"Un baile bastante caliente"

560K 34.5K 29.1K
                                    



Inhalo aire de inmediato y me doy una última mirada en el espejo de mi habitación, alisando por última vez la falda que había elegido para la ocasión. Hunter, mi novio, me recogería para juntos ir a esa estúpida fiesta en donde todos los estudiantes populares de North Hills asistirán.

¿Me veía bien? Esa era una pregunta que en verdad quería contestar porque en realidad me veía bien, muy bien, demasiado bien.

Hoy en verdad quería divertirme y quería dejar de preocuparme por lo que Hunter hiciera.

Mi vestimenta era algo normal, adecuado y demasiado cómodo. Una falda de mezclilla negra, una camisa fajada y una chamarra sobre esta. Eran unos botines negros los que cubrían mis pies y mi cabello estaba suelto. 

Salgo de mi habitación cerrando la puerta tras mi espalda, encontrándome a Jake, el otro gemelo en el pasillo vestido formal.

—¿A dónde vas?— Le pregunto de inmediato analizando una ves más su vestimenta. Jake se voltea para verme y me analiza de pies a cabeza frunciendo el ceño.

—¿A dónde rayos vas tú y vestida de esa manera?— Al igual que yo, el mira mi outfit.
Se me olvidaba que Jake, de los dos tarados es el más sobre protector.

—Yo pregunté primero— Jake rueda los ojos y exhala rendido.

—Saldré con una chica— Finalmente confiesa, firme en su lugar. Abro mis ojos y también la boca con asombro.

—¿Con quién saldrás?— Lo ataco rápido, pero el con su dedo me dice que no.

—Te toca contestar lo que te acabo de preguntar— Me dice y ahora como el lo hace ruedo los ojos.

—Iré a una fiesta.

—¿QUEEÉ?— Jake grita cuando contesto. Sonrío falsamente. —¿Vas a la fiesta de el equipo?— Jake me pregunta sorprendido.

—Sí, ¿qué tiene de malo?— Al parecer mi respuesta lo dejo blanco ya que no me contesta y me mira con más asombro. Mi mueca es de interrogación total.

—Tu jamás sales los viernes por la noche— Finalmente me revela la verdadero razón de su asombro. Escondo mis labios haciendo una línea recta asintiendo suavemente.

—Las personas aveces quieren un cambio— Esa es mi muy falsa respuesta y retomo mi camino de nuevo.

—Lo que deberías cambiar es esa falda por qué ni creas que así saldrás de esta casa— Ahora sí es cuando me detengo y volteo para encararlo.

—¡Tú no me dices cómo vestir!— Me quejo.

—Pues tal vez pero cuando papá y mamá no están, sí— Exclama.

—No es verdad. Yo jamás me meto en tus estúpidas cosas y tú tampoco te deberías de meter en las mías, ¿Entiendes?— Ahora estaba molesta. Es que no es justo que yo jamás lo molesto con nada y el si tiene que molestarme.

—No. No entiendo— Niega cruzándose de brazos. Este era mi hermano menos preferido.

—¿No entiendes? HA, al parecer nunca entiendes nada— Me burlo de inmediato y el abre la boca para contestar.

American FootballDonde viven las historias. Descúbrelo ahora