Intente olvidarme de esas chicas tan (zorras), el mesero se acerca y nos entrega el menú y me sonríe, Camerón solo lo miro con una mirada de pocos amigos.
-Gracias!- le sonreí al mesero, era alto piel clara y pelo oscuro y sus ojos color verde, es muy atractivo.
-denada-sonrió coqueto- regreso en un momento, para tomar su orden.
Tome la cartilla del menú y quedamos en silencio, una de las muchachas que no dejaba de ver a Camerón se acerco y rápidamente le mire con desagradó.
-hola! Soy janetth- le sonrio.
Te quedara mejor que te llamaras zorra y tu apellido sea perra, cariño, que idiota es.
-hola! Soy Camerón-le extendió la mano, ella la estrechó- mucho gusto.
-El gusto es mio-coqueteo- me darías tu número?
-Claro!-la chica le dio su teléfono- hay esta- le sonrio.
-agh!-me crucé de brazo-idiota-susurré.
-gracias! Luego querrías salir con migo?- le sonrió
-Cariño! Es gay-dije frunciendo una ceja.
Camerón no me dejo de ver con rabia, no resistiría a reír la cara de la chica era genial, jamas se lo esperó, si no se iba de donde esta no aguantaría y estallaría en risas.
El mesero se acerco y le dimos nuestra orden, estaba con una sonrisa que el mesero me coqueteo.-QUE! Claro que no-miro a la chica nervioso- No soy gay.
-Claro cariño, no temas en aceptarlo ,nadie te juzgará- dije sonriendo.
-No los soy,Molly Anderson, soy HOMBRE! Y lo puedo com probar!-dijo enojado.
-vale deja de mentir! Ella no te dirá nada-dije girando mis ojos.
-Tu lo pedistes-se paro de su asiento, la chica solo le miraba confundida- Eres muy mentirosa.
Cameron se acerco a mi peligrosa mente y eso no me gustaba para nada, aunque debo admitir es muy chistoso ver a Camerón enojado por una pequeña mentira, se lo merecia, me toma del brazo y me levanta del asiento, sin soltarme con la mano izquierda me toma la cabeza y me planta un gran besó, dios ya se me había olvidado esos dulces labios, me separe de el enojada, era un idiota grandísimo, la chica nos miro con los ojos muy abiertos.
-Eres un- me quede callada, no podía decirle un insultó- Ahhh!- me senté, cruzada de brazos.
-Lo vez nena!- le dijo ala chica- no soy gay, y también te lo compruebo a ti!
-Oh bueno! Yo te marco- se giro y se alejo de la mesa saliendo del restaurante.
Estaba segura que mi cara no tenia un buen color, esta como un tomate o mucho pero, me beso enfrente de esa chica y sin mi permiso, eso me cabreaba.
-Vale, no te enojes, tu empezasteis.
-No, tu empezaste- mire hacia otro lado.
-vale yo le seguí el rollo a esa chica, lo siento.
-Bien, pero por besarme sin avisar, tu pagas la comida- le mire séria.
-vale, tu ganas, yo pagare-negó con la cabeza junto con una sonrisa.
-yeii!-sonreí victoriosa- comida gratis.
-jája, luces mas bonita sonriendo.
-Camerón, no caeré en tus juegos no van conmigo. -rodé los ojos.
-mm..Eso duces- sonrió de lado.
-No todas las chicas pueden ser para ti, ademas no me gustas.
-Ya veremos- iba a decir mas pero el mesero trajo la comida.
-Aquí esta su orden-sonrió dejando los platos-em..me darías tu numero?-me miro nervioso.
-Clar...-no termine de hablar, Camerón me interrumpió.
-Que no vez que viene conmigo?-dije serio- o estas ciego!
-Lo siento! Pensé que estaba libre- dijo serio.
-Ahora lo sabes! Vete!- dijo con el ceño fruncido.
-Oye- fruncí el ceño- el podría a ver sido el padre de mis hijos y ahora nunca lo sabre porque lo has ahuyentado.
-deja de decir tonterias- dijo serio- no que tenias mucha hambre?
-disculpa papa!- dije sarcastica.
No hablamos mientras comíamos, el se puso serio desde lo del camarero pero no me quedaría sin la llamada de ese galán, apunte mi numero en una servilleta, aun comíamos ya casi terminaba mi filete y mis papas, era delicioso comer y comer, terminamos y Camerón fue al baño el mesero me mire de reojo y le indique que se acercara el sin dejar de mirarme llego.
-Ey, lo siento por lo de hace rato, mi hermano es muy protector ya sabes la menor y asi, y aquí esta mi número- le sonreí dandole el papel y el sonrió mostrando los dientes.
-No te preocupes, entiendo eres muy bella y hasta yo te cuidaría como el- sonrió apuntando el numero en su celular.
No pude evita sonrojarme aunque también estaba un poco nerviosa por que Camerón llegara sabia que no somos nada, pero vaya escena la de hace rato, y si señores como lo predije Camerón llegó creo que yo aun estaba roja.
-Que no entendistes?- le dijo parandose enfrente de el.
-Vale, entiendo que sea tu hermana pero no le hare nada, solo le pedi su número.
-Mi..Mi hermana?-dijo confundido- pero que mierda!
-Si, hermanito, no me hará nada solo le di mi celular y ya, anda vamonos-le mire nerviosa.
Me despedí de el mesero y mientras iba empujando a Camerón a la caja para que pagara la comida, se gire en seco y choque con el quedando cerca de mi.
-Porque lo has hecho?-dijo serio.
-Que eh hecho?
-Le diste tu numero, ni siquiera lo conoces, eres muy descuidada en ese aspecto.
-Es mi problema! -dije pasando por alado de el.
El pago y nos salimos del restaurante ahora los dos estábamos serio, me le quede mirando y el a mi, Camerón hizo una cara fea y chistosa lo que me hizo reír mucho.
-jaja Camerón, no hagas eso!- reía sin parar.
-Que?-dijo y lo volvió a hacer- esto?
-Si, eres feo con esa cara- dije tratando de calmarme.
-Me consideras guapo?- sonrio.
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El accidente perfecto #EAP(Libro 1)
Teen FictionQuien diría que tan sólo con 18 años podía tener una vida tan complicada donde los corazones rotos la soledad en el alma y las mentiras tomarian primer lugar en la vida de Molly Anderson quien jamás imagino que llegaría a doler tanto ser salvada por...