Me gustas

89 3 2
                                    

Permíteme la osadía de dirigirme a ti.
Permíteme dedicarte unas palabras y decirte que esto no lo
hago por cualquiera.
Si quieres, piensa que no es para ti, así te sientes menos culpable.
Permíteme decirte que me gustas.

Quiero un día más contigo.
Esta vez, robándole a Cronos el tiempo y a Ra el sol, porque la luna ya me la regalaste hace tiempo.

Creo que no hace falta que te repita lo difícil que es para mi esto.
Porque tú rompiste mis esquemas ya establecidos y por ello
no sé muy bien qué siento por ti.

De tus caricias que desprendían más caricias
y de tus besos que anhelaban más besos.

Supongo que no serás consciente de las veces que te he pensado.
Supongo que no sabrás que estoy algo cansado de las palabras,
de nuestras esperadas palabras.

De tus abundantes elipsis y de mi intento de perfección
literaria cuando te escribo, que resulta imperceptible para ti.

¿Te he dicho ya que todo momento se me queda corto contigo?
Que haces parar mi reloj.
Que haces parar el tiempo cuando te acercas.
Que haces que todo lo que ocurre se detenga
y simplemente pase porque TÚ estás.

Malditas hormonas y maldiga adolescencia.
Debería estar estudiando o de fiesta.
Y aquí estoy,
pensándote,
una noche más.

Encendiste algo en mí,
de nuevo.
Vivía bien en la sombra del sol.
Creía que lo tenía todo.
Pero me faltaba algo.
Y no hace falta añadir que ese algo eras tú.

No quiero quererte.
No quiero nada de eso.
Simplemente quiero un día más a tu lado
y que se repita para siempre.

Que no exista el libre albedrío ni tampoco el progreso.
Solo quiero un bucle infinito a tu lado.

Solo quiero volver a pensar que el mundo es solo mío
[y ahora también tuyo].

Y si te digo la verdad,
no me importaría equivocarme si es contigo.

Tu mirada la entiendo,
tus ojos son oscuros, pero a la vez claros,
sinceros,
llenos de recuerdos y sueños.
Ojos que espero seguir mirando
mientras te agarro del cuello y te digo que me gustas
mucho.
Que me robes un beso
y yo te robe otro.

Gracias,
por hacerme sentir como una nube
de la que seguro que caeré,
pero, madre mía,
que bien se está aquí contigo.

Escrito en versoWhere stories live. Discover now