Mi Trébol de Cuatro Hojas

Epílogo

-Se desarrollan muchas historias de amor en la guerra ¿cierto? sobre un soldado que se separa de su familia y de la mujer que ama para ir a cumplir un deber con su país. Ellos esperan el día de su regreso, dificultades tras dificultades, bombas y miedo mutuo, para al final... al verlo aparecer entre la multitud se lanzan a los brazos del otro y se besan con pasión abrasadora. No recuerdo cuantas veces he escuchado esto antes.

"Ha pasado ya un año cinco meses y aunque me gustaría decir que la guerra ha terminado no es así como son las cosas. La batalla entre las dos Coreas es por el momento impredecible, no se sabe cuándo llegaran a un mutuo acuerdo o hasta donde alcanzara su ambición para considerar lo hecho suficiente. Aun cuando veo las noticias o leo algún artículo por internet siento que el nudo se forma de nuevo en la boca de mi estómago y me cuesta respirar con normalidad. Hay personas que son especiales para mí y a diario me pregunto si continuaran con vida; me alivia recibir sus cartas una vez al mes.

"Durante varios meses seguíamos despertando por la madrugada con sudor frío recorriendo nuestras frentes y espaldas, respiraciones irregulares y una cómica mirada de terror impresa en nuestros rostros. Fueron noches de insomnio para ambos, teniendo pesadillas en las que uno de los dos caía al suelo sin vida envuelto en una sábana de sangre; a veces simplemente era porque pensábamos que si dormíamos más tiempo no nos percataríamos de un ataque sorpresa, una boba cayendo en el techo, o algún incendio. Todo el tiempo con los nervios de punto y esperando lo peor terminaba por agotarnos mentalmente. Fueron semanas difíciles, que requirieron de mucho trabajo para superar.

Se detuvo para soltar un profundo suspiro que denotaba su alivio, les lanzó una mirada corta antes de volver a reclinarse en su silla con los brazos cruzados sobre el pecho y regresar sus ojos al alto techo de la galería.

-Aun pienso que nuestra decisión fue egoísta, quizás demasiado, depende de cómo lo mires. Pero una vez que lo asimilo solo puedo llegar a obtener esta justificación: ¿Qué habría hecho otro en nuestro lugar? Siwon por ejemplo, un hombre que estaba destinado a heredar la empresa de su padre, un futuro brillante y privilegios que cualquiera envidiaría, teniendo que dejar todo atrás... ¿Qué habría hecho él si le hubieran ofrecido la salida del infierno?

"Sin temor a equivocarme la mayoría habría salido de ahí sin chistar, porque lo único que deseas es poder escapar y evitar lo inevitable.

"Pero la culpa actúa por su cuenta y mientras más la escuchas más jode tus momentos felices. Lo que me recuerda que fue justamente por esta razón que tuvimos nuestra primera pelea, una de verdad. Llevo una lista mental de ellas, en total han sido tres, y en cada una estuvimos a punto de mandarlo todo al diablo.

Rió fuertemente teniendo en su cabeza la imagen de su enfurruñado hombre, y trayendo a su memoria las escenas de esas peleas que antes le parecían cosa seria.

Un jovencito de cabello azul levantó tímidamente su mano y murmuró con voz tan baja que fue difícil escucharlo: -¿Ustedes de verdad han pensado... separarse? Quiero decir, se ven como una pareja muy e-estable... es difícil de creer.

Los demás comenzaron a murmurar descontroladamente, mirándose entre ellos y mirándolo a él expectantes a su respuesta. Se aclaró la garganta y todos volvieron a cerrar sus bocas para escucharlo.

-No es como lo imaginan. Donghae y yo somos tan inestables como cualquiera, y ambos somos hombres por lo que vuelve nuestra relación todavía más conflictiva. Siempre alguno de los dos quiere llevar la batuta de lo nuestro, entonces comienza una competencia para ver quién es el más apto....es una estupidez, siendo que nunca nadie gana.

"Solía reprocharle los primeros meses, culpándolo de abandonar a nuestros compañeros de guerra. Llegado un momento en que él no lo soportó más decidió devolverme los insultos con el puño.