Capítulo 22

521 30 3
                                    

Narra Peter

Han pasado meses desde que no sabemos nada de lo que planean los del otro lado. Pablo no me dirige la palabra a menos que necesite algo o información de los vampiros.

Por otro lado Euge se le hace imposible todo con respecto al embarazo por su evidente depresión,
repetidas veces le ofrecieron que si no se sentía bien con su embarazo producto de una violación era mejor que abortara, pero ella se negó a hacerlo.

A pesar de ello debo admitir que poco a poco va mejorando. De hecho, fue bueno que le haya dicho a Lali lo que Euge estuvo apunto de contarme el día que mi púpila y yo fuimos secuestrados por vampiros durante un par de días. Si no le hubiera contado a Lali aquello, creo que nadie se hubiera percatado de que la rubia había dejado de tomar sus pastillas durante dos semanas enteras. Gracias a mí y por el apoyo de sus amigos ahora Euge está un poco más alegre que antes, claro que aún tiene secuelas y crisis, pero pronto estará bien o al menos eso esperamos todos.

Lali se echó a llorar cuando Euge tomó por su cuenta la decisión de reunir a toda su gente cercana incluyéndome para contarnos que estuvo apunto suicidarse y que necesitaba más ayuda de la que le proporcionaban sus psiquiatras y doctores, y que realmente deseaba volver a ser feliz, pero que ahora no se sentía capaz de serlo porque no estaba en un buen lugar, sin embargo Euge espera con ansias que ese día llegue.

-¿Cómo te sientes? -le pregunté a la rubia y ella sonrió-. Supongo que te sientes bien, ¿no?
-Hoy es un buen día, Peter. -me contestó con sinceridad-. Realmente me ha ayudado mucho ir al psiquiatra cinco días a la semana. Además dice que pronto podré retomar mis estudios, pero que con lo del embarazo quizás se me compliqué así que se ofreció a buscar una nueva universidad que trabaje con clases online para que en mis tiempos libres pueda estudiar. Y estoy feliz por ello, en verdad porque pensé que no volvería a estudiar de nuevo y eso me causo mucho miedo. Por el dinero y demás cosas que necesitas para mantener a un bebé.
-Me alegro mucho por ti, Euge. ¿Qué carrera estabas estudiando en tu antigua universidad?
-Diseño gráfico. Iba por el tercer semestre.
-No tengo idea de que dijiste, pero suena genial. Ya sabes por cosas de vampiro, no fui a la universidad y por ello no conozco tantas carreras, sólo las típicas ya sabes.
-¿Fuiste a la escuela? -asentí-. Bueno, es casi lo mismo, sólo que la universidad es más dura y los profesores ni a nadie le importas una mierda a menos que les agrades. Es una difinición muy pequeña de lo que ir a la universidad, pero no sé cómo explicartelo.
-Está bien, te entendí un poco. Igual no es que quiera de repente retomar el colegio o ir a la universidad así que da igual de todos modos. -Euge me miro un poco triste y sentí la pena que sentió por mi falta de educación-. No te preocupes por mí, puedo leer y escribir perfectamente. Bueno, adiós, me tengo que ir, tengo entrenamiento con Lali y no quiero llegar tarde
-Está bien, adiós. -se despidió. 

Me levanté y camine hacia la puerta sacudiendo mi mano en forma de despedida y me dirigí hacía la base de resguardo.

Narra Lali

Llevó horas esperando y Peter no aparece para entrenar y pienso que no solamente esta molesto con Pablo si no también conmigo. Deje de lado mis pensamientos cuando vi su rostro justo enfrente de mí.

-¿Lista? -preguntó-. Perdón por tardar tanto.

Peter me dijo la rutina que tenia que hacer y rápidamente al realizar todos los ejercicios estaba exhausta del entrenamiento.

-¿Acaso nunca hiciste ejercicio en tu corta vida? -Preguntó burlándose. 
-La verdad que no. -Fui sincera y él se río. 
-Entonces terminamos por hoy. -Me lanzó una botella de agua.

Me llegó un mensaje de Pablo. 

-"No podré pasar el resto del día contigo, lo siento"-Pablo.
-"No hay problema entiendo que estés ocupado"-Lali.

Bloqueé mi móvil. Se supone que hoy tendría una cena tranquila en algún restaurante con Pablo en la noche, pero ahora ya no. Sé que Pablo tiene bastante trabajo y que es difícil tener algún tiempo libre, pero últimamente esta actuando como un adicto al trabajo igual que mi padre y eso me asusta. 

-¿Problemas? -preguntó Peter alzando ambas cejas. 
-Nada de que preocuparse. -Respondí.
-Deberías decirle como te sientes. -Sugirió, ¡más entrometido no puede ser!-. Lo siento, no puedo evitarlo puedo hacerlo con todos en este lugar y es inevitablemente, a veces simplemente no lo puedo controlar.
-Pues deberías aprender. -Dije enojada-. No es lindo que te metas en la mente de los demás.
-Lo sé, lo sé pero como te dije no puedo evitarlo...
-¡Lali! ¡Peter! ¿Qué hacen aquí? -interrumpió mi papá.
-Estabamos entrenando Carlos, esa es la tarea que me asignó Pablo. -contestó Peter-. ¿Lo recuerda?
-Oh, lo había olvidado por completo. ¿Qué tal sí vamos al otro lado por un par de lecciones? ¿Peter te apuntas?

Peter asintió. Yo pasó de ninguna manera voy a ir al otro lado después de lo que pasó.

-Lali, ¿qué me dices tú? ¿Vienes?

No, no dile que no. Mi padre me miró suplicante señalando a Peter. ¿Por qué me tiene que pasar esto a mí?

-De acuerdo iré. -Acepté rindiéndome ante la suplica de mi padre. 
-Muy bien los veré en dentro de una hora. -Dijo mi padre y se fue.

Perdón por no haber subido un capítulo la semana pesada. Pero desde ahora en adelante actualizaré la novela cada dos semanas, así tengo más tiempo para escribir y publicar los capítulos a tiempo. Espero les guste la idea 😘😘😘

Gracias por leer
No se olviden de Comentar y Votar

No Cruces Los LímitesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora