Draco

40.1K 1.4K 711
                                    

– Basta, pequeña.– rió Draco mientras le hacía cosquillas para obtener información.

– Pararé sólo si me dices que estás planeando.– dije mientras lo torturaba (le hacía cosquillas).

– Bien, bien. Me rindo.– dijo casi sin aliento.

– Vale, habla.– paré su tortura para poder escucharle.

– Lo que estoy preparando es...– murmuró dubitativo mientras miraba detrás de mí.

– Es...– lo animé a que siguiera.

– Una sorpresa.– salió corriendo de la sala común mientras soltaba grandes carcajadas.

– ¡DRACO MALFOY, VUELVE AQUÍ!– salí corriendo a perseguirlo, me las va a pagar caro.

Ya estábamos terminando clases y se acercaban las vacaciones. Íbamos a durar un buen tiempo sin vernos, claro que Draco me invitó a pasar las vacaciones en la Malfoy Manor, pero prefería quedarme en mi propio hogar, no porque no quisiera estar a su lado, sólo que mi suegro no me da muy buena espina que digamos. Con todo eso de los mortífagos prefiero no arriesgar, aunque me preocupaba un poco por Draco, se iba a sentir solo.

Él y yo llevamos saliendo un buen tiempo juntos, se me declaró en la torre de Astronomía en víspera de navidad en tercer año y ahora estábamos en sexto. Al principio era un poco reacio a mostrar afecto en público, pero a medida que pasaban los días -y que Pansy dejaba de quejarse- era más cariñoso conmigo, e incluso trataba de ignorar a Potter en mi presencia.

– Joder, hurón, eres rápido en algo cuando quieres.– murmuré mientras sentía que mis piernas flaqueaban. Ya habíamos salido del castillo y nos dirigíamos hacia el estadio de Quidditch.

– ¡Cuando te atrape vas a desear que Ojoloco te convierta de nuevo en un hurón para poder escapar, Malfoy!– grité cuando visualicé a Draco ingresando al estadio, lo había perdido de vista.

Como pude apresuré más el paso y entré también.

– Más te vale que la sorpresa que planeas sea buena porque sino muer...– paré en seco, no podía creer lo que veía.

Las tribunas del estadio estaban llenas de gente, casi como en los partidos, podía reconocer a varios de mis amigos; Theodore, Blaise, Neville, Luna, todas las personas más importantes para mí estaban en una misma tribuna. Me sonrieron rápidamente y lanzaron hechizos para formar letras en el cielo.

¿Qué demonios están haciendo?

¿Quie...– murmuraba mientras leía las palabras formadas.

– ¿Quieres casarte conmigo, Valerie Nott?– Draco completó la pregunta que se formulaba en el cielo mientras se arrodillaba y abría una cajita que contenía un anillo de plata con 2 esmeraldas y un diamante en el centro.

Di un salto y me giré para verlo mejor a la cara. Al parecer había cambiado su uniforme, ahora llevaba una camisa a cuadros y unos pantalones vaqueros que yo había comprado para él en una tienda muggle, amaba como le lucía.

Llevaba el cabello desordenado como resultado de la carrera que hicimos hasta acá, aunque estoy segura que él recuerda la vez que le mencioné que me encantaba su cabello rubio de esa manera. Esa vez él había intentado enseñarme a jugar Quidditch con la excusa de que podrían hacernos una prueba sorpresa en Historia de la Magia, aún intento comprender que tiene que ver el Quidditch con esa asignatura.

Valerie, esta vez intenta alcanzarme sin caerte de la escoba, vale?– se burló de mí mientras emprendía vuelo.

– No me subestimes, eh.– respondí dudando un poco.

Estuve una hora intentando alcanzarlo. Dimos, a mí parecer, un millón de vueltas hasta que me cansé y preferí rendirme.

– ¡EH, MALFOY, ME RINDO!– grité haciendo un mini-megáfono con mi mano derecha.

Draco siguió volando, no me había escuchado.

– ¡DRACO, QUE YA, QUE ME RINDO!– grité haciendo un mini-megáfono esta vez con ambas manos.

De repente una fuerte ráfaga de viento me golpea y al no estarme sujetando de la escoba perdí el equilibrio y caí.

Caí no sé cuántos metros.

Pero dolió.

[...]

Abrí los ojos adolorida, lo último que recuerdo fue mi caída de la escoba.

– ¿Cómo está la preciosa señorita Nott?– me preguntó Draco a la vez que me daba cuenta en qué lugar estaba, la enfermería.

– Normal, supongo, y tú?– pregunté con voz ronca observando su cabello completamente desordenado.

– Yo no fui el que cayó de una escoba a no sé cuántos metros de altura.– me regañó mirándome con ternura.

– La parte buena es que te ves encantador con tu nuevo peinado.– me burlé, aunque tenía algo de razón.

– Sólo está desordenado.– murmuró confuso.

– Exacto.

Era simplemente perfecto, era solamente él con un estilo despreocupado que podía llegar a volverme loca. Y así lo amaba, era él la persona con quien quería pasar el resto de mis días, nunca me arrepentiré de mi respuesta.

– Sé que aún somos jóvenes pero estoy seguro de mi decisión y...– se apresuró a decir Draco al ver que no contestaba.

– No, no, no es...– intenté corregirle.

– ¿No?– me preguntó con los ojos abiertos como platos, al borde de las lágrimas.

– ¡QUERÍA DECIR QUE SÍ, SÍ ME QUIERO CASAR CONTIGO!– respondí frustrada mientras la expresión de preocupación de Draco se relajaba.

– Te prometo que no te arrepentirás de tu decisión, pequeña.– susurró mientras se levantaba y me tomaba entre sus brazos para besarme.

El beso con más amor que podría haber recibido en mi vida, el cual hizo desaparecer a las demás personas en las tribunas. En ese momento sólo éramos él y yo, para siempre.

...

Bueno, apenas empecé hoy con este libro de One Shots y creo que es suficiente con 2 por el momento(? Este es más romántico, tal vez, que el anterior, pero no me juzguen, no tengo mucha experiencia como escritora e inconscientemente le doy mejores capítulos a mis personajes fav :v

Como siempre si quieren algo de algún personaje en específico no duden en decírmelo por los comentarios o enviándome un mensaje en mi perfil. Adiós :)

Harry Potter ➳ One Shots Where stories live. Discover now