Capítulo XV: El Reencuentro

3.6K 403 713
                                    

Advertencia: algo de tortura, morbosidad o como quieran llamarle. Nah, lo considero leve.

Está varado en un infierno. La noche al parecer se impone de diestra a siniestra y el tiempo no transcurre.

Todo le pesa, las coyunturas le arden y con suerte es capaz de abrir los párpados, mas la ausencia de luz no ayuda mucho. El mundo le da vueltas y el espíritu también. Las memorias llegan con suavidad, regresando de una forma tan simple y tranquila que parece una tortura.

Y un nombre vaga en su mente.

—Bill... —murmura con letargo y la voz rasposa.

Se trata de reincorporar, pero su cabeza se remece con un dolor agudo que palpita desde su nuca. De a poco las imágenes se van aclarando. Recuerda que estaba hablando con Bill y de repente todo se fue a negro.

—¡Dipper! —exclama una voz familiar.

No sabe de dónde viene, pues no puede ver. Todo está en penumbras.

—¡Al fin despiertas! —vuelve a decir él.

—¿Bill?

—El mismo —alza una ceja con orgullo, aunque el otro no lo pueda ver.

—Te escuchas... —tose un poco, le arde la garganta—distinto.

—He pasado los últimos dos días gritando, Pinetree.

—¿Dos... días? —abre los ojos, sorprendido, aún anonadado por todo el golpe de información— ¿p-pero cómo?

—Verás —respira hondo—, de repente me desperté y me encontré en la eterna y fea oscuridaaaaaad —habla exageradamente el demonio— y pensé que estaba solo. ¡Pero! —dice entusiasta— Se me ocurrió leer mentes —da media sonrisa—, ya lo sabes: soy todo un genio.

—Nacho nerd.

—¡Ejem! —alza la voz "enojado"— Y luego me di cuenta que estaba contigo. Desde ese entonces he estado horas y horas hablándote para que despiertes, pero... ¡no despertabas! Te conté muchas cosas que no debí decirte y-

—¡¿Qué tu qué?!

—Olvídalo Dipper, no volveré a decirlas —sonríe victorioso.

—Ugh... como sea —suspira cansado—. ¿Al menos sabes dónde estamos?

—En una de las celdas de Chester.

—¿Qué? —entrecierra los ojos— ¿Quién?

—Ese tal Papá Pitufo erótico y pedófilo a quién le robaste los hongos, Pinetree —responde con tranquilidad.

—¡¿Q-qué?!

—Y para variar nuestros brazos están encadenados a las paredes —gruñe a lo bajo mientras mueve los brazos con rabia—. Aún no lo entiendo, estos monstruos no pueden salir de su mundo.

—Digamos que tengo amigos en el otro lado, Bill Cipher —contesta una voz chillona.

A lo lejos se imponen los sonidos unos pasos que se aproximan cada vez más a ellos, haciéndose lugar también un pequeño destello anaranjado. Tras unos segundos una figura se hace presente al otro lado de las rejas: es Chester, quien sonríe como un demente mientras sostiene un farol en la mano.

—No me tomó mucho tiempo darme cuenta que tú eres ese insoportable triángulo —habla con un tono déspota y luego tira un escupo al suelo—. Ya sabes —limpia su boca con el antebrazo disponible—: tu voz es parecida, usas las mismas expresiones, eres igual de ladrón y tienes una obsesión con el amarillo y el negro,—describe con rencor—, pero —lo observa de arriba hacia abajo— tu apariencia es una blasfemia.

To już koniec opublikowanych części.

⏰ Ostatnio Aktualizowane: Mar 28, 2017 ⏰

Dodaj to dzieło do Biblioteki, aby dostawać powiadomienia o nowych częściach!

We'll Meet Again (BillDip)Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz