Capítulo 29

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  Qué será de tí, 
cambiaste sin saber toda mi vida, 
motivo de una paz que ya se olvida. 
no sé si piensas tu en mí, como yo en tí.  


Sebastián: No, tu no le vas a avisar a ella (dijo con rabia), precisamente ella es la culpable de que Gabriel esté así, por su maldita culpa, ella y solo ella es la culpable de todo (dijo enojado dejando a Becky con los ojos abiertos).

Becky: ¿De qué estás hablando?, Brisa es su novia y debe de saberlo, a parte no te entiendo por qué dices que ella es la culpable de que Gabriel esté así? (preguntó sorprendida).

Sebastián: Porque ella es la culpable, Gabriel se puso así porque vio unas fotos de Brisa en la cama con otro hombre (dijo enojado).

Becky: Eso es mentira, Brisa es incapaz de hacer una cochinada como esa (dijo enojada).

Sebastián: No, no es mentira, yo mismo vi las fotos (dijo suspirando y sentándose de golpe en uno de los asientos), Gabriel salió como alma que lleva el diablo, supongo que fue a verla y a reclamarle y al parecer es cierto porque cuando llegó a la casa llegó muy mal, se encerró en el estudio y luego en el cuarto se tomó dos botellas de tequila, prácticamente se intoxicó (dijo con preocupación mientras Becky estaba con los ojos abiertos y sorprendida por el hecho).

Becky: Sebastián, yo conozco a mi amiga (dijo sentándose junto a él), es que debe de haber una explicación, ella está realmente enamorada de él, nunca la había visto así, es que no lo puedo creer (dijo preocupada).

Sebastián: Mira Becky, tu amiga acaba de matar a Gabriel, después de todo lo que le costó levantarse por lo ocurrido con su esposa, esto fue clavarle un puñal en el corazón, no entiendo el por qué hacerle esa cochina, si no lo quería de verdad, pues lo mejor hubiera sido que dejara las cosas como estaban al principio y no dejar que él se enamorara como lo está de ella, no me parece justo Becky, no se lo merece (dijo con decepción).

Becky: Yo...yo no sé qué pensar (dijo desconcertada), yo tengo que hablar con ella, necesito que me explique, es que debe de estar pasando algo, Brisa no es así (dijo y sin más salió del hospital rumbo a la casa de brisa).

Anastasio: Lucrecia, tenemos un nuevo cliente, al parecer llegó al pueblo, pero no sé, no me gusta, este tipo es muy peligroso, no quisiera que nos metamos en problemas (dijo tomando un trago).

Lucrecia: Ya deja de ser tan cobarde Anastasio, si bien por mercancía, pues hay que tratarlo bien, las muchachas saben cómo hacerlo (dijo arreglándose el cabello mientras se miraba al espejo).

Anastasio: A ver Lucrecia, te tomas todo a la ligera, es un narco, asesino, además de que es un cerdo, no me gustaría que  metiera sus narices en el negocio, nos podemos meter en un problema, no nos conviene tener gente como él frecuentando el cabaret, podría averiguar sobre la trata de blancas, no nos conviene eso (dijo serio).

Lucrecia: Ay ya Anastasio! (dijo levantándose y guardando sus cosas en la cartera), nadie tiene por qué saber de ese negocio, hasta ahora lo hemos manejado con discreción y precisamente hombres como él son los que pagan fortunas por esas muchachitas idiotas, gracias a eso te puedes dar todos los lujos que tienes así que no te quejes (dijo apretándole la barbilla y salió de la oficina).

Anastasio: Maldita vieja, con Santino no puedes jugar, tengo que asegurar mi pellejo por si acaso, este no es como los otros, con este debemos tener mucho cuidado (dijo tomando un trago).

Completamente EnamoradosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora