Nico 04

6.8K 912 100
                                    

—No necesitas ir.

Estaba tirado en la alfombra, mientras jugaba con las pulseras de colores de mi hermana.

—Tengo que ir. De todos modos no tengo a nadie quien pueda ayudarme —respondí haciendo rodar las bolitas de colores.

Troye se recostó sobre su silla y dio un largo suspiro.

—Tendrás que pagarme —respondió con un aire cansado —.

Supongamos que no le hice caso.

Supongamos, porque salté hacia él agradeciendo infinitamente su aceptación ante mi súplica visual.

—¡Graciaas!

Troye soltó un gruñido y me alejó como si fuese una plaga.

—Ya lo pagarás.

¿Qué me dices si hablamos?  Where stories live. Discover now