Fred

19K 701 869
                                    

- Fred, tenemos que ir a un lugar más seguro.- insistí ya por quinta vez.

Las defensas habían caído, Hogwarts estaba más vulnerable y destruido que nunca. Los mortífagos estaban por todas partes y miles de maldiciones eran lanzadas cada minuto. La mayoría de las paredes estaban echas polvo, algunas personas estaban siendo curadas por Madame Pomfrey en el Gran Comedor y otras seguían luchando sin darse por vencidas. 

Estábamos caminando por los pasadizos secretos que Kingsley se supone que nos había encargado defender, pero sabíamos que ya era demasiado tarde, Merlín sabrá quiénes de nuestro lado ya han muerto. 

- Hey, no te preocupes, no hay nadie por acá o sí?- intentó calmarme tomándome de la mano.

- Pero pueden venir, deberíamos escondernos donde tuviéramos una buena vista.- sugerí ideando un plan perfecto.

- Bebé, cálmate.- se detuvo y posó sus manos en mis hombros.- Eres la Ravenclaw más miedosa que he conocido.- se acercó para besarme lentamente.

- Sabes que moriríamos si te llegara a pasar algo.- le dije al finalizar el beso y juntar nuestras frentes.

- Moriríamos? Estoy seguro de que George se alegraría de tener Sortilegios Weasley para él solo.

- No me refiero a George, sino a él.- sostuve su mano y la coloqué en mi vientre.

- A q-qué te refieres, Cassie?- murmuró confuso.- Estás embarazada? 

- Apenas un mes, pero sí, lo estoy.- sonreí honestamente, íbamos a formar nuestra propia familia.

- Vale, ésto no me lo esperaba.- susurró más para él mismo.- ¡Tenías que habérmelo dicho antes! ¿Qué tal si al niño le pasa algo por el estrés?- reclamó volviéndose algo serio y moviendo nerviosamente las manos.

- ¿Cómo sabes que será niño?- le cuestioné ya que yo esperaba una niña.

- Instinto Weasley, cariño, es algo ob...- no terminó de hablar al escuchar el sonido de una explosión cerca de nosotros.

Una pared a nuestra izquierda había caído debido a la explosión. De ella salieron tres mortífagos, uno de los cuales no llevaba máscara y pude reconocer como Augustus Rookwood que había escapado de Azkabán.

- Sí, muy bonita charla chicos, pero creo que no hay que molestarse por saber si es niño o niña.- rió de una manera macabra y desagradable.- Total, no nacerá. 

- ¡EXPELLIARMUS!- Gritó Fred rápidamente al sacar su varita y yo la mía. En cambio, el hechizo no hizo efecto, sino que rebotó sobre el encantamiento protector de Rookwood.

- Hará falta más que eso para derrotarme, pequeños idiotas.- deshizo el hechizo protector.- Ustedes dos vayan a por la chica, yo me encargo del otro.

- Corre, Cassie, yo me encargo de ellos.- dijo mientras retrocedíamos y los mortífagos avanzaban.

- No, Fred, por favor.- le suplicaba mientras lágrimas salían sin control de mis ojos.- Te necesito, te necesitamos. 

- Estaré bien, nos veremos más tarde, te lo prometo.  

- ¡Expulso!

Eso fue lo último que escuché al sentir que salía disparada por los aires y caía golpeándome la cabeza fuertemente contra el suelo.

...

- Weasley, George Weasley, y tú eres?- se presentó un Gryffindor pelirrojo.

- Cassandra Sykes, un gusto.- dije apenada, era la primera persona que conocía de otra casa.

- Eh, hermano! Yo la vi primero.- apareció de repente una fotocopia del otro.

Harry Potter ➳ One Shots Where stories live. Discover now