Capítulo 03

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Capítulo 03


Tan pronto cruzaron las puertas de madera y las mismas se cerraron, el rostro de todos los iniciados valía oro. El interior de Ru Jeg era inmenso y su exterior era puro engaño. Ru Jeg constaba de seis niveles que parecían no tener fin gracias a los miles y miles de anaqueles repletos de Index. Los jóvenes estaban perplejos con lo que veían y ni siquiera se percataron de los B.Man que estaban parados frente a ellos hasta que uno de ellos carraspeo lo suficientemente fuerte como para explotar la burbuja de estupefacción.

Había tres filas de hombres y mujeres frente a todos los jóvenes vestidos con una túnica negra y un emblema dorado justo en el mismo medio del pecho. La primera fila constaba de siete personas, tres hombres y dos mujeres; la segunda fila, era un hombre y una mujer. La tercera fila, sólo había un hombre con algunas canas y un bigote bastante pronunciado. De todos los que estaban allí, ese último hombre era el vejestorio del grupo.

El hombre mayor, sin moverse de su sitio, comenzó a hablar en un tono grave pero amable; una rara combinación.

— ¡Bienvenidos sean todos a Ru Jeg! Espero que estén preparados para escoger lo que será su más fiel artefacto y en algunos casos, su único amigo. Primero, iniciaremos con el análisis de masa mágica— los jóvenes de la primera fila se dividieron y se colocaron frente a un monto de jóvenes —Los jóvenes frente a ustedes son B.Man especializados en la detección de magia. Por favor divídanse por pueblos y hagan dos filas para que el proceso sea más rápido— los jóvenes comenzaron a moverse rápidamente y en minutos ya la gran mayoría estaba organizado, algo que sorprendió al anciano.

—Una vez los B.Man hayan analizado su mallet, los mismos le entregaran un pase dorado con la cantidad detectada y le indicaran donde encontraran su Index. Sean sabios en elegir su Index jóvenes, es una decisión que podría cambiar el curso de sus vidas. ¡Que lo disfruten!— el anciano se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia una puerta que había en una esquina del lugar.

Los B.Man comenzaron a hacer su labor y las filas de jóvenes cada vez se iban reduciendo. Rhay y Beira estaban hombro a hombro haciendo la fila. No habían hablado de nada que no fuese acerca de Ru Jeg y las Index voladoras de los niveles superiores.

— ¿Qué tal si uno de esos voladores es el mío? ¿Cómo lo voy a coger? Aun no me salen alas— había comentado Rhay por lo bajo provocando que Beira y unos cuantos más rieran. Al menos ahora el ambiente no estaba tan tenso como cuando venían en el tren.

— ¡Siguiente de la derecha!— Rhay se apresuró y se paró frente a B.Man. Era un hombre joven de cabello negro que seguramente tardó en peinar porque no tenía ni un pelo fuera de su sitio. Sus ojos analíticos miraron sin disimulo a Rhay de la cabeza a los pies y la admirada no se avergonzó ni un poco. Estaba acostumbrada a ese tipo de miradas gracias a sus padres y familiares.

— ¿Acaso eres de la familia Cross?—

—Rhaysei Cross a su servicio— B.Man colocó sus pulgares en la frente de Rhay y sonrió.

—Puedes tutearme, conozco a tus padres; cierra los ojos— Rhay obedeció y ambos se mantuvieron en silencio al igual que todos los de la fila. Había sido la única vez que habían escuchado a B.Man decir algo más que no fuese el mallet y el área donde se encontraba el Index de la persona que estaba atendiendo.

Todos se quedaron en silencio, como si trataran de hacer lo que sea que el B.Man hacía para detectar el mallet. Luego de varios segundos, B.Man sonrió y abrió los ojos.

—Esto es sorprendente...— quitó los pulgares de la frente de Rhay y ella abrió los ojos. Todos estaban mirándolos, para saber qué era lo sorprendente. B.Man hizo aparecer en su mano un pase dorado y se lo entregó a Rhay no sin antes guiñarle un ojo y sonreír con total satisfacción.

—Felicidades Rhaysei, puedes pasar al cuarto nivel— Rhay se había quedado sin palabras y cuando miró su pase casi le dio un infarto. Rhay retrocedió poco a poco, sin creer lo que sus ojos veían.

— ¡Beira!— su amiga dio un salto a pesar de estar cerca de ella. Rhay le dio su pase para que lo viera porque ella no lo creía. Beira miró el pase y comenzó a dar pequeños saltos en su lugar, para luego abrazar a Rhay.

— ¡Felicidades Rhay! ¡Lo lograste! ¡Serás libre! ¡Por todos los cielos! ¡9,999 MG! ¡Eso es increíble!— Rhay aceptó el abrazo con la emoción reflejada en sus ojos aguados. Beira se separó de su amiga con una sonrisa radiante y le devolvió el pase a su dueña que se limpiaba disimuladamente una que otra lágrima traicionera.

— ¡Anda, ve y busca tu Index!— la incitó Beira mientras volvía a la fila, que por poco y tuvo que hacer de nuevo si no llegaba a ser por uno de los borrachos de la playa que le ofreció su lugar porque no quería ser el próximo.

—No, yo te espero— Beira asintió y se paró frente a B.Man aun con la sonrisa cubriéndole el rostro. El joven no se inmutó y tampoco dijo nada simplemente le dio la orden de cerrar los ojos y eso hizo. Estaba que gritaba de la alegría. Rhay sería libre al fin y así no tendría que ser esclava del destino que sus padres querían para ella. En cuestión de segundos, B.Man retiró sus manos del rostro de Beira y le otorgó su pase.

—No deberías estar tan feliz, teniendo ese mallet— Beira miró su pase y aunque se sintió algo decepcionada, no se sorprendió del todo. Ella solo sonrió.

—El mallet no me interesa B.Man...— Beira miróhacia donde estaba Rhay hablando animada con uno de los muchachos de la playa—Lo único que me importa es mi familia...— Beira miró a B.Man y sonrió nuevamentepara luego correr hacia Rhay. Sus palabras eran ciertas. A diferencia de suscompañeros y hasta de la misma Rhay, ella no tenía ninguna ambición...no queríaser libre, porque su alma ya era libre. Ella bien pudo un día levantarse conlos ánimos de huir y sin pensarlo dos veces lo haría. En esa parte sí estaba deacuerdo con su madre al decir que ella llevaba mucho de su familia, porque esasactitudes eran de los Synder. Beira tampoco quería ser reconocida como algunode los muchachos quería, porque ser el centro de atención nunca le ha gustado yla fama no le parecía interesante. Beira simplemente era alguien demasiadolibre que se preocupaba en demasía por todos a su alrededor excepto en ellamisma.


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Diccionario:

B.Man: Aquellas personas con un alto conocimiento en Index, masa mágica y control de la misma. La persona no elige ser un B.Man sino que nace con el talento de percibir la energía que irradia la magia. También, son conocidos como clérigos pero es un término poco utilizado.

Masa Mágica (MG o mallet): el nivel de magia que tiene el cuerpo.

Index: La Orden de CahélWhere stories live. Discover now