Kiss & Tell (Harry Styles y Selena Gomez)

Arcadas

Fruncí el celo aún con los ojos cerrados, mientras que los abría de golpe, para levantarme de la cama, corriendo hacia el baño.

Tenía mil preguntas, como por ejemplo el como había llegado ayer a la habitación, pero en este momento no podía pensar en nada.

Me puse frente al retrere y devolví todo el trago que había ingerido la noche anterior.

Me sentía terrible: me dolía el estómago, la cabeza, las piernas, la garganta... ¡¿Por qué tomaba la gente?!
Este era un sentimiento que me prometía no volver a tener jamás.

Mi cara seguía metida en el inodoro, mientras que, por mi garganta, seguía devolviéndose el vodka de la noche anterior.

¡Maldita sea! ¡Esto se sentía horrible!

Mi cabello comenzó a alejarse de mi cara, con el rozar de unos dedos, entre éste.

El tacto había sido imprevisto, pero era suave, procurando alejarme el cabello de la cara.

La cabeza aún me dolía, pero ya no estaba vomitando.

Levanté el rostro lo suficiente como para poder soltar el agua del inodoro.

-¿noche divertida?-

Fruncí el ceño en cuanto escuché esa voz. Me volteé bruscamente, un poco más de lo que habría debido, provocando que mi dolor de cabeza se intensificara.

Tras de mí se encontraba Styles, usando unos shorts deportivos.
Me estaba regalando una sonrisa comprensiva.

-¿qué haces aquí?-

Pregunté, sin esperar ninguna respuesta en específico.
Él subió los hombros.

-solo te estaba recogiendo el cabello...la primera resaca no es algo que se olvide con facilidad-

Subí una ceja.

-¿quién dijo que esta era mi primer borrachera?-

Él rió un poco.

-¿no es esta tu primera borrachera?-

Me quedé en silencio, pensando en una contestación inteligente para responder a eso.

-eso pensaba-

Dijo Harry, comenzando a salir del baño.

Subí los ojos.
Traté de levantarme del suelo, pero me sentía demasiado débil, así que solo volví a caerme.

Pude escuchar un resopló, antes de que Styles diera media vuelta y pusiera sus manos en mis brazos, ayudándome a levantar.

-no necesito tu ayuda-

-mejor calla, Selena. Necesitas descansar-

Styles caminó a mi lado, hasta llegar a el borde de la cama.

-duerme-

Fue más una orden que una recomendación. Levanté una ceja, pero no protesté. No valía la pena protestar cuando él tenía razón: necesitaba descansar.

-mi teléfono está anotado en una hoja, junto a la mesa de noche, por si te sigues sintiendo mal, llámame-

-¿y se puede saber a donde vas a ir a estas horas de la mañana?-

Pregunté, con los ojos cerrados.

-Selena, son las 2 de la tarde-

Dijo Styles, en tono de burla. Abrí los ojos con rapidez.

-¿qué?-

Pregunté, sorprendida. Habría jurado que eran las 7 de la mañana, cuando mucho.

-las 2:03, para ser exacto-

Dijo, mirando su reloj de muñeca.
Maldita sea. Me había quedado dormida. Tenía que llamar a Zayn.

-¿por casualidad no tienes el teléfono de Zayn?-

-claro que sí-

-¿podrías llamarlo?-

Pregunté, comenzando a levantarme de la cama, de nuevo.

-supongo que sí-

Dijo, mientras sacaba de su bolsillo el iPhone.
Unos segundos después me pasó el teléfono.

-¿hola?-

Pregunté, hablando por el celular.

-¡y está viva! Hola Selena-

Dijo Zayn, riendo, al otro lado de la línea. Me pasé la mano por la frente. Por poco seguía viva.

-Zayn, lo siento. Me quedé...-

-vomitando hasta más no poder, ¿me equivoco?-

El tono burlón en su voz me hizo subir los ojos, mientras trataba de esconder la sonrisa que amenazaba en aparecer por mi cara.

-no fue para tanto-

-no te creo-

Me respondió, casi riendo.

-¿entonces lo de hoy...?-

Pregunté, tratando de concentrarme en algo distinto a el hecho de que aún me diera vueltas la cabeza.

-yo estoy libre. Solo dime cuando y paso por tu habitación-

Mis ojos volaron por la habitación hada encontrarse con Styles. Ese solo movimiento me había provocado un nuevo y más vívido sentimiento de nauseas.

-Mmmm, digamos unas dos horas-

Respondí, comenzando a dudar si podría siquiera terminar la conversación antes de salir corriendo al baño de nuevo.

-está bien. La cena va por mi parte-

Dijo, antes de colgar. Como pude le di el celular a Styles para luego ir al baño.
Cedí a las nauseas y me deshice frente al retrete.

De nuevo mi cabello fue alejado de mi cara con prontitud, mientras mi estómago se retorcía, producto de mis arcadas.

-quizá debería faltar al entreno hoy...-

Dijo Styles casi para sí. Algo en ese pensamiento me hacía sentir extremadamente incomoda. Los pocos recuerdos de la noche anterior de fueron colando a mi mente; Styles con esa chica entre las piernas, su rostro, el como me había pedido que no dijera nada...todo era abrumador, por algún motivo desconocido.

Como pude quité mi cara del inodoro, lo solté y comencé a hablar.

-no, no, tranquilo. Ya me estoy sintiendo mejor...-

Y como si mi cuerpo quisiera hacerme quedar en ridícula, las nauseas volvieron, haciéndome vomitar de nuevo.

Casi podía imaginarlo subiendo una ceja.

-ajá-

Dijo. Subí los ojos y volví a dejar ir el agua del baño.

-es en serio. Además, Zayn viene pronto-

-¿dos horas?-

Me volteé a mirarlo: tenía los brazos cruzados y, tal como lo había predicho, una ceja subida.

-no, como en quince minutos. Mejor vete al entreno-

Dijo, levantándome del suelo con mucha más fuerza de la que había tenido unos minutos atrás.

Caminé hasta la cama, con Harry tras de mí.

-igual te repito: mi número está en la mesa de noche. No tengo problema en salir de entreno antes-

Me acosté y con los ojos cerrados hablé.

-tranquilo, Styles. No te preocupes por mí-

Solo obtuve como respuesta un silencio. Seguramente ya se había ido.

-no me preocupo por ti, Gomez. Solo no quiero el piso lleno de vomito cuando llegue-

Abrí los ojos, para verlo junto a la puerta con una sonrisa irónica en los labios.

Subí los ojos y me volví a recostar, dispuesta a tomar otra siesta antes de que llegara Zayn.