No me Olvides [Death Note (LightxL) Yaoi]

Capítulo 26

A la mañana siguiente, nada más despertarme y vestirme, salí corriendo de mi casa. No quería ver a nadie, no quería hablar con nadie. Nadie que no fuera Light. Sé que son las ocho de la mañana, pero en una situación así no creo que nadie pueda dormir. Yo no había pegado ojo en toda la noche por culpa de mi hermano.

Iba corriendo por las calles de Tokio, en dirección a la casa de mi novio, que se encontraba cerca de la mía gracias a Dios. Mi mente estaba en blanco, no pensaba en nada que no fuera Light en estos momentos. Estaba dispuesto a empezar de cero junto a él, quería empezar de cero junto a él. Para mí no hay nadie más, nada más. En mi mundo, sólo existimos Light y yo, y todo tendría que salir perfectamente de ahora en adelante. Ya he sufrido bastante, ya he derramado suficientes lágrimas, ¿no? ¿O es que mi destino aún puede torturarme de alguna forma? Yo creo que no.

Me separaron de Light cuando era pequeño, después me lo devuelven fingiendo que no me recuerda, luego cae en coma por culpa de mi hermano, y lo secuestra este mismo. Y para colmo, tengo que recurrir a un chantaje para estar con él. Ya está bien, ¿no? ¿Quién quiere verme sufrir tanto? ¿Qué he hecho para merecer tanto dolor? Sea quien sea, ¿va a poner más piedras en mi camino? Y si es así, ¿por qué? Tengo tantas preguntas sin responder... y sé que nunca sabré la verdad... Pero no me importa, si puedo estar con Light me da igual si lo sé o no.

Lo peor es que, aunque haya intentado hacer las cosas de tantas maneras diferentes, sólo consigo que algo salga mal. Ya sea con Light, ya sea con Beyond... Todo me sale mal. Y si se me explica la razón, sería un gran favor. Me pregunto qué habría pasado si Light no hubiera sido secuestrado... si no hubiéramos peleado. Lo peor es que no podré saberlo.

Dicen que no podemos saber qué habría pasado, pero podemos saber qué pasará.

Mis pies se detuvieron, mi respiración se agitó, y me debilité un poco. Había corrido demasiado, sin saber si estaba yendo en la dirección correcta. Mis manos se posaron en mis rodillas, apoyando mi cuerpo sobre ellas. Empecé a jadear, sintiendo el sudor correr por mi frente y una ola de calor recorrer mi cuerpo.

Ya me encontraba frente a la casa Yagami. Llamé a la puerta fuertemente, esperando una respuesta lo antes posible. Mientras me calmaba, aproveché para relajarme un poco. Me dejé caer sobre la pared a la derecha de la puerta, calmando mi respiración, limpiándome el sudor. Escuché pasos apresurados desde dentro, así que me puse frente a la puerta. 

En cuanto la puerta se abrió, vi a Light frotándose los ojos. Estaba despeinado, tenía los ojos cerrados, y todavía estaba en pijama. No le dio tiempo a hablar, me lancé sobre él, haciendo que los dos cayéramos al suelo. Le di un beso en los labios, acariciando su rostro mientras cerraba los ojos. Él al principio se sorprendió un poco y no me devolvió el beso, pero después enredó sus brazos en mi cuello y me correspondió con dulzura.

-¡Oh, qué tierno! -comenta una voz femenina-. Qué pena que no pueda hacer fotos...

Me separé de mi novio con velocidad, incorporándome y cerrando la puerta. Light también se levantó, y se dio la vuelta, viendo a su hermana sonriendo de alegría mientras se aguantaba la risa. Yo también sonreí, abrazando a mi novio por detrás. Vi como Light se sonrojaba, pero también sonrió.

Nos fuimos los tres al salón, nos sentamos en el sofá y saqué el tema sobre lo de Beyond lo más rápido posible. Le expliqué a Light la situación, le dije que ya éramos libres de vivir nuestra vida y que Beyond no podría molestarnos más.

-¿En serio? -preguntó, emocionado; yo asentí-. Por fin... -suspiró-. Supongo que este es el principio.

Entonces, mi teléfono móvil empezó a sonar. Me disculpé, saliendo del salón, y contesté. Era Watari, así que no me haría falta gritar.