Capítulo 14

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RECUERDOS  

 — ¡Hola Camille!— decía mi padre cuando llegaba de trabajar y caminaba hasta mi cuna para saludarme. Se asomaba por la parte de arriba y era una larga espera para que el me cargara. Comenzaba a patalear y a hacer pucheros para ver si entendía. — ¿Quieres que te cargue?— sonreía. Moví mi cabeza levemente y luego sonreí sin importar que no tuviera dientes.

   — Yo creo que eso significa que si...— decía mamá quien se acercaba a mi padre y se recargaba en su hombro. Ambos me veían, eran los mejores momentos de mi infancia. El celular de mi padre comenzó a sonar y a sonar, mi padre lo saco y comenzó una conversación con una persona. Mi madre le sobo el hombro y se retiro. 

   — ¿Qué pasa Wes?— preguntó — ¿En serio? — por supuesto que ni mamá ni yo sabiamos que estaba pasando. — ¿Viernes? Wes.. lo siento, creo que es imposible que asista. — mamá volteo a verlo y lo miro con ganas de saber de que se trataba. Yo solo seguía acostada en mi cuna y pensando en que momento inoportuno hacerme popó. — Molly tiene cita medica y es necesario que la acompañe. — mamá comenzo a caminar hacía el, creo que ya sabe que esta pasando. Estan invitando a papá a alguna parte y prefiere ir con mi madre. Mamá le sonrió aunque el no pudiera verla. — Lo siento Wes. Podemos organizar otra reunión en otra ocasión... 

   — Baba— dije tratando de decir "papá", mamá me volteo a verme y me tomo en brazos. 

   — Bueno. Nos vemos amigo— papá colgó su celular. Giro su cuerpo y miro a mi mamá a los ojos— Wes me estaba avisando que los de nuestro salón en secundaria se reunirían el próximo viernes. ¿Qué lastima, no?— 

   — Ve, no hay problema por mi. — dijo mamá mientras sobaba el hombro de papá. — Hace mucho que no te diviertes, no quiero sentirme una mala esposa y no dejarte ir. — sonrió. 

   — No eres una mala esposa. Pero.. ¿En serio? N-no.. ¿Que pasará con tu cita medica?— 

   — Mi papá me llevará. Le inventare algo para que no se enoje contigo por no llevarme tú — se rió. El y ella juntaron sus labios, ni siquiera sabia lo que eso significaba. 

   — ¿Y Camille? ¿Puede entrar contigo a la cita médica?— preguntó. Tomo su celular y comenzo a escribirle un mensaje de texto a Wes para decirle que siempre si iría. 

   — Por supuesto que sí, es una bebé. No creo que haya problema. — sonrió. —papá le sonrió y por fin ya no preguntó nada más. 

¿Qué paso después? No tengo ni idea. Creo que finalmente la doctora le dijo a mamá que no podía entrar porque eran unos estudios que no se qué. Papá le hablo a Wes y le dijo que si podía llevarme y este dijo que sí. 

Y ahí estaba yo, en las piernas de mi papá mientras hablaba de deportes con sus amigos del alma. Creo que estuve calmada toda la fiesta, ese nuevo chupón era de lujo. Era como sabor naranja pero sabor a fresa a la vez. 

   — Brian, espero que lleves a Camille cuando mi hija nazca, estoy tan emocionado— decía uno de los amigos de papá. 

   — Claro, Camille necesita convivir con otros bebés— se rió mi padre. Comenzó a darme besos en las mejillas y yo empezaba a molestarme. — Oh mira ahí viene Max.. y trae a su hijo. Gracias a dios. — El tipo ese se acerco a nosotros y comenzó a saludar a todos los hombres que se encontraban ahí. 

   — ¡Hey! Hola Brian — Max saludó a mi papá— Traje a Joseph. — dijo sonriente. 

   — Que bueno, mira. — me cargó— Tiene alguien con quien jugar. Me quede viendo la mirada de ese otro bebé, era encantadora. Lo era hasta que después de unos segundos comenzó a desfigurarse y todos a mi alrededor caían al suelo. Fue aquí cuando me di cuenta que todo era otro estúpida y terrorífica pesadilla disfrazada de un buen sueño.

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