The Return | Edmund Pevensie |

IV: Narnianos

Narrador Omnisciente

En un lugar alejado del pequeño campamento de los reyes de antaño, el joven príncipe llegaba al campamento de los narnianos. Caspian miraba asombrado a todas esas magnificas criaturas, criaturas que hasta hace poco existieron para el solo en cuentos de fantasía. Pero esas criaturas no estaban feliz de verlo, al contrario. Lo odiaban.

- ¡Vete de aquí!

- ¡No te queremos!

- ¡Vete telmarino!

En el bosque solo se escuchaban gritos molestos de parte de los narnianos, ellos creen que culpando y despreciando a un telmarino podrían aliviar su dolor por todo lo ocurrido.

- ¡Lo que ese cuerno prueba es que ustedes nos han quitado una cosa mas! - Grito Nikabrik, provocando mas gritos de los narnianos -

- Yo no les quite nada - Se defendió Caspian, avergonzado de su pueblo -

- ¡Destruyeron nuestros hogares! - Grito un enano -

- ¡Nos corrieron de nuestras tierras! - Grito un centauro -

Todos gritaron muy enojados, Caspian los miraba con vergüenza, pero a la vez con valentía, sabia que estaban en todo su derecho de estar enojados, pero lo que hicieron sus antepasados no es su culpa.

- ¿Quieren hacerme responsable de los crímenes de mi pueblo? - Pregunto Caspian sin creerlo -

- Responsable y también castigable - Nikabrik se acerco a Caspian -

- Ja, es un descaro viniendo de ti enano, o ya olvidaste que fue tu pueblo el que peleo al lado de la bruja blanca - Dijo Reepicheep acercándose enojado a Nikabrik -

- Y con gusto lo haría de nuevo si eso nos ayuda a deshacernos de estos bárbaros - Dijo Nikabrik enojado y señalando a Caspian -

- Es una suerte que no este en tu poder llamarla de vuelta - Le dijo Buscatrufas acercándose a Nikabrik - ¿O acaso sugieres decirle al muchacho que luche en contra de Aslan?

Los narnianos se alteraron y comenzaron a gritar, Caspian los vio sorprendido.

- Algunos lo han olvidado, pero los tejones recordamos bien que Narnia nunca estuvo en orden hasta que un hijo de Adán fue rey - Dijo Buscatrufas mirando a Caspian -

- Es un telmarino, ¡Por que lo querríamos como rey! - Grito Nikabrik alterando los narnianos que comenzaron a gritar -

- Por que yo los voy a ayudar - Dijo Caspian haciendo que todos se quedaran en silencio - Mas allá de estas tierras soy un príncipe, el trono de los telmarinos es mio por derecho... Recuperemoslo y la paz prevalecerá entre nosotros

- Tiene razón - Dijo el jefe de los centauros caminando alrededor de Caspian - Yo vigilo los cielos pues esa es mi misión, así como la del tejón es no olvidar, Darba el señor de la victoria y Alambi la señora de la paz una vez mas se reúnen en el cielo y en la tierra se ha vuelto a alzar un hijo de Adán para devolvernos nuestra libertad

- ¿Es enserio? ¿Tendremos paz? ¿Enserio tendremos paz? - Una pequeña ardilla le pregunto a Caspian desde un árbol -

- Hace dos días no creía posible que existieran criaturas parlantes, o enanos o centauros y aquí están, el mayor numero que los telmarinos habíamos imaginado, no se si este cuerno sea mágico o no - Caspian alzo el cuerno de la reina Susan - Sin embargo no reunió y juntos vamos a recuperar lo que es nuestro

Caspian miro al jefe de los centauros.

- Si tu nos guías, entonces mis hijos y yo te ofrecemos nuestras espadas - Todos los centauros desenvainaron sus espadas y las extendieron, Caspian los miro sorprendido -