No me Olvides [Death Note (LightxL) Yaoi]

Capítulo 11

Tan rápido como le empujé sobre la cama y me puse encima de él, no perdí ni un segundo. Le empecé a besar, no le dejaba ni respirar, quería sentirme dentro de él antes de que mi erección fuera a más. Mis manos bajaron hasta sus caderas, acariciándolas, hasta meterla por debajo de su camisa. Light rodeó mi cuello con sus brazos, haciendo que mi erección rozara levemente su entrepierna. Gimió en mitad de un beso, haciendo que me excitara aún más. Me separé de él, dejando que cogiera aire. Tampoco quería ir tan rápido, quería que fuera salvaje pero no tanto como para dejarle sin caminar por dos semanas.

Me quité de encima de él, pero le encerré entre mis brazos. Pasé mis labios y mi lengua por su mejilla antes de volver a sus labios, metí mi lengua en su boca hasta que llegué lo más lejos que pude. Acaricié su nuca, acercando su rostro aún más al mío. Nuestras erecciones se encontraron de nuevo, haciéndome gemir a mí esta vez. Light se apartó de mí, iba a decir algo pero lo callé posando un dedo sobre sus labios.

-No digas nada. No tenemos mucho tiempo, y quiero oírte gemir mi nombre ya.

Su cara se sonrojó completamente, desvió su mirada a un lado. Me fijé en su cuello, era prefecto, sin marcas de dientes, sin ningún chupetón, nadie lo había marcado como de su propiedad. Me alegra ser el primero, y más cuando no dejaré que nadie lo toque. Como a alguno se le ocurra mirarle con una sonrisa pintada en la cara, mi amor por él me llevará a asumir el papel de BB. Soy capaz de hacer daño por Light, de matar por él. Aunque llegara a odiarme. Moriría por él si hiciera falta.

Sus gemidos me sacaron de mis pensamientos, de lo que sería capaz de hacer por él. Mi erección me seguía haciendo daño entre las piernas, pero puedo aguantar. Estoy dispuesto a esperar por Light. Su voz sonaba algo aguda cuando decía mi nombre, cuando suspiraba y cuando se mordía el labio para contenerse.

-Mmm... E- ¡Ah! Elle...

Volví a subir a su rostro, le miré a los ojos con deseo, con ganas de entrar en él. Una sonrisa pícara apareció en mi rostro, él se sonrojó aún más. Pareció asustado por un momento, acerqué mis labios a su oído y le susurré:

-Seré gentil contigo, Light.

De paso mordí el lóbulo, le escuché gemir de nuevo.

-Aah... Elle...

Regresé a su cuello, besándole, mientras desabrochaba su camisa. Mis juguetonas manos no se detuvieron en ningún minuto, acaricié su pecho al descubierto mientras él tiraba de mi melena azabache y su otra mano se aferraba a la sábana azul de mi cama. Cuando su cuello ya estaba marcado como mío, la última marca seguramente no se iría antes de un mes, le quité la camisa. La tiré al suelo, él empezó a desabrochar la mía. La deslizó por mis hombros, haciéndola caer al suelo.

Hice un camino de besos desde su cuello hasta su hombro, me dirigí a su pecho y a su abdomen. Su piel era más morena que la mía, debo decir que yo casi nunca salgo de casa. Una vez más, paseé mi lengua por toda la zona, mordí uno de sus pezones mientras que jugaba con el otro, volvió a gemir para mí. Su mano derecha apretó aún más mis cabellos, la otra se posó en mi espalda y clavó sus uñas en ella. Hice una mueca de dolor, pero no dejé que la viera.

Me acerqué a su bragueta, y desabroché la cremallera. Fue entonces cuando sentí mi espalda ser liberada de unas garras y mi pelo ser libre del agarre de unas firmes manos. Sentí las manos de Light sobre las mías, su respiración agitada chocó contra el puente de mi nariz.

-Tengo miedo, Elle... -jadeó.

Mis ojos se encontraron con los suyos, le dediqué una cálida sonrisa antes de darle un beso en los labios. Bebí de su esencia, disfruté de ese beso lo mejor que pude. Él me siguió el beso, cerró sus ojos y abrió un poco su boca. Aproveché para meter mi lengua por ella, ya conocía el punto débil en su boca: el fondo. Saboreé hasta el último centímetro de ella, llegué hasta el fondo. Ahogó un gemido en mitad del beso, me encantaba cuando hacía eso. Cuando me separé de él, su rostro estaba más que rojo, parecía una fresa. Una dulce y deliciosa fresa.