Herramienta (Kakashi x Anko) #NA2017

11 | ¿Un héroe pervertido?

Narrado por: Kakashi Hatake

―No me has explicado que me querías decir con el libro―me dice Anko por quinta vez mientras vamos de regreso a mi departamento.

La convencí de tomar una taza de té en mi casa. Planeo explicarle todo cuando estemos a solas, más tranquilos, sin preocupaciones. Si todo funciona a la perfección y comienzo a llevar una relación con Anko, podré obtener información de Orochimaru más fácilmente y podré derrotarlo, beneficiándola a ella y a Sasuke.

Abro la puerta y le permito pasar. Dejo mi libro en la sala y voy a la cocina a preparar el té. De vez en cuando dirijo mi mirada a Anko, quien está leyendo Icha Icha atentamente. Debió de haberle gustado demasiado. Quizás podría regalarle una copia más adelante.

―Veo que te gustó el libro―le digo desde la cocina.

Anko se sobresalta y deja el libro justo donde yo lo había puesto antes.

―No me espantes de esa manera o te mato―me dice con una sonrisa ligeramente malévola.

Yo río y sigo preparando el té. Cuando termino de hacerlo, lo sirvo en dos tazas y voy a sentarme a un lado de Anko para entregarle la suya.

―Y bien, ¿cuándo me vas a explicar lo que me querías decir con el libro? ―me pregunta después de haber tomado un sorbo de té.

―Te invité a mi casa para precisamente hacer lo que me has pedido.

―Dime rápido, que he estado intrigada toda la tarde―Anko deja su taza en la mesita de la sala, sube los pies al sillón y se gira hacia mí sentada al estilo indio.

Imito los movimientos de Anko.

―La razón por la que te presté mi libro para que lo leyeras es porque quiero ayudarte a recuperar tu pasado.

―Eso no tiene nada que ver con el erotismo que está plasmado en esas páginas―dice Anko con una ceja arqueada.

―Disculpa, no usé las palabras correctas. Bueno, quiero ser como un héroe para ti, no sé si me expliqué.

― ¿Un héroe pervertido? ―pregunta Anko acompañada de su escandalosa risa.

―No, uno de verdad, aunque si quieres puedo ser pervertido―una sonrisa pícara se forma en mis labios.

Anko deja de reír y me mira confundida.

―Me refiero a uno de verdad―afirmo antes de que su mirada se torne enfadada―, que sirva para apoyarte en lo que necesites para recuperar tu pasado―tomo una de las manos de Anko y la aprieto un poco.

Varias lágrimas comienzan a salir de sus ojos. Se me hace muy extraño verla así, la kunoichi más sádica y agresiva de Konoha, así como la más extrovertida, llorando. ¿Llorará frente a mí porque me considera parte importante en su vida? Ya sé que haré después de derrotar a Orochimaru. Voy a llevar una relación sincera con Anko. Está decidido.

―Perdón, no acostumbro a mostrarme débil antes alguien―dice Anko con la voz un poco entrecortada debido al llanto.

―Aprecio que lo hagas frente a mí―afirmo, sorprendiéndola―, porque eso significa que soy importante para ti.

Con mi mano libre tomo la nuca de Anko y la acerco a mi rostro lo suficiente como para sentir la manera en que su respiración acaricia mi rostro. Anko me mira demasiado anonada y aprovechando su estado, la beso, aunque sea con la máscara puesta.

―Creo que esta no es la manera correcta de hacerlo―digo a la vez que me separo un poco de ella.

Suelto la mano de Anko y me quito la máscara lentamente hasta dejar mi rostro totalmente descubierto. Ella me mira aún más anonada que antes, pero la comprendo. Nadie ha visto nunca mi rostro, sólo mis difuntos padres y ella, además de algunas conquistas nada especiales que tuve en el pasado. Anko, excluyendo la parte de que es una herramienta para derrotar a Orochimaru, es alguien muy importante para mí, Kakashi Hatake.