Mi Sexy Doctora [EDITANDO]

La Confesión [Editado]

Sofía POV'S

Llegue a mi casa después de unos minutos y al entrar me encontré con mi hermana, esta al verme se acerco a mi y me abrazo.

- ¿Como te fue en tu consulta? - Preguntó Diana

Al escuchar lo que mi hermana me había preguntado mis mejillas comenzaron a teñirse y de un momento a otro mi rostro estaba totalmente rojo, ya que mis pensamientos regresaron a lo que había pasado anteriormente en la consulta de esa misma tarde.

- P~pues m~muy b~bien - Tartamude

- ¿Porque tartamudeas? - Pregunto mi hermana

- N~no es nada - Respondí nerviosa

- ¿Y porque estas tan sonrojada? - Preguntó mi hermana con picardía

- Es...que...conocía a un chico ¡Si eso! - Respondí de un momento a otro

- ¿Okeeey? - Dijo mi hermana con clara confusión

Subí a mi habitación y me recoste en mi cama, no podía dejar de pensar lo que había ocurrido esa misma tarde en la consulta, me encontraba demasiado confundida para ser sincera.

Al estar en mi habitación no podía de dejar de hacerme preguntas, mi mente era un sin fin de dudas y preguntas. Después de eso empecé a pensar como era que mi vida dio un giro de 180 grados.

Pensaba constantemente de como era que yo Sofía Jones pase de ser una chica prestigiada con un guapo y popular novio de un día para otro me empecé a sentir atraída por una mujer y peor aún que es mi doctora de alguna forma, una doctora que conoce a toda mi familia y hasta llega a ser alguien de confiada para mi madre.

Rápidamente trate de borrar esos pensamientos de mi mente, pero simple y sinceramente no podía hacerlo, lo que tampoco podía olvidar era que había invitado a una cita a mi nutriologa, aquella mujer que en ese momento me traía con mi mundo de cabeza.

A los pocos minutos los pensamientos comenzaron a cansarme y sin tener razón de en que momento pasó me quedé dormida.

El tiempo pasó y me desperté a causa de que Justin entró a mi habitación para que bajará a cenar, me senté en la orilla de mi cama para ponerle atención a mi hermano.

Sinceramente no tenía hambre en ese momento, se lo dije a mi hermano y él lo comprendió para después cerrar la puerta de mi habitación, me volví a recostar en mi cama, empezaba a cerrar mis ojos cuando mi mamá abrió la puerta. Note que se encontraba algo enojada de seguro por algo que pasó en el trabajo, se acercó a mi cama y se sentó en esta.

- ¿Como te fue en tu consulta? - Preguntó mi mamá

- Pues muy bien, mira - Dije mientras le entregaba los papeles de mis resultados

- Muy bien, pero me voy a dormir tengo un dolor de cabeza que no me da para más, que descanses - Comentó mi mamá

- Igualmente - Respondí

Mi mamá salió de mi habitación y yo mire la hora en el reloj de mi mesita de centro, eran las 9:57 pm, me recorte en mi cama y me volví a dormir

*****

Al la mañana siguente, era una hermosa mañana de sábado, empecé mi rutina diaria, me bañe, me vestí con un hermoso vestido color coral con decoraciones blancas en el borde, cuando termine de vestirme baje a desayunar, y en la cocina ya se encontraban Justin y Diana.

Mi hermana me miro con una cara de que quería saber que había pasado ayer y Justin sólo saludo con la mano.

- Buenos Días - Dije amablemente a mis hermanos.

- Buenos Días hermanita - Respondió Justin

- Buenos Días Sofía - Dijo Diana

- ¿Como durmieron? - Pregunté

- Muy bien - Comentó Justin

- Yo de igual manera - Dijo mi hermana - Por cierto, me acompañas a mi habitación por favor Sofía -

- Si, claro - Dije un tanto nerviosa

En mi mente ya podía predecir que era lo que Diana me quería preguntar. Al llegar a su habitación ambas entramos y nos sentamos en su cama.

- Ahora dime, ¿Que pasó ayer por la tarde? - Pregunto mi hermana

- Nada, sólo conocí a un chico muy guapo, que resultó ser un primo de mi nutriologa - Mentí de forma descarada

- ¿Y como se llama ese chico del que hablas? - Preguntó ella

- Pues...se llama...¡James! - Dije

- Okay, ahora dime la verdad - Respondió Diana

- Pero ésa es la verdad - Comenté

- Sofía, te conozco perfectamente bien y esa... no es la verdad - Dijo ella

- Ya te dije esa es la verdad - Dije comenzando a sentirme fastidiada

- Aún no te creo, pero hablaremos esto otro día ¿Entiendes? - Dijo Diana algo molesta

- S~si - Respondí algo asustada

- Ve a desayunar - Dijo ella aún molesta

Salí de su habitación y baje a la cocina, tomé lo que debía desayunar y me dirigí al comedor, en este aún se encontraba Justin, pero ahora estaba acompañado por mis padres. Me sente y almorcé rápidamente, al terminar de desayunar subí corriendo mi habitación y mire la hora, eran las 9:05 am, tomé mi celular y le llamé a Daniel. Durante la llamada le dije a Daniel que viniera a mi casa, el aceptó y a los 25 minutos el llegó, baje a recibirlo y después subimos a mi habitación, ya en esta, nos sentamos y comenzamos a conversar.

Sinceramente le tenía demasiada confianza a Daniel y él me tenía demasiada confianza como yo a el, y un ejemplo de que me tenía mucha confiada era que el me había contado su mayor secreto, el era homosexual. Y si el me había dicho eso porque yo no le diría los que me habia sucedido.

- Daniel, ¿Te podría contar algo muy serio y que nadie tiene que saberlo? - Pregunté dirigiéndome a Daniel

- Claro, ti sabes que puedes confiar completamente en mi - Dijo Daniel

- Creo que...me ha empezado a atraer... mi nutriologa - Dije

- Pero, ¿Te gusta o sólo te atrae? Porque se debe hacer notar que hay una diferencia entre esos dos términos - Preguntó Daniel

- No lo sé, creo que sólo me atrae - Respondí

- Entonces, debió de haber algo diferente en tu doctora que hizo que te empezará a atraer, ¿Había algo diferente en ella o tal vez traía o utilizaba algo que te llamo la atención ese día? - Preguntó Daniel

- Pues ese día traía un vestido algo escotado y ese día creo que se veía más linda de lo común - Respondí

- Tal vez sea eso - Comentó Daniel

- Pero aún no te cuento lo demás - Dije

- ¿Aún hay más? - Preguto Daniel

- Si - Dije

- Bueno cuéntame - Dijo rápidamente Daniel

- Pues durante la consulta ella tropezó y yo traté de atraparla, pero caí junto con ella, después ella me beso, nos separamos totalmente sonrojadas y ella se sento en su silla, y yo en la mia, pero no se que fue lo que me pasó y salte el escritorio y la volví a besar, después la invite a comer un helado y ella aceptó, pero antes de salir le volví a besar - Dije nerviosa y avergonzada

- Hay niña cuando aprenderás a pensar las cosas antes de hacerlas - Dijo Daniel

- No lo sé Daniel - Respondí

Seguimos conversando, despues de unas horas Daniel se fue de mi casa, volte al reloj que se encontraba en mi mesita, eran las 4:48 pm.

Cada vez faltaba menos para mi cita.