Pricey《Jikook Lime》#KpopAwards2017

27

Choi me estaba colocando de forma meticulosa el lujoso traje que debía vestir hoy.

Estaba tan concentrado en que no hubiese ni una sola arruga que hasta olvidó la usual inamovilidad de su cara, frunciendo su ceño mientras le hacía el lazo a mi corbata.

Jimin no le quitaba el ojo de encima mientras me colocaba todo, era bien consciente de la mirada de Choi hacia mi.

-Ya está listo, señor.

Choi pasó su mano por la corbata para alisarla y se retiró inclinando su cabeza.

-Gracias por su trabajo, Choi. -dijo Jimin.

El mencionado volvió a inclinarse y desapareció por el largo pasillo.

Jimin se acercó a mi y lo primero que hizo fue aflojarme la corbata antes de plantar un beso en mi boca.

-No me gusta tan apretada, te hace parecer un aburrido.

Me hago el ofendido.

-No hay nada que me ponga que me haga verme mal. Estaría igual de bien con ella apretada.

-Si lo hay, cariño, la camisa de lunares chillones que te pusiste para conocer a mis padres.

Já, esa había sido buena por su parte, pero yo tenía otra mejor.

-Pues yo creo que debió gustarte mucho porque esa noche follamos.

-Touché.

Sonreí orgulloso y yo tambien le aflojé su cuello.

-¿Estás nervioso?

-No, te tengo a mi lado.

Puse los ojos en blanco.

-En serio Jimin, deja ya de ser asi.

-¿Así como?

-Así, ya sabes...-Golpeé su hombro- tan amable conmigo.

-Oh, ¿prefieres que te grite?

El recuerdo de mi pesadilla regresó y negué al instante.

-No, mejor sigue como estabas.

Salimos de la mansión y esta vez montamos en el deportivo de Jimin, uno de muchos, decía que se estaba cansando de que le llevasen siempre.

Me abroché el cinturón y le miré.

-¿De verdad no estás nervioso?

Jimin estaba a punto de girar las llaves para encender el motor pero mi pregunta le detuvo.

-¿Por qué lo estás tú?

-Bueno...no sé...-me revolví un poco sobre el asiento- No muchos millonarios deciden anunciar su homosexualidad, que mantienen una relación sentimental con su empleado y que se mudan a otro continente para seguir con el negocio el mismo día en un congreso lleno de gente importante.

"Que mantienen una relación sentimental con su empleado" aquello acababa de decirlo yo, realmente Jimin y yo no...no habíamos hablado nada de eso...tan solo estábamos...no sé, no sé lo que eramos en esos momentos.

Jimin pareció leerme la mente.

-Bueno sobre eso...creo que deberíamos hablarlo, ¿no crees?

-Ahá...

-Quieres...no sé...¿que lo llamemos de algún modo en especial? ¿Que le pongamos etiqueta?

Me encogí sobre mi mismo, estaba pasando por un momento vergonzoso sin motivo. Odiaba la palabra "novio", me parecía una cursilada.

-No...no quiero, yo no lo necesito, solo...solo necesito que me quieras. -confesé, sorprendiéndome a mi mismo con mis palabras. Jimin abrió ligeramente la boca.

-Repítelo.

Crucé mis brazos en silencio y miré por la ventana.

-Llegaremos tarde a tu estúpida reunión.

Jimin pellizcó mi rodilla, y él debía conocerme demasiado bien, porque sabía que yo me giraría enfadado para mirarle, y lo hice, y el aprovechó el momento para besarme.

-Estúpido tú. -dijo con una sonrisa.

Bufé y volví a mirar por la ventana, algo sonrojado.

Si, puede que ser el empleado inútil de Park Jimin no fuese tan malo como pensaba al principio.