II: Telmarinos

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Cambie mi uniforme de la escuela por un lindo vestido dorado, en mi hombro me colgué mi arco junto con su carcaj y en mi cintura guarde mi espada, mi cabello lo amarre en una trenza, para que no estorbara.

Todos decidimos salir a buscar narnianos que nos puedan ayudar, es muy extraño que hasta ahora no nos hayamos encontrado ni uno. 

Salí de entre los arboles, en los cuales nos cambiábamos para que los chicos no nos vieran, detrás de mi salio Dahlia, junto a Susan y Lucy, Edmund y Peter nos esperaban ya vestidos.

- ¿A donde vamos? - Pregunto Susan -

- Vamos por el bosque, tal vez nos encontremos a algún narniano - Dijo Peter -

El comenzó a caminar hacia el bosque, todos lo seguimos, mirando a nuestro alrededor muy bien, Narnia se ve diferente, como sin vida, los arboles no danzan, no se escuchan los pájaros. Todo esta como si no tuviera vida, como si alguien le hubiera robado la vida.

- ¿Creen que Henrik este con vida? - Pregunte reteniendo las lagrimas -

Todos me voltearon a ver tristes, Edmund apretó mi mano.

- Si lo esta, haremos hasta lo imposible para encontrarlo - Me dijo Peter sonriendo triste -

- Amamos a nuestro sobrino y lo encontraremos, te lo juro - La pequeña Lucy vino hacia mi y me abrazo, le devolví el abrazo con tristeza, ya no es la pequeña Lucy, Lucy ya esta creciendo, ya no es la pequeña que hace unos años descubrió un mundo mágico -

- ¿Que habrá sucedido en Narnia? - Pregunte tratando de cambiar de tema -

- No lose, pero lo que sucedió fue grave, como para que destruyeran Cair Paravel - Dijo Susan -

- Creen que los narnianos... ¿Estén bien? - Pregunto Dahlia triste -

- Eso espero - Respondió Edmund -

Caminamos durante horas, nos parábamos a descansar y luego seguíamos, no teníamos caballos por lo que tenemos que caminar, nos agotamos mucho y mas rápido.

Seguimos caminando hasta que llegamos a un lago, a la lejanía se encuentra un pequeño barco con dos soldados. 

- ¡Escondanse! - Susurro Peter -

Rápidamente me escondí junto a Edmund atrás de un árbol, Lucy y Susan atrás de un tronco y Dahlia junto con Peter tras unos arbustos. 

Los soldados se detuvieron en mitad del lago, agarraron a un enano, este tiene los pies y las manos amarradas con sogas y en su boca un pañuelo. Los soldados lo alzaron, con intención de tirarlo al lago, rapidamente lleve una fleche a mi arco y todos salimos de nuestro escondite.

Susan disparo su flecha dando en el barco, llamando la atención de los soldados, ellos nos miraron confundidos.

- ¡Liberenlo! - Grito Susan imponente -

Ellos hicieron caso omiso y lanzaron al enano al lago, Peter y Edmund se lanzaron al lago a salvarlo, uno de ellos agarro una ballesta, pero yo fui mas rápida y mi flecha le atravesó, cayendo al lago, el otro soldado se lanzo agua asustado.

Edmund saco el bote, mientras Peter saco al enano, fuimos hacia ellos y Lucy le corto las cuerdas al enano junto al pañuelo.

El enano, se quito las cuerdas y escupió el agua salada a la arena, nos miramos entre nosotros confundidos, ¿Quienes eran esos? 

El enano se levanto de la arena y miro a Susan enojado.

- ¡Que me liberen! ¡No se te ocurrió algo mas brillante! - Grito mirando a Susan enojado, mire enojada al enano, le salvamos la vida y encima se queja -

The Return | Edmund Pevensie |Where stories live. Discover now