—Suficiente —dijo Sasuke cayendo junto a Takeshi, cortandole la mano con la que jalaba a Naruto con su espada, salpicando el puente de sangre e invadiendo la escena en gritos de dolor.
Takeshi no dijo nada, sólo agarró rápidamente a Sasuke del cuello y lo estrelló con fuerza contra las enormes cadenas que sostenían el puente con su otra mano, parecía haberse recuperado de su estado por un momento. Sasuke activó su Sharingan e intentó meterlo rápidamente en un Genjutsu. Sin embargo Takeshi se dio cuenta y rápidamente salió de él. El morocho se cubrió con las costillas de Susan'o, quemando al peliblanco y obligándolo a soltarlo y alejarse de él.
—¿Qué pretendes hacer llevándote a Naruto? —preguntó Takeshi furioso— No te espera nada bueno con ese zoquete, Naruto, ¡no sabes quién es! Yo te saqué de Konoha y te entrené! ¡Idiota mal agradecido...! —le gritó a Naruto ya sin paciencia, quería convencer al rubio de la manera que fuera, este último no sabía qué hacer, la llegada de aquella protectora chica y la insistencia de Takeshi-Sensei lo tenían demasiado confundido.
—Sólo ven conmigo, Naruto. Tanto tú como yo anhelamos el mismo objetivo —dijo Sasuke. Takeshi se molestó de nuevo. Levantó su mano cortada y la apuntó en dirección a Sasuke, pronto del agujero de su mano salió plasma a gran velocidad por trozos; uno de estos topó contra la agarradera de precaución del puente y lo destruyó por completo, no cabía duda que eran mortales y se encontraba dispuesto a destruir a Sasuke llegando a ese punto. Sin embargo éste se movía ágilmente esquivándolo.
—Naruto... —le susurró Nozomi a punto de las lagrimas— ...Lamento que hayas hecho todo esto por ir a Yugakure y encontrarte con Takeshi-Kun —entonces las lágrimas comenzaron a caer — ¡Lamento que hayas arruinado toda tu vida en Konoha! Pero... Te lo juro, Takeshi-Kun es buena persona... —dijo eso último casi como un susurro mientras se acercaba a Naruto. Éste se alejó un poco de ella, era extraño que una desconocida llegara de la nada y le dijera esas cosas tan extrañas, sin embargo sentía que tenía razón.
Por un momento los trozos mortales de plasma dejaron de seguir a Sasuke ya que la intensa toz había vuelto.
—¡Katon: Gōkakyū no Jutsu! —una enrome bola de fuego salió de la boca de Sasuke, ésta se dirigía directamente a Takeshi, pero la plasma del peliblanco se interpuso, protegiéndolo en una especie de escudo gigante y haciendo que las llamas del ardiente fuego lo rodearan, no parecían tener el más mínimo efecto en la plasma de Takeshi, así que del enorme escudo comenzaron a salir picos con velocidad y la intención de atravesar a Sasuke.
El morocho se dio cuenta en el último momento gracias a su Sharingan, así que deshizo su jutsu de fuego y dio un brinco lejos de los picos de plasma, siendo cortado levemente en la mejilla por uno y rasgado en la espalda por otro. Takeshi aprovechó para atacar nuevamente con los trozos de plasma. Sin embargo Sasuke ya se había cubierto con el Susan'o de nuevo.
Los trozos de plasma se estrellaban contra el Chakra del Susan'o y se adherían a ella, atravesándola y pasando entre las costillas, dirigiéndose lentamente hacia Sasuke. Este último deshizo el Susan'o y se alejó del lugar de un salto, cayendo mal para terminar rodando a lo largo del puente y darse cuenta que se encontraba débil.
—¿Qué sucede? —se preguntó Sasuke. Takeshi comenzó a reír burlonamente por debajo de su cabello blanco que le cubrían los ojos negros.
—Digamos que la plasma en trozos funciona absorbiendo el Chakra, al cortarte la cara y la espalda un poco de ella se metió en ti, absorbiendote el Chakra y entregándomela a mí —dijo enderezándose un poco sobre la cadena, su piel había tomado un poco de color y parecía dar pasos más firmes aunque seguía igual de escuálido— A demás... —soltó una risita burlona— ...Estas en un mundo que no te beneficia en nada, zoquete. Y al parecer, no te queda mucho tiempo... —dijo soltando de nueva esa perturbadora carcajada psicópata que lo caracterizaba ya que Sasuke comenzaba a tener menos control de su propio Sharingan pues comenzaba a sangrarle y activarse el Mangekyō Sharingan por sí sólo.
Sasuke rápidamente se levantó, sabía que Takeshi tenía razón, no soportaba más estar en ese lugar, sentía cómo los peores pensamientos se apoderaban de él y le hacían perder sentido de su personalidad incluso. Así que decidió actuar rápido utilizando el gran Chidori Eisō, que consistía en darle forma de rayo a la misma técnica, haciéndola más letal. Decidió lanzar dicha técnica contra Takeshi, este lógicamente logró esquivarlo.
—Fallaste, zoquete —dijo burlonamente, interrumpiendo su carcajada desenfrenada.
—No planeaba darte a ti —entonces el Chidori Eisō impactó contra el suelo del puente, muy serca de las puertas que impedían el paso a los demonios. Destruyendo dicha puerta y gran parte del puente que comenzó a derrumbarse con rapidez.
Naruto tomó a Nozomi casi por instinto y se alejó del peligro con ella, mientras que Takeshi se creaba una especie de plataforma sobre sus pies de plasma, flotando en la nada, cerca de la entrada al mundo demonio que no le permitía alejarse demasiado. Takeshi sabía que no podía volver al mundo humano.
Sasuke se acercó rápidamente a Naruto y Nozomi, entonces comenzó a salir de ese mundo tan obscuro y entrando al mundo humano. Sin embargo Takeshi había atraído hacia él la cadena de Naruto y la tomaba con fuerza, impidiendo que se escaparan, devolviéndolos al puente que se estaba derrumbando, cosa que parecía afectar demasiado a Takeshi pues sangre descontrolada salía de su boca, oídos y nariz. La única fuente de Chakra que tenía ahora era Sasuke.
—¡Mierda! —maldijo Sasuke cayendo con fuerza en el puente que se estaba derrumbando junto a Naruto y Nozomi. Se sentía más débil, no podía con los 3, especialmente porque comenzaba a ver borroso incluso con el Sharingan.
—Tu te quedas aquí... —dijo con malicia Takeshi comenzando a jalar a Naruto con fuerza de la cadena, haciéndolo sangras de la boca y gritar de dolor.
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✖ The Dark Side
Fanfiction"Una idea puede cambiar el mundo. Yo he visto el poder de las ideas. He visto a gente matar en su nombre y morir defendiéndolas. Pero uno no puede besar una idea. No puede tocarla ni abrazarla. Las ideas no sangran, no sienten dolor. No aman..." ...
