CAPÍTULO 26

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LAUREN POV:

Traía el corazón deshecho. Ambas estábamos tan perdidas pero seguras de donde estaba nuestro hogar.

Mis ganas de querer entrar en esa habitación y decirle de una vez que todo esto no era necesario, eran demasiadas. No podía contenerme, creía empezar a ahogarme con mis propias lágrimas... Ella iba a entregarse por completo a él, le iba a dar su compañía por el resto de su vida y eso hacía sentir vacía y sin importancia a la mía.

Después de esa noche donde hicimos el amor, Arturo había llegado y la encontró desnuda en la cama. Yo estaba en el baño terminando de cambiarme para ir por su desayuno... Abrí un poco la puerta y los oí conversar.

*FLASHBACK*

Tuve este terrible sueño donde parecía todo ir bastante bien para luego convertirse en pesadilla, después el desenlace de la tragedia terminaba siendo bastante extraño. Ally aparecía declarando su amor por Arturo, Camila y yo decidíamos estar juntas para siempre sin importar el qué pensarán... Desperté al lado de su cuerpo desnudo, nos habíamos entregado la una a la otra la noche anterior y no podía dejar de sentirme de esta manera, irremediablemente feliz.

Quería ir por el desayuno para ambas y así poder conversar de lo ocurrido, ver como las cosas tomarían el rumbo ahora.

Cuando terminé de alistarme estaba por abrir la puerta del baño pues oí ruidos y creí ella se había despertado. Sin embargo, mi sorpresa fue muy grande cuando logré reconocer la silueta de aquel hombre con un ramo de rosas en la mano, sentado en la cama mientras acariciaba a mi pequeña morena. Ella traía esa inocente sonrisa y entonces oí decirle que la amaba, ella le dio un pequeño beso... Mi corazón se hizo pedazos y solo me dejé caer sobre el suelo mientras me apoyaba contra la pared. Jamás sería él, jamás podría llamarla mi prometida y mucho menos la mujer con quien compartiría el resto de mi vida. Mi sueño parecía perfecto y ahora estando despierta solo parecía vivir en carne propia mi mayor pesadilla, perderla.

Él salió de la habitación y ella se sentó recostándose en la cabecera cubriéndose con las sábanas su cuerpo desnudo.

Abrí la puerta y con las lágrimas recorriendo mis mejillas la miré, su mirada era vidriosa y entonces entendí que ella realmente me amaba. Pero ella no era lo suficiente fuerte para dejar su estabilidad por alguien que no había hecho los méritos suficientes para hacerle saber que se la merece.


-

Todos iban de un lugar a otro en el pasillo, estaban tan ocupados de dejarla lista para que diera el sí y yo solo quería poder salir corriendo pero algo me impedía hacerlo, nuestra amistad.

-Estás más pálida de lo normal-Dinah se colocó a mi lado con una media sonrisa.

-Soy una cobarde, ¿verdad?

-Jauregui, solo tú sabes cuando debe terminar este teatro.

-Él es el tipo perfecto y ha hecho tanto por ella.

-¿Crees que no la mereces?-se colocó en frente de mí y desvié mi mirada-¿en serio?

-Nos acostamos, Dinah.

-Vaya...-ella cruzó los brazos y negó con la cabeza- ¿por qué mierda se va a casar entonces?

-Porque no tuve el valor de detenerla,toda su familia esperó por este momento e invirtieron tanto.

-Pero son sus vidas, ella no van a ser felices por ustedes... Simplemente no les corresponde-colocó sus manos sobre mis hombros.

-He estado tratando de hablarle pero me evita.

-Eso es porque está avergonzada... Ya sabes-suspiró-por acostarse contigo.

-No estuvo bien con ella estando a la vez con él comprometida pero... Yo sé que lo nuestro no se compara en nada a lo que pueda llegar a sentir por él en toda su vida.

-Es que es distinto.

-Lo es, tal vez debería hablar con Sinu o Alejandro pero, me apoyaron tanto desde que perdí a mi mamá que son como unos segundos padres y no podría soportar ver sus miradas de decepción. Ellos se ven muy ilusionados con todo, esta boda es importante.

-Creo que deberías de dejar suponer tanto las cosas, a veces lo mejor es averiguar por ellos mismo qué es lo que de verdad piensan y creen al respecto.

-Es que siento les estaría clavando un puñal por la espalda.

-¿Por sentir? ¿Por ser humana?

-Dinah-suspiré-tal vez...

-Creo que es momento de que vayas a hablar con ellos, en menos de dos horas ella puede que se case y pase a ser la esposa de Arturo.

-Él me va a odiar, siento no es la manera correcta.

-Tienes razón, también debes hablar con él. Si no me equivoco, se está a alistando en la habitación de abajo, la número siete.

-Gracias...

-Valentía, es todo lo que necesitas. Sé completamente sincera, te acompañaría pero Normani quiere que la ayude a alistarse.

-Está bien, en serio te lo agradezco-nos abrazamos y me sonrió.

Empecé a caminar hasta las escaleras y me conduje por estas, fui caminando lo más rápido hasta la habitación número siete, me coloqué de pie en frente de esta y apreté mis puños. Era el momento de ser sincera con mi propio corazón y perder probablemente una gran amistad.

Toqué la puerta y salió Erick, un amigo de la infancia de Arturo. Me hizo pasar y enseguida le pedí nos dejara a solas.

-Estoy tan contento y nervioso-me abrazó sonriente-¿qué tal me veo?

-Arturo...-bajé la mirada y tomé aire, alcé la cabeza y lo miré fijamente.

-¿Está todo bien?

-No, no lo está.

-¿Qué pasa, Laur?-frunció el ceño-me estás asustando.

-Toma asiento, por favor.

-Estoy bien así, dale... ¿Qué pasa?

-Yo...-las lágrimas empezaron a salir- sé que es demasiado tarde pero necesito reivindicarme respecto al hecho de que te cases con Camila-mi voz se quebró.

-¿De qué hablas?

-Ese día en el jardín cuando me preguntaste si estaba bien y yo te dije que sí...

-¿Qué tiene? ¿Ahora crees que no?

-No puedes casarte con ella, Arturo. No puedes...

-Pero...-su expresión de preocupación y confusión era notoria- ¿por qué?

-Porque si lo haces, entonces me matarás por dentro.

-¿Por qué te causaría eso?-se acercó un poco más-¿qué pasa, Lauren?

-No puedo, no es fácil... Me odiarás-empecé a sollozar y entonces nos miramos-lo siento tanto.

-La amas... ¿No es así?-sentí como de pronto se congelaba cada parte de mi ser.

-¿Cómo es que...?

-¿Lo sé?

-Sí...

-Tú fuiste su primer amor.

FRIENDS - CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora