El accidente perfecto #EAP(Libro 1)

"Como la vida te hace"

*CAPITULO IGUAL, PARA LAS PERSONAS QUE NO LES CARGA*

–¿Seguirás aplicando la ley del hielo con mi amigo?

Asiento.

– ¿Hasta cuando?

– Hasta que aprenda a no ocultarme las cosas.

Jonh asintió mientras miraba pensativo hacia el suelo. El día estaba cálido por lo que habíamos decidido salir a almorzar en el patio del instituto, Carla, Levi y Jonh miraban hacia mi esperando que cediera ante mi repentino cabreo por Cameron.

Pero no, señor.

Ese chico merecía un castigo y era el aplicar la ley del hielo.

– Amigosha deberías de pensártelo un poco.– Carla Raco su nuca nerviosa– Pobre chico míralo, triste y desolado.

Mire hacia la dirección donde los tres chicos miraban, a dos mesas más mi novio o eso creo se encontraba sentado mirando hacia la mesa. Lo hacía a propósito y lo sabía, pues como no estaba donde el estaba se sentaba aparte y yo no se lo había pedido el lo decidió.

– Nadie le dijo que se fuera.– Aclare.

– El lo decidió por ser tan mala.– Argumento Carla.– Así que te abandono.

Bufo. Mi amiga traicionera hace lo mencionado levantándose de la mesa y caminando hacia la de mi novio. Boquiabierta miro como Jonh se levanta y sigue a su novia.

– Par de traicioneros.

– Deberías de pensar mejor las cosas, Molly.– Mire a Levi quien apretaba los labios– Mi primo sólo intenta protegerte.

Sin más, se puso de pie antes de irse a dinde mis amigos se habían ido me dedico una mirada seria.

Molesta por ser tan cabezota y quedarme sola bufe. Di una rápida mirada a la mesa donde se encontraban conectando con la de Cameron. Desvie la mirada avergonzada por mi arrebato de furia.

Tome mis cosas mientras comenzaba mi caminata al salón de mi próxima clase. Sabia que estaba actuando como una niña berrinchuda, pero la idea de no saber que es el trato que está haciendo con Mark me llena de ansiedad y estrés.

Su acto de amor me hacía latir el corazón, pero sabía que si en alguna circunstancia yo tuviera que hacer algo arrebatado por el, lo haría. Por ello no queria ni imaginar que es lo que cruzaba por la mente de mi novio, eso sin dejar de pensar en su actitud después de esa vez que lo ví salir de los aposentos de Mark.

Sin dejar mis pensamientos destructivos mire hacia el maestro que trataba de explicar el timo trabajo que tendríamos que realizar antes de dar por concluida la clase. Estábamos a mitad de la semana por lo que sólo trataba una semana entera y la que restaba de esta para salir de este lugar. Y eso en vez de alegrarme me hacía aumentar mi grado de estrés.

En el segundo descanso no salí del salón sabía que los traidores de mis amigos- con justa razón de abandonarme- estarían con Cameron y no les reprochaba pero aún no estaba lista para hablar con el chico que roba mi respiración.

Adelante sumergida en mis pensamientos algunos trabajos finales para evitar me la carga de hacerlos en casa así que pude avanzar por lo menos dos de cinco que tengo pendientes.
A la hora de la salida me encontré con Carla quien como si no pasará nada me abrazo por los hombros burlona.

– Tu chico no se ha dejado de quejar porque te abandonamos.

– Traidora.

– Sabes que te lo mereces, perra.