Harry Potter ➳ One Shots

Draco III

Hoy era el día en el que todos los estudiantes de Hogwarts que no se quedarían durante las vacaciones de navidad, se irían en el Expreso de Hogwarts. Yo firmé para quedarme, junto con un par de magos como Harry Potter, Neville Longbottom, y algunos otros.

- Hey, Draco.- saludé, apareciendo junto a Draco en el pasillo, golpeándolo suavemente con mi codo.

Draco se giró hacia ella en completa adoración mientras miraba sus ojos emocionados.

- Hey, inútil.- bromeó, tratando de ocultar el efecto que tenía sobre él.

- Cállate.- me reí.- Te vas a quedar en Hogwarts durante las vacaciones de invierno?- pregunté esperanzada.

- Nope. Lo siento, Melody.- respondió Draco, sintiendo un poco de culpa mientras su sonrisa vacilaba.

- Ah, está bien.- intenté calmarle.- No te olvides de enviarme toneladas de regalos.- le recordé en broma.

Él rió junto a mí.- Mientras no se te olviden los míos.

- Sí, sí. De todos modos, supongo que te veré después de las vacaciones, nerd.- dije, dándole un abrazo a mi mejor amigo.

---

A medida que vagaba por los pasillos vacíos, giré por una esquina y me choqué con el famoso Harry Potter, al cual lo acompañaba el no tan famoso Neville Longbottom.

- Uh, lo siento por eso, Harry. Hola Neville.

- Hola Melody.- saludaron.

- No sabía que te quedarías por Navidad.- dijo Harry.

- Bueno, aquí estoy.- reí mientras jugaba con mis manos.

- Estábamos a punto de ir a Hogsmeade por unas cervezas de mantequilla en las Tres Escobas, quieres venir?- preguntó Harry mientras Neville asentía con la cabeza.

- Genial, seguro que iré. Soló si ustedes pagan.- bromeé.

Y eso, fue el comienzo de una hermosa amistad.

---

Era el primer día de clases después de las vacaciones de invierno, lo que significaba que la escuela estaba una vez más llena y agitada como siempre.

- Melody!

Oí una llamada lejana detrás de mí cuando estaba a punto de entrar al Gran Comedor a desayunar.

Me giré y sonreí. Era mi mejor amigo, el único e inigualable Draco Malfoy.

Justo cuando Draco estaba a punto de alcanzarme a través de la multitud de estudiantes que se dirigían a la dirección opuesta, Neville se detuvo delante de mí, bloqueando sin querer la vista de Draco.

- Hola, Melody.- saludó alegremente, llevándome al Gran Comedor.

- Oh, hola, Neville.- sonreí educadamente.

Eché un vistazo detrás de mí y logré ver la cara de un molesto Draco.

- Estoy tan emocionado por la clase de hoy de defensa contra las artes oscuras, oí que Lupin nos dejará...- Neville murmuró mientras nos dirigíamos hacia la mesa para desayunar.

"Encontraré a Draco más tarde", pensé.

---

Más tarde, en la clase de pociones, el profesor Snape nos calló a todos para que escogiéramos parejas.

Justo cuando estaba a punto de aprovechar la oportunidad de estar con Draco, un dedo me tocó en el hombro.

Me giré  y fui saludada inmediatamente por la sonrisa de Harry.

- Quieres ser mi pareja?- preguntó.

- Sí, porqué no.- asentí, sonriendo a mi nuevo amigo.

Pasamos la clase entera riendo de lo confundidos que estábamos con los ingredientes.
No mucho tiempo después, causamos una mini-explosión, que pudo haber sido graciosa si Snape no nos hubiera castigado a ambos.

Lo que yo no sabía era que Draco estaba al final del aula, hirviendo de celos.

---

- Draco!- lo llamé, corriendo hacia él en el patio después de su práctica de Quidditch.

Draco se detuvo en seco, pero no se dio la vuelta.

Lo alcancé y sonreí.- Aquí estás, he estado tratando de hablar contigo todo el día.- reí.

Draco cruzó los brazos delante de su pecho.

Fruncí el ceño.- Por qué tan triste, terroncito de azúcar?

- Cuándo tú y Potter se hicieron tan cercanos? Y Longbottom?- preguntó, acusando.

- Qué, ellos? Salimos un montón en navidad; muy divertido por cierto. Incluso fuimos a las Tres Escobas en Hogsmeade. Fue gracioso, Neville accidentalmente botó su cerveza de mantequilla por la nariz cuando le conté una broma. Si quieres te la cuen...

- No me importa un broma estúpida! Por qué siquiera has salido con ellos?

Me aparté un poco de él.- No es gran cosa, Malfoy.- dije, cruzando los brazos también.

- Sí, sí que lo es!- sus ojos estaban completamente abiertos, como si las razones por las que salir con ellos era gran cosa, eran obvias.

Entrecerré los ojos, Draco estaba siendo ridículo.- Cuál es tu problema?

Draco suspiró en signo de derrota.- Es sólo que... realmente me gustas, ok?

- Bueno, dah, somos mejores amigos, rarito.

Draco se pasó la mano por la cara, frustrado.- No, quiero decir que estoy enamorado de ti, inútil.

Quedé literal, en shock, pero me recompuse rápidamente.- Oh, b-bien, genial. Porque y-yo también estoy enamorada de mí.- dije rápidamente.- Digo, de ti, estoy enamorada de ti.- sonreí cálidamente tomando su mano y dándole rápidamente un beso en sus labios.

Draco sintió sus rodillas debilitarse.- Sería un mal momento para decirte que les he lanzado un hechizo a Potter y a Longbottom para que sus ropas llevaran hiedra venenosa?

Lo golpeé ligeramente en el hombro y reí.- Draco!