[SIN EDITAR] [BORRADOR]
Hylie con el apoyo de su mejor amigo logra abandonar el país que la vio nacer, que la vio sufrir y perder seres queridos. Llena de ilusiones y esperanzas para una nueva oportunidad para ser feliz huye de su pasado.
Axel es...
Dos días han pasado desde que nos enteramos de que Jayden va a ser padre y dos días que no se nada acerca de Charly.
Salía de mi última clase a esperar a Jay, pero quien estaba afuera esperándome era Axel.
- Hola nena. - Me besó en los labios.
- Hola tú. - Saludé. - ¿Jay te mandó a buscarme?
- Nop. - Contestó como niño.
- ¿Entonces? - Le cuestioné confundida.
- Jay debe estar buscándote en este momento. - Habló divertido. Yo lo mire confundida, él hizo un raro puchero que me dió ternura, solo reí.
- Le dejaré un mensaje. - Dije mientras tecleaba.- ¿Charly está enferma? - Le pregunté curiosa.
- No. - Frunzo el ceño y lo miro.
- ¿Entonces por qué no asistió hoy?
- ¿No te lo dijo?- Confundida negué.
- Se fue a Inglaterra, hace una media hora la dejamos en el aeropuerto.
-¿Que? -Exclamé.
- Sí, dijo que quería tomar otros aires y esas cosas, así es Char. - Se encogió de hombros.
- Con razón no me contestaba las llamadas. - Me dije. -Sabía que si me lo decía no lo aceptaría, ¿por qué no me lo dijiste?
- Creí que lo sabías, ya que son amigas.- Hizo una pausa como recordando algo. -Dijo que cuando el avión aterrice llamaría, le diré que te llame. - Pronunció eatacionandose frente a un complejo departamental que no conocía.
-¿Qué hacemos aquí?
- Aquí vivo.- Dijo con simplesa. -No vivo con mis padres, pero voy a menudo.
-Ahh.
Salimos del auto y subimos al ascensor hasta el piso 3, el edificio tenía 5 pisos.
Me quedé totalmente sorprendida. Su departamento era impresionante.
En el living las paredes eran de tono gris con... ¿Marrón? No se identificar ese color. Había un sillón de esquina azul marino, era precioso.
Un poco más lejos se podía apreciar una isla con el mismo tono de las paredes.
Su dormitorio es igual de lindo que todo el departamento; tiene un sofá, un televisor plasma, el baño y un librero. ¡Libros!
Me acerqué al librero y tomé 2, La cúpula de Stephen King y Buscando a Alaska de John Green. Me senté en la cama a observarlos. Hasta que sentí su respiración en mi cuello, me volteé a míralo, quedando nuestros rostros demasiado cerca, me quedé contemplandolo y él hizo lo mismo.
Bajé la mirada por que ya sentía mis mejillas arder, él levantó mi mentón para que vuelva a míralo y me beso; un beso suave y tranquilo, Se fue intensificando mientras el me recostaba y quedar encima de mi cuerpo sin aplastarme. Sus besos bajaron hasta mi cuello y su mano por debajo de mi blusa.
Él me acariciaba tiernamente y subía mi blusa despacio. Me encantaban sus caricias, pero sabía que debía parar.
- Axel. - Llamé. Al parecer no me escuchó. - Axel. -Llamé un poco más alto. Se detuvo y me observó al tiempo que soltaba un suspiro. Con un último beso en mi coronilla se acostó a mi lado sin dejar de abrazarme.
Me apoyé un poco más cerca y caí en los brazos de Morfeo.
* * *
Unas cosquillas me despertaron, entreabrí los ojos y observé a Axel dejando besos en mi cuello, mientras me tenía completamente acorralada.
- Hylie... -Susurró con la voz ronca y deliciosamente sexy.
-Mmm... - Me acurruqué más cerca de su torso. Escuché su afamada risa.
- Hylie, un poquito más y harás despertar mi virilidad. - Abrí como platos y me alejé de inmediato con las mejillas ruborizadas.
Axel soltó una estruendosa carcajada. Me levanté huyendo de esa borchonosa situación.
Él se levantó, se acercó a mi y tomó mi cintura para terminar plantándome un dulce beso.
Juntó su frente con la mía y susurró con voz enternecida. -Eres muy inocente Hylie. -Le iba a responder, pero Axel me interrumpió con un beso que fue obstruido por el sonido de mi celular.
Me alejé y contesté sin ver el identificador. -¡Ciao!
- Hylie Marie Petrilli ¿Donde carajos estás?
¡Oh, santa María de las ovejas!
Estoy muerta... Esperen... Jayden me llamó ¿Hylie Marie?
