➳ Humano ◂JongKey▸

11

XI

Sacrificios

Δ

Llámalo como quieras, pero todo lo que des volverá a ti en algún momento.

Δ

De las muchas cosas que Kibum creía que podían pasar en su vida, ver a Jinki y a Taemin compartiendo una charla no era una de ellas. Es decir, ambos por separado eran geniales. Pero juntos eran inimaginables. Taemin solía ser un niño caprichoso y Jinki muy sereno y calmado en cada una de sus acciones. Incompatibles. Y aun así, cuando llegó a su casa, ambos estaban charlando como si se trataran de amigos de siempre.

Claro que veía en los ojos de Taemin que algo grave había ocurrido y por eso lo había llamado. Conociendo un poco a Jinki, no dudaba en que se había sentado a su lado para hacerle compañía e intentar mejorarle el ánimo.

Él, por su parte, estaba muy preocupado por su amigo, quien lo había llamado diciendo que había cortado con Minho. Eso era muchísimo menos posible que una amistad entre Taemin y Jinki. Pero ahí estaban los hechos frente a él. Lo peor del caso era que Minho también lo había llamado para verse en la tarde, seguramente necesitaría hablar con alguien sobre Taemin.

—Lo siento, se me hizo tarde, estaba más lejos de lo que creí —murmuró Kibum abriendo la puerta de su casa—, pasen.

Taemin entró primero, yendo directo a tirarse en el sofá. En cambio Jinki se detuvo en la puerta.

—Puedo venir en otro momento si quieres, lo que tenemos que hablar lleva tiempo.

—No, quédate. Taemin llorará un poco y, por sus ojeras, terminará durmiéndose en a los pocos minutos... Suerte que no lo hizo contigo.

Vio una sonrisa en Jinki, quien terminó por pasar e irse a la cocina. Agradeció mentalmente, necesitaba algo de espacio para lo que sería una corta pero intensa charla con Taemin.

Fue rápido hasta su cuarto, cambiándose por ropa que no estuviera llena de sudor. Al volver, se sentó al lado de Taemin.

—Rompimos —murmuró Taemin mordiéndose el labio inferior.

—¿Qué ocurrió? Ayer estaban bien. Dijiste que lo estaban.

—Hoy, cuando todos se fueron de su casa, discutimos... Estábamos limpiando y encontré un pasaje de avión... Yo suspendí mi viaje a Japón justo ayer, porque nos prometimos más tiempo. Pero él tenía un pasaje a China, por un caso de tenencia o algo así... Que lo sacó ayer... Es decir ¿a qué jugamos? Yo dejo mis compromisos de lado pero él parece estar jugando —se quejó, subiendo sus piernas al sofá y abrazándose a sí mismo.

Kibum se puso a su lado, dejando que el menor se apoyara en su hombro. Solo por respeto, y porque sabía que Taemin necesitaba apoyo en este momento, no dijo que sabía que le estaba mintiendo. Se veía en sus ojos que había otras razones por las que, inesperadamente, habían cortado una mañana luego de una fiesta que seguro disfrutaron ambos. Kibum sabía que estaban teniendo problemas, pero no lo suficiente como para que un día se amen y al otro rompan.

Y aun así lo abrazó. Taemin era su amigo, no podía echarle en cara que le estaba mintiendo. A veces no sabía cómo actuar cuando tus dos mejores amigos eran pareja y ambos te buscaban cuando peleaban.

—¿Dormiste? —preguntó Kibum acariciándole la rubia cabellera.

—No... Estábamos ordenando para irnos a dormir. La fiesta terminó muy tarde... o muy temprano, no sé.