Harry Potter ➳ One Shots

Draco IV

- Hoy, como muchos de ustedes ya se habrán dado cuenta, estarán frente a un boggart. Sé que esto será más o menos como un repaso para todos.- dijo el profesor Lupin.- Pero creo que siempre es útil retomar las viejas habilidades.

Una oleada de murmullos excitados recorrió el aula mientras todos los ojos se dirigían hacia el gran armario que estaba en la parte delantera de la habitación, que pareció sacudirse por sí solo. 

- Esto es prácticamente magia de tercer año.- me burlé, girándome hacia mi novio.

- La enseñanza en esta escuela es patética.- replicó Draco en respuesta.- A veces creo que eres la única razón por la que me quedo.

Sonreí, una sonrisa de Slytherin, y presioné mis labios en su mejilla viendo cómo su piel blanca se volvía delicadamente rosa. Apoyé la cabeza en su hombro y suspiré.

- Esto es ridículo.- murmuró Draco, trazando círculos en mi espalda.

- Algún problema, joven Malfoy?- preguntó el profesor Lupin desde el frente de la clase.

- Sí, en realidad, sí.- respondió con altivez.

Al oír un murmullo de "Maldito Malfoy" detrás de mí, me giré a darle a Potter una mirada fría, antes de desviar mi mirada hacia el hombre que estaba en  la parte delantera del aula.

- Le importaría iluminarnos?- preguntó el profesor, apoyándose en un escritorio.

- Esto es magia de tercer año, profesor. Francamente, me siento insultado por el hecho de que sienta la necesidad de enseñarnos cómo repeler a un boggart.- se quejó Draco, cruzándose de brazos de manera desafiante.

- Bueno, joven Malfoy, viendo que usted está en desacuerdo con mis métodos de enseñanza y se siente seguro con su propia habilidad mágica, no debería ser ningún problema en absoluto que usted venga y nos de al resto de nosotros una demostración.- replicó Lupin, con una leve sonrisa.

Sin decir otra palabra, Draco se levantó y se dirigió al frente del aula, con la varita en mano. Él había estado estudiando boggarts durante tres años. Esto no sería un problema.

El profesor Lupin anuló lentamente la cerradura y, finalmente, abrió las puertas, mientras cada estudiante observaba atentamente para ver de qué se asustaba el gran Draco Malfoy.

Del armario salió Lucius Malfoy (N/A: Sí, esto se interpreta de muchas maneras :v), y Draco parecía que había echado raíces en el lugar. Susurros surgieron detrás de él, pero no se volvió para defenderse, ni levantó su varita para repeler a la figura que estaba delante de él.

Su padre era su mayor temor.

- Usa el hechizo Riddikulus, Draco! No es real!- grité desde el fondo del aula.

Mi llamada parecía haberlo sacado de su trance mientras dejaba caer su varita en el suelo, provocando un jadeo colectivo de los otros estudiantes al salir disparado hacia la salida.

Ignorando los furiosos gritos del profesor, corrí tras de él, observándolo mientras entraba en la sala común de Slytherin. Apenas se abrió la puerta al decir la contraseña, sollozos llegaron a mis oídos y sentía que mi corazón se desgarraba.

Cuando me senté al lado de Draco, sentí su cuerpo tensarse.

- Está bien llorar, Draco.- dije suavemente, mientras otro sollozo escapaba de sus labios.

- Él es mi padre, Eleanor. Soy un chico de dieciséis años y mi mayor temor es mi propio padre.- susurró el chico, tratando de estabilizar su voz.

No lo presioné, sólo envolví mis brazos alrededor de su delgado cuerpo y sentí que mi corazón se rompía con cada sollozo que él emitía. 

- Nunca me he enfrentado a mi padre, ni una sola vez. Sabías eso? Él me dice lo que espera de mí, qué pasaría si no cumplo con sus malditas expectativas, y nunca lo he cuestionado, ni una sola vez. Porque estoy demasiado asustado, Eleanor. Siento que nada de lo que haga lo hará sentirse orgulloso de mí.- Draco gimió, sosteniéndose de mí como si fuera su salvavidas.

Empujándolo lejos de mí, limpié sus mejillas y lo besé, retrocediendo sólo cuando ambos necesitábamos aire.

- Te amo, Draco. A la mierda sus expectativas, a la mierda tratar de complacerlo. Sólo sé Draco Malfoy, porque eres honestamente perfecto sin él intimidándote. Eres perfecto.- le dije con firmeza.

Draco respiró profundo y se limpió los ojos con la manga de su túnica, luego se levantó, llevándome consigo.

- Estás bien?- pregunté suavemente, y él respondió con un breve pero apasionado beso.

- Ahora.- dijo reanudando su fuerte apariencia exterior.- Creo que tengo un boggart que enfrentar.

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Me doy cuenta que mientras más rápido actualizo, menos leen :v Qué? Les gustan las actualizaciones lentas? Supongo que estaré sin actualizar un tiempo para ver qué procede we ;-; aún así las amo con todo mi heart ㄱㅅㄱ