The Return | Edmund Pevensie |

V: Jamas me ire

Muchas lágrimas cayeron de mis ojos y un sollozo salio de mi boca, mire asombrada a Henrik, es increíble, tiene la apariencia de un bebe de un año.

Sin poder contenerme mas, corrí hacia la bruja y lo arranque de sus brazos para abrazarme a mi hijo, unos brazos mas se sumaron al abrazo y vi la alborotada cabellera de Edmund de reojo. Al fin volvíamos a ser una familia completa.

Sentí las pequeñas manos de Henrik en mi rostro, me separe un poco de el y mi bebe rió, yo también reí limpiando mis lágrimas con el brazo que tengo libre y volteando a ver a Edmund.

Edmund miraba con lágrimas en los ojos a Henrik, fui hasta el y se lo entregue, Edmund lo cargo y lo abrazo mientras lloraba. Este es el momento mas feliz de mi vida, luego de tanto tiempo y tanto sufrimiento vuelvo a tener a mi hijo en mis brazos.

Me acerque a Edmund y Henrik y los abrace, justo como en el retrato, volvíamos a ser una familia.

Me separe de Edmund y mire detalladamente a Henrik, su cabello azabache esta peinado hacia un lado, aunque muy despeinado, su piel es blanca y muy suave, sus ojos, sus ojos son de un azul tan vivo como el mar oriental.

- P-Pap-pa - Henrik balbuceo unas palabras y toco el rostro de Edmund, reí divertida -

- Freya, volvemos a ser una familia - Me dijo Edmund con una sonrisa, asentí y lo abrace con una sonrisa -

Un carraspeo me hizo voltear, encontrándome con la bruja.

- Gracias, muchas gracias, no tengo como agradecerles por haber cuidado a mi hijo - Le dije a la bruja, ella sonrió y hizo una reverencia -

- Para mi y nuestras antepasadas fue un honor cuidar al príncipe, majestades - La bruja le sonrió a Henrik -

- De verdad, en nombre de los reyes de Narnia le agradezco haber cuidado y protegido al príncipe Henrik - Dijo Edmund mirando a la bruja -

- De verdad majestades, no fue nada, pero debo advertirles, una guerra se avecina y una decisión que tomar, el único consejo que les puedo dar es que piensen con cabeza fría - Luego la bruja desapareció, mire confundida a Edmund -

- ¿Que decisión? ¿Una guerra? - Le pregunte muy confundida a Edmund, el me miro igual de confundido -

- No lose, después de todo, es una bruja y no se puede confiar en ellas - Asentí hacia lo que dijo Edmund, luego voltee a ver a mi hijo y una sonrisa enorme apareció en mi rostro -

- Es precioso - Dije mirando embobada a Henrik -

- Tiene tus ojos - Me dijo Edmund con una sonrisa, negué levemente -

- Mis ojos son azul pálido, Henrik tiene los ojos de Peter - Le dije mirando sus ojos, azul intensos, idénticos a los de Peter -

- Es increíble, mi hermano es tan controlador que hasta los ojos de mi hijo controlo - Dijo Edmund divertido -

- Que risa Edm... - Peter irrumpió en la tienda junto con Dahlia, Susan y Lucy, pero al ver a Henrik se quedaron quietos y abrieron sus ojos como platos -

Los cuatros se quedaron quietos mirando fijamente a Henrik, sin siquiera parpadear o decir una palabra.

- No puede ser - Susurro Dahlia con lágrimas en los ojos, igual que Susan y Lucy -

Las tres corrieron y abrazaron a Henrik llorando, Dahlia lo cargo, mientras Susan y Lucy lo miraban y le hacían muecas o le daban besos.

Peter fue hacia Dahlia y ella le entregó a Henrik, Peter lo cargo y lo abrazo, Henrik rió y jugó con el cabello de Peter.