Escrito en verso

Me gustas

Me gustas,
pero no de una forma común,
como puede gustarme un buen libro
o una sorpresa.
No existe un abecé que nos defina.
Y eso dice mucho sobre tu literatura.
Me gustas de otra manera,
más libre, más tierna y profunda.
Como el revolucionario la revolución
como al niño el recreo.
Me gustas de manera caótica e impuntual,
como una herida para toda la vida.
Me gustas sin flores, sin citas concertadas,
con un amor de verdad,
con las ganas de escuchar como planeas cargarte el mundo,
con mi locura por querer ser tu mano derecha.
Que vamos a perder los papeles
cualquier día de estos,
nosotros, los enfermos crónicos del miedo,
y no daremos explicaciones por nada
aunque se vaya a morir
por querer entender
esta forma despreocupada de hacer las cosas
a nuestra manera,
esta forma poco convencional
de saber que te necesito
cada vez que te miro a los ojos.