Desde que te conocí fuiste muy especial para mi, cada día contigo era único, eras el único que lograba sonreír. Y a pesar de que ya no estés, me siento en parte bien al saber que ahora me cuidas desde un mejor lugar.
Aún que, a veces quisiera tenerte y no soltarte, me aferro a los recuerdos, a cada sonrisa, a cada momento,a cada abrazo, a cada segundo que viví contigo, Gabriel. Me enseñaste lo que es una verdadera amistad y siempre te lo voy a agradecer.
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22 Cartas a Gabriel ©
Non-FictionDesde que mi mejor amigo falleció, mi mundo cambió totalmente, ya no había aquella poca felicidad que él causaba en mí y ahora todo era oscuro. Escribí veintidós cartas para él, sabiendo que no las podría leer físicamente pero que de igual forma...
