Manzana de amor

2.2K 189 89
                                    


«¿Mamá? ¿Estás ahí?»

Regina abrió repentinamente los ojos. No sabía cuánto tiempo había pasado desde que había cerrado los ojos al mismo tiempo que Emma. Cuando escuchó la voz de su hijo abajo, se evaporó en el aire, dejando a la bella rubia descansar, reapareciendo en el hall, al lado de Henry.

«¿Cariño?»

«Wow, mamá. No te había visto» Regina sonrió y Henry miró a su alrededor «¿Dónde está Emma?»

«Está descansando»

«¿Qué le pasa?»

«Está cansada, es todo»

Henry frunció el ceño

«Mientes»

«No, no es verdad»

«Entonces no me lo estás contando todo»

«...»

«¿Qué tiene? ¿Es por el accidente?»

«No, es...por mi culpa»

«¿Por ti?»

«Henry, tengo que hablar contigo, ven»

Su hijo la siguió a la cocina y se sentó educadamente esperando a que su madre hablara.

«¿Entonces? ¿Es grave?»

«No, en absoluto, es...bueno. Emma y yo, nosotras...Hemos averiguado por qué me encuentro aquí, en esta situación»

«¿Ah, sí? ¿Por qué?»

«Nuestras magias. La blanca de Emma y la mía, negra. Son complementarias y al funcionar al mismo tiempo el hechizo ha tenido éxito»

«¿Ah, de verdad? Es guay, ¿no?»

«Sí, es...guay. Hay otra cosa...No solo nuestra magia entra en la ecuación, también...nuestros sentimientos. Nuestros sentimientos, los de la una hacia la otra»

«Oh...¿Eso qué quiere decir? ¿Qué...qué?»

Regina inspiró profundamente antes de lanzarse.

«El amor verdadero, Henry, se trata de eso»

«¿El amr...el True love? ¿El de los cuentos? ¿Estás hablando de eso?»

«Exactamente, Henry. Realmente, en lo que nos concierte, se trata de almas gemelas»

«Pero...entre Emma y tú...¿amor? ¿De verdad?»

«Sé que puede parecer repentino y extraño»

«Sí, lo es. ¡Yo creía que tú estabas con Robin, y que Emma salía con Killian!»

«Henry...»

«No puedes estar enamorada de Emma, ¡es imposible! ¡Sois enemigas! Ok, os habéis acercado para salvarme en Neverland y tengo que confesar que era tranquilizador saber que ya no ibais a mataros, pero de ahí a decir que...que os amáis, es...»

«Escucha, Henry, estamos tan sorprendidas como tú. Pero...hemos hablado, largamente, y comentado las implicaciones, repercusiones...Y hemos llegado a la conclusión de que...de que debemos darnos una oportunidad. Henry, sé que es perturbador y desestabilizador, pero...podemos hablar de ello»

«¿Cómo es posible? ¡Cuando se ama a alguien, se sabe, se ve!»

Regina dejó escapar una pequeña sonrisa.

«Oh, Henry, créeme, no es tan sencillo, tan evidente»

«Pero, ¿cómo podéis amaros? ¡Sois dos mujeres!»

TouchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora