Escrito en verso

El corazón lleno de estrellas

La anciana le dijo que
para curar a su amigo
necesitaba hacer nueve cosas,
existía un remedio que le reveló un curandero,
que hacia milagros en un lugar de Sudamérica,
y no era nada fácil.
A la chica no le importaba,
aferrándose a aquella esperanza,
por pequeña que fuera,
estaba dispuesta a lo que fuese
para encontrar ese remedio.
La anciana reveló que para curar la falta de amor,
había que tejer un corazón lleno de estrellas.
Era un remedio que no fallaba,
debía encontrar nueve personas,
que fuesen nueve clases diferentes de amor,
y recortar una estrella de la ropa de cada una de ellas
sin que se diesen cuenta en diez días.
Cuando tuviera los nueve retales,
debía llevárselos a la anciana,
que tejería un corazón lleno de estrellas para llevárselo al amigo de la chica.
¿Con eso despertaría del coma?
Bueno, cuando tuviera el corazón, le faltaría algo,
una estrella secreta, la número diez.
Permitiría que las otras nueve tuvieran poder.
¿Y dónde encontraría esa estrella?
Cuando hubiera aprendido las claves del corazón,
tendría que descubrir por si mismo,
cuál es el secreto último del amor que todo lo cura.