Capítulo 2

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-Se acabó el tiempo señores, dejad sus lápices encima de la mesa y dad la vuelta a vuestro examen

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-Se acabó el tiempo señores, dejad sus lápices encima de la mesa y dad la vuelta a vuestro examen.

Terminé mi examen, menos mal. Esta mañana creí que no iba a llegar a tiempo. ¡Y ya soy libre!


Ayer, mi amiga Laura me convenció para salir esta noche. Decía que me lo merecía, después de las semanas de estudio intensivo y trabajo que me he pegado y debía celebrar el final de los exámenes. Laura es una maestra en  buscar excusas para celebrar algo. Si no fuese por ella, estaría enclaustrada en casa todos los días.  En este caso, algo de razón lleva, porque estas últimas semanas no he tenido tiempo ni para pestañear, lo que me extraña es como he llegado viva hasta hoy.  Pero bueno, ya está hecho y ya no tengo de que preocuparme. Solo espero aprobar y olvidarme de esta odiosa asignatura.

Estoy recogiendo mis cosas de la mesa cuando se me acerca Luis:

- Hola preciosa, ¿qué vas a hacer esta noche? He pensado que podríamos recordar viejos tiempos...

-¡Por dios Luis! ¡Para por favor! Te dije que eso fue un error que nunca se iba a volver a repetir. -contesto separándome de él.

Lo de Luis  fue una noche de esas que querrías olvidar, eso tipo de recuerdos que quieres mantener bien guardadito en el fondo de tu subconsciente y que nunca jamás saliese a la luz. Pero este chico se encarga de recordarme aquella noche cada dos por tres.  Luis es el típico amigo de la infancia con el que siempre me he llevado bien, pero que una noche que salimos todos los de clase, después de varias copas, ocurrió lo que nunca debería haber pasado, nos acostamos, y desde entonces no hay ni un solo día que no me lo recuerde. El chico no está mal, pero digamos que es una red flag andante. Mejor tenerle de amigo que de amante.

Me mira y me pone esa cara que tanto me gusta. Sabe que yo no puedo con eso y que me derrito cada vez que me lo hace:
-Venga Adri... Si lo pasaremos bien...
-No insistas que no. Además hoy he quedado con Laura  en ir a la discoteca que abrieron el mes pasado. Aún no he ido y tengo muchas ganas de ver lo maravillosa que dicen que es.
-Bueno, en ese caso, por allí estaré por si te lo piensas mejor y cambias de opinión -Se va guiñándome un ojo. -pongo los ojos en blanco y sigo recogiendo, este chico no tiene remedio, no cambiará jamás.

 Parece que mi día va mejorando, por lo menos para volver a casa no he tenido ningún problema con el bus.

 Al entrar por la puerta, está esperándome Gucci, mi viejo gatito. Sin poder remediarlo me acerco a el y le acaricio la cabeza mientras le empiezo a hablar balleno:

-Hola cosita bonita, ¿me has echado mucho de menos esta mañana? ¡¡¡Ehhhh!! ¡Gorditooooo! ¿Te ha dado tita Laura las medicinas?.- Y él, encantado de que le mime. 

Gucci lleva conmigo doce años, me lo regaló mi abuelo el día que cumplí doce años y desde entonces  tengo la ropa llena de pelos y el corazón más feliz. El pobre ya va para mayor y no juega tanto como lo  antes, ahora solo quiere mismitos y trocitos de pavo. La semana pasada fui al veterinario con él, hacia unos días que le veía mas alicaído que de costumbre y fue cuando me dieron la peor noticia que me han dado en muchísimo tiempo... Gucci se muere y no se puede hacer nada para evitarlo.  El veterinario me mandó unas pastillas para mitigarle el dolor que pueda sentir, y me recomendó que me fuese haciendo a la idea de que algún día, no muy lejano, mi peludito me iba a abandonar... Desde entonces le mimo más que nunca. Quiero que el tiempo que le quede  sea feliz y no pase dolor. Aunque me parte el alma mirarle y ver que algún día, cuando me levante, no le voy a tener a los pies de mi cama.Pero no quiero pensar mucho en ello. El tiempo que le quede,  lo voy a disfrutar al máximo. Sin poder evitarlo, una lágrima se me escapa de los ojos y Gucci parece darse cuenta de lo mal que lo estoy pasando porque viene hacia mi y me da mimos. Entonces mi grifo se abre y de mis ojos se convierten en las auténticas cataratas del Niagara. No sé cómo podré vivir sin él.

Besos de esos #EDITWhere stories live. Discover now