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Maratón (2/3)

Jared.

Me había levantado ya hace unas cuantas horas, había llamado a la secretaria de José Hernández, el mejor ginecólogo de la ciudad y por el cual se muere Ana.

Quiero arreglar todo con ella, casi no me habla y siento que me muero.

—River, ve a despertar a mamá— Acaricié las mejillas del pequeño Pitbull, que ya no está tan pequeño, ya tiene cinco meses.

Ana y yo no nos tratamos como antes desde hace dos mese atrás.

Al escuchar a River ladrar alegremente tomé el desayuno y lo coloqué en la bandeja, caminé con esta hasta la cama de mi esposa y sonreí al verla. Mi hermosa castaña veía sonriente su abultado abdomen, siempre lo acariciaba y comenzaba a hablarle.

—B-Buenos días, Ana— Ella miró con sorpresa y luego miró la bandeja que se encontraba en mis manos.

Se sonrojó.

—Hola—Ella me mostró una sonrisa y caminé para dejarle sobre las piernas la bandeja con el desayuno— Gracias, Jered.

—De nada, Cariño— Tuve el atrevimiento de tomar sus meillas y depositar un pequeño beso sobre sus labios.

Ella simplemente bajó la mirada muy sonrojada y comenzó a comer.

Es un buen comienzo, no nos besábamos desde hace dos meses.

**

Me quedé observando como un idiota enamorado a Ana mientras se arreglaba, aún no sabía que le había reservado una cita con otro ginecólogo, era lo mejor, así evitábamos peleas absurdas.

Ella estaba frente al espejo peinándose y aplicándose un poco de maquillaje. Suspiré enternecido, Ana es la mujer más hermosa de este maldito mundo y se ve mucho más linda ahora que está embarazada.

—Me vas a gastar, Cariño— Ella me sonrió y comenzó a caminar hacia mí.

—Siempre he dicho que lo que es bonito hay que verlo— Acaricié suavemente su mentón y la besé suavemente.

Extrañaba sentir sus labios sobre los míos, sus bonitas y delicadas caricias sobre mi cuerpo me encendían. Coloqué mis manos en sus caderas y ella rodeó con ambos brazos mi cuello para así intensificar nuestro beso. Sentía como poco a poco mi cuerpo comenzaba a arder.

—A-Ana, no llegaremos a la cita— Suspiré al sentir como sus labios ahora estaban en mi cuello.

—Que aburrido eres.

Sonreí, creo que todo vuelve a estar bien.

**

—La ruta para la clínica de María no es por aquí—Ana me miró muy extrañada.

—Te reservé una cita con un mejor doctor— Me encogí de hombros mientras doblaba una esquina— Decidí que era mejor evitar malos encontrones.

— Ella me miró muy sorprendida— ¿De verdad?— Yo asentí—¡Qué genial!

Ella acarició una de mis mejillas y me fue inevitable sonrojarme.

Me siento como la primera vez que salimos.

Aparqué el auto al frente de la clínica, salí del auto, caminé hasta Ana y le ayudé con la puerta.

—Estoy embarazada, no soy inútil.

—Si uno no es caballero se quejan y si uno es caballero también se quejan —Me hice la victima— ¡¿Quién entiende a estas malvadas mujeres?!

Ella carcajeó y besó mi mejilla.

—No seas dramático, Jared.

—Me gusta hacerte reír.

**

—Es un gusto conocerla, Señora Jatar— Vi con recelo al Doctor.

Es un niño bonito, bufé al ver como Ana le miraba embobada. El hombre es blanco, de mi estatura, de cabellera castaña y corta. Sí es medio musculoso y cada vez que sonríe mis esposa se sonroja.

Espero y sea gay.

—Jared— El Doctor me llamó— ¿Quieres venir a ver el Ecosonograma para el Sexo de bebé?

— Le sonreí— Eso no se pregunta, hermano.

Entré a la cabina, Ana estaba ya con la bata azul y acostada sobre la camilla. El hombre se posicionó al frente de la máquina, subió la bata hasta arriba y colocó una pequeña manta cubriendo el vientre de Ana.

Aplicó el gel y comenzó a mover el aparato sobre el abdomen. Mis ojos comenzaron a picar al ver al pequeño feto chupándose el dedo pulgar, el Doctor capturó la imagen con una sonrisa, luego siguió moviendo el aparato, el bebé no movía las piernas y quitaba la visibilidad.

—¿Qué creen que sea?— El hombre nos miró a ambos sonriente.

—Niño.

—Niña.

El hombre soltó una risa.

—Pues, les tengo noticias— El bebé había abierto sus piernas y José capturó la imagen— Ven esto— Señaló la pantalla y ambos asentimos— Pues, Jared espero que hayas apostado algo bueno con Ana porque haz ganado. Es un sano niño.

¡JODER SÍ! ¡NIÑO, NIÑO, NIÑO!

—Te lo dije, Amor— Le saqué la lengua a Ana— Mi puntería es muy buena, primor

—¡C-Callate, Tarado!— Ana estaba sonrojada hasta las orejas— No digas e-eso frente al d-doctor.

—Es hombre—Me encogí de hombros— Él me entiende.

Miré al hombre y este me sonrió.

**

— Espero verlos el próximo mes— El hombre se acercó a Ana, besó ambas mejillas y la abrazó— Felicidades por tu niño, Ana.

—Gracias—Ella le sonrió muy feliz.

Ella salió primero por la puerta y José me tendió la mano.

—Espero verte nuevamente, Jared— Mi nuca se erizó al escuchar eso— Me gustaría ver a ese bonito rostro por aquí otra vez— El doctor me hizo un travieso guiño y me sonrió.

Maldita sea, sí es gay.

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Ya no quiero venir.

*****

JAJAJAJAJAJAJA me encantó el final xDDD

Holiwiliussss!! Ness regresó *Baila como una loca* Extrañé como no tienen una idea escribir TTwTT

Tenemos a un niño como siempre quiso nuestro Jared... Ahora... A pensar en un nombre, capaz y Ana le coloca Elison xDDD

Nos leemos luego, hermosas <3

Ness





El Mejor Amigo De Mi Tío: Mi Esposo (Book#3)Where stories live. Discover now