Chapter XVII

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Siendo muy sincero no me apetecía ir al "Fin de semana en pareja, la secuela", si lo hacía era porque nunca había ido a Carolina del Norte y, después de haber descubierto a Nicholas Sparks (gracias a la ayuda de Summer), amaba con locura este lugar.

Pensar en él me hace recordar cuando Summer me obligó a ver una película suya. Desde entonces soy su fan número uno. Veo cada película en cartelera, leo cada uno de sus libros. Nuestro sueño es conocerlo algún día...

Nuestro.

Es una de las tantas cosas que ella y yo tenemos en común. Gracias a él vamos obteniendo 3 dieses en nuestras historias.

Me pregunto qué estará haciendo ahora mismo. Las vacaciones estaban a la vuelta de la esquina. ¿Estaría organizando la salida a casa de sus padres como todos los veranos? ¿Iría a la última noche de HIGH?... ¿Pensaría siquiera en mí? Daniel nunca me habló de ella, es más, nunca me habló de nadie salvo de John. La próxima vez me aseguraré de averiguar algo por más mínimo que sea. No puedo estar tranquilo sabiendo que las cosas entre Summer y yo terminaron mal. Es como saber que el Titanic se hundiría y el capitán abandona la nave. ¡Es absurdo! Tengo que volver al barco y enfrentar al iceberg; sortearlo para poder asegurar un futuro.

La música country de mi padre me devuelve a la tierra. Por unos instantes había olvidado que estaba viajando en el auto con ellos; por unos instantes me había sentido libre.

Sam decidió ir con Jonathan en su propio coche, y como no siendo recién casado. Por su parte, Adrian llegaría un poco más tarde debido a que habían perdido el transporte. Y sí, "habían". Mágicamente consiguió novia. ¿Cómo es posible que prefiera tener novias a...? ¡Siquiera le duran un mes! Y créanme, lo sé, espié su Facebook.

Otro milagro del mes era que April había decidió viajar. Me carcome la intriga por saber lo que habrá dicho Dylan cuando la vio en aquel estado deplorable. ¿Qué excusa habría inventado? Yo me iría por, "Estamos arruinadas. Logan no nos puede ayudar y Sam duda de que logremos cumplir con el proyecto". Eso sin duda sería motivo un motivo para llorar. Sin embargo, se me revolvía el estómago de saber que el muy imbécil de Dylan también iría. La buena noticia era que llegarían un poco más tarde, primero pasarían a visitar a la madre de él. Según me dijo mi padre, la pobre vive sola. Hace cosa de dos años su esposo falleció y lo único que le queda es Dylan.

Siendo honesto, yo me suicidaría.

El viaje fue extremadamente largo. Cruzamos toda Carolina del Sur parando para descansar, cargar gasolina y cambiar de conductor. En determinado momento nos encontramos con Sam y continuamos juntos. Debo admitir que en cierto momento fue muy divertido; yo conducía y Jonathan también, el resto estaba profundamente dormido, así que aprovechamos y nos hicimos la tal "Rápidos y Furiosos". Una pequeña carrera de no más un kilómetro por miedo a que alguien se despertara. Mi madre estuvo a punto de hacerlo, pero al final no lo hizo y terminé siendo el ganador. A modo de señas entendí que Jonathan quería la revancha cuando volviéramos. Acepté, agregando que mordería el polvo.

Hasta el momento, el idiota 2 me estaba comenzando a caer bien.

Cuando finalmente llegamos a destino yo estaba más dormido que cualquier otra cosa. Me asomé a la ventanilla y quedé boquiabierto con lo que vi. Un bellísimo e inmenso lago solo para nosotros... ¡con un muelle!

Los árboles contorneaban el borde del lago, escaseando conforme llegaban al jardín. El mismo era inmenso; la verdad que yo pagaría para que me cortaran el césped. Un juego de jardín se encontraba de frente al lago con lo que parecía ser una estufa a gas. Aquello sin duda parecía salido de un catálogo o algo, era sumamente bellísimo y no podía creer que era nuestro. ¿Saben cuántas veces desee un sillón como esos?

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