Kamil Nicole Jenner, la hija del famoso Bruce Jenner y hermana de las famosas hermanas Jenner's, todo perfecto hasta hay , pero hay un problema, ella desconoce el paradero de su padre.
¿Qué pasara cuando un secreto deba ser descubierto?, ¿Cuándo la...
Mis labios estaban secos,mi corazón no dejaba de palpitar y mis manos tenían un leve temblor que me indicaban que iba a tener un colapso nerviosos si no hacía algo al respecto.
-Quita esa cara Kamil-me regaño Kris.
-¿Como quieres que haga eso?-levante mi voz llamando la atención del conductor sin embargo no me importo mucho.Los nervios me cegaban por completo.
Estábamos dirigiéndonos a las oficinas de la revista Elle para tomar las fotos de la portada del próximo mes y a pesar de que practique mucho con Jazmín era muy diferente posar frente a ella que ante muchas mas personas.
Todo consistía en llevar la teoría a la práctica y ese era el problema.
-No seas dramática–abrí mi boca para defenderme pero siguió-vanos-abrió la puerta del auto para bajar ella detrás de mi.
-No estoy lista -negué caminando a su lado.
Kris no me respondió.
Tome un bocado de aire convenciéndome de que todo estaría bien si lograba tranquilizarme y hacer lo mismo que había ensayado.
Cuando entramos al lugar Kris hablo con unas cuantas personas que nos dirigieron a un gran salón que se encontraba lleno de cámaras y personas las cuales al verme enseguida empezaron a decirme lo que tenía que hacer logrando aturdirme más de lo que ya estaba.
<Cálmate Kamil,nada va a salir mal>
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Después de unas horas de maquillaje mi rostro estaba espléndido gracias a la cantidad de productos que aplicaron en el mientras que mi cabello estaba recogido en un chongo a acepción de algunos cabellos que lograban salirse.
A todo mi pesar tuve que esconder toda la vergüenza cuando tres de las personas que se encontraban en la habitación empezaron a vestirme.
Ya nada podía empeorar.
-Hermosa -susurro uno de ello.
Si eran dos hombres y una mujer.
La mujer me dirigió al salón donde se encontraban las cámaras y me llevo frente a ella indicándome que tenía que hacer.
-Te ves hermosa -se acercó Jazz -no estés nerviosa solo recuerda lo que ensáyanos-asentí.
Tenía un gran peso sobre mi con el solo hecho de saber que Jazz confiaba en mi,no quería decepcionar a nadie y mucho menos quería darle una exclusiva a los de la revista en la que dijeron que yo no sabía nada de poses frente a la cámara.
Tome toda la fuerza que tenía en mi interior y me concentre en hacer lo mejor posible esto.
Los únicos límites que tenemos los seres humanos somos nosotros mismos.
