「 001 」

85.6K 6K 8K
                                    

— ❀ —

Un sonido bastante molesto de un camión en retroceso llenó mis oídos provocándome odiar al señor que manejara esa cosa. Con flojera levanté mi cabeza de la sueva almohada haciendo a un lado las cálidas mantas. Me impulse saliendo de la cama y el frío de la mañana me invadió en cuestión de segundos. ¿Saben? Me encanta el frío, pero a veces es muy hijo de puta, de verdad. Frente a la ventana que daba con toda la calle principal de mi vecindario hice a un lado las cortinas de color damasco que tanto amaba mi mamá, y pude ver el causante de mi despertar temprano. Era un camión de mudanzas estacionándose de lo más lento en la casa blanca de al frente.

Mis cejas se juntaron en el medio de mi frente demostrando mi descontento con todo el ruido. Sin importarme en lo más mínimo el hecho de que hubiera un nuevo vecino volví a mi cómoda cama a intentar descansar un par de horas más.

Solo dormir lo es todo. Oh, sin olvidar la comida, por supuesto.

El timbre sonó incontables veces, ni siquiera había alcanzado a pegar los párpados y ya había otra maldita interrupción. Me levanté y bajé la escaleras casi echando humos por las orejas, cogí el pomo de la puerta gruñiendo en el transcurso de tiempo en que la abría.

—¡Hey, hola!— una pelirroja saludó con su dedos, como si estuviera tanteando algo.

Le examiné de arriba a abajo y ella, bajo mi atenta mirada, tembló como si un vaivén tuviera lugar en la planta de sus pies.

—Hola, ¿qué se le ofrece, morra?

—Bueno perro.— su manera de seguirme el juego me había logrado sacar una sonrisa involuntaria. —Siento venir a molestar a su rancho, pero, esto es muy importante para mí.

—¿Qué pasa?

—Querido amigo vecinirijillo lindo, sino es mucha la molestia, ¿me podría dar la clave del WiFi?

Arqueé una ceja esperando por alguna explicación, una que nunca llegó ya que la chica solo junto sus manos rezando para que aceptara su absurda petición. ¿Dar la clave del internet? Pero en qué estaba pensando ella, no puedes ir por la vida tratando de perro a quien te podría dar una pizca de minutos libres dentro del universo online.

—¿Por qué debería hacerlo?

—¿Porque tú eres una persona amable y las personas amables hacen cosas buenas?— respondió con una pregunta dejándome aún más desconcertado.

—Dame una razón lógica para que acceda a darte ese privilegio.

Sus labios, anteriormente amurrados, ahora formaban un pequeño puchero en la punta de sus belfos, y debía admitir, en ella se veía muy tierno.

—Necesito hacer una tarea.

—¿Y?

—Es para mañana.

—¿Y?

—Será calificada.

—¿Y?

—Ese 'Y' tuyo me está hinchando las pelotas que no poseo.

—¿Y?

WiFi ; Jimin {BTS}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora