratarla, y que debo amenazarte con que no te sobrepases con ella, aunque sepa que no lo harás. 

 —Uno, no me ayudaste con todas mis citas con Magnus. Hay algunas que ni siquiera sabes que tuvimos —Observó el rostro dolido de Jace, y una parte de si contuvo las ganas de reír a carcajadas— y dos "se supone" que sabes como debo tratarla, pero la verdad es que la conozco tanto como tú. 

Jace no pareció darle importancia a sus palabras. 

 —Mínimamente debes dejarme ayudarte con tu aspecto.

Y por el tono que había usado, Alec sabía que no habría forma de persuadirlo. Ya había decidido no moverse de ahí. 

 —¡Por el ángel! Entonces dime que ponerme —exclamó recostándose en la cama.

Su parabatai comenzó a revisar su armario, con una mueca de asco en el rostro.

 —¿Acaso no tienes un sueter que no este agujereado?

Alec se sonrojó. 

 —Jane ya sabe como es mi ropa.

 —Quédate aquí, enseguida vuelvo. 

Y segundos después apareció ante su puerta cargando una pila de sueters y camisas. 

 —Eres más alto que yo, pero mi cuerpo es mucho más escultural y bello que el tuyo. Así que pruébate. 

El nephilim rodó los ojos ante el comentario de su parabatai, y tomó una camisa a cuadros y un sueter negro que le parecieron lo suficientemente largos como para entrarle. 

Se observo ante el espejo. Supuso que le quedaba bastante bien, aunque se sentía algo incomodo. 

 —Esto nos convierte en las mejores amigas que hayan existido, Alec. Falta que intercambiemos trucos de maquillaje. 

 —Bueno, yo podría darte algunos consejos para realzar el brillo de tus ojos —bromeó. 

 —¿Ese no sería Magnus?

 —Bueno, creo que ya estoy listo —comentó el ojiazul, ignorando el comentario sobre el brujo. 

 —¿Y ahora? —inquirió el rubio, sentándose en la orilla de la cama.

Alexander reviso su reloj, eran las 7:30. 

 —Tendré que hacer tiempo hasta las ocho. Y recién ahí podre ir a buscar a Jane a la habitación de Iz. 

 —¿La habitación de Isabelle?

 —Al parecer Isabelle y Clary estaban entusiasmadas con la idea de encontrarle un vestido. 

Jane Pov's: 

 —Isabelle, me parece un poco exagerado. 

 —Pienso lo mismo —comentó Clary, desde la esquina de la cama donde estaba sentada. 

 —¡Pero si estas hermosa! A demás a Alec le gusta lo extravagante. Magnus se habría vuelto loco por un traje en este color.

Jane dio otra vuelta frente al espejo. 

Cazadores de Sombras: La hermana de Jace. (Malec)Where stories live. Discover now