Capítulo 2.

17.1K 846 23
                                    

_________ se puso enojada el pijama, ¿Que todos los chicos eran iguales? ¿Nadie diferente? ¿Nadie que valiera la pena? ¿Nadie que la quisiera en serio? Ya tenía 19 años y había estado enamorada sólo dos veces; las dos veces había sido un error, a veces llegaba a pensar que moriría sola.
“No chicos, no problemas” era mejor así.
Apagó la luz y cerró sus ojos, no tardó mucho en dormirse, había sido un día agotador: había tenido que jugar con Jazzy y su muñeco y Jaxon y su auto todo el vendito día, suerte que habría una semana en la que sus abuelos se los llevarían al otro extremo de New York, que era donde ellos vivían.
Sus padres no la extrañarían mucho; la mayoría de las veces no estaban en la casa, sino que en un viaje de negocios o en alguna reunión importante, sólo los veía los fines de semana y en algunos casos especiales ellos estaban en casa algún día de semana. Aunque ya era mayor de edad, incluso debería mudarse a vivir sola, pero odiaba la soledad como también a veces la amaba, por eso la casa de sus padres era perfecta, porque a veces estaban y a veces no.
Terminó de estar completamente vestida a las nueve de la mañana; no acostumbraba dormir hasta muy tarde sobre todo porque no solía acostarse más allá de las once de la noche.
Bajó a la cocina y se preparó dos tostadas con mantequilla, las puso en la mesa y se preparó también un café no muy cargado, como a ella le gustaba. Prendió la tele y puso un canal de algún documental sobre la tierra.
Se sentó en la mesa y comenzó a comer, ésta no era su casa, se sentía tan extraña de estar ahí.
Comenzó a pensar en Sehun inconscientemente, ¿Por qué le había hecho eso? ¿Por qué la había despreciado así? Desde aquel pequeño incidente, su única amiga había sido Vanessa, porque por culpa de Sehun, había aprendido a no encariñarse con muchos amigos, porque te romperían el corazón después, por eso Vanessa era la única amiga que tenía en su vida.
Ella era rubia de ojos celestes, un poco más alta que ella y muy tierna y cariñosa, siempre la sacaba de sus malos ratos con sus consejos dignos de ser escuchados. La había conocido en la universidad hace un año, porque respecto a la secundaria, toda fue en completa soledad, sólo algunos compañeros que se dignaban a hablar con ella y uno que otro novio, pero nada especial.
¿Pero qué hubiera pasado si él no se hubiera distanciado de ella? ¿_______ sería igual que él? ¿Iría de fiesta en fiesta y de chico en chico? ¿Cómo una versión en mujer de Oh Sehun? Quizá no había sido tan malo que él se hubiera alejado.
—¿Se te hace divertido despertarme a las 10 de la mañana?—Preguntó Sehun parado enfrente de ella, con su pelo desordenado y mala cara, siempre se había preguntado cómo era que le hacía para estar siempre guapo—
—¿Te he despertado?—Hizo su mejor imitación de niña inocente—Lo lamento, no ha sido mi intención
—Mmm, preciosa, vuele rico—Dijo él y le robó una de sus tostadas—
—Oye—Le reclamó—Dámela
—No
—Que me la des—_________ se paró para quitársela, pero él se la metió completa a la boca—
—¡Que cerdo que eres!
Sehun se habría reído, pero estaba ocupado comiéndose la tostada que apenas cabía en su boca. ¿Cómo coquetear con ________? ¿Cómo insinuarse sin que ella le aterrizara su mano en la cara?…
¡Claro! No tenía que coquetear, sólo tenía que actuar… ¡Actuar, claro! Cantarle una canción, invitarla a cenar, darle alguna rosa. ________ era de las chicas que ya casi no quedaban, de esas que tenías que hacer un sinfín de cosas para que te tomen en cuenta, no de esas chicas que sólo les dices “Vamos a un lugar más privado” y ya está.
—Oye, ¿Te gusta la música?—Le preguntó Sehun cuando terminó de comerse la tostada—
—No creo que haya alguien en este mundo que no le guste la música
—Bueno, el otro día compuse una canción, y necesito alguna opinión, ¿Te importaría darme la tuya?
—¿Por qué?—Se burló—¿Todas las personas a las que le pedirías su opinión antes que a mí se las tragó la tierra?
—Oh, qué simpática que eres—Dijo sin la intención de sonar sarcástico—
—Bueno, si no queda de otra
—Acompáñame a la sala de música—Sehun la tomó de la mano para guiarla. En dos momentos ella quiso soltarse, pero él no la dejó—
El aire abandonó el cuerpo de _______ al ver la hermosa sala de música: un enorme y hermoso piano color blanco, una guitarra para zurdos, perfecta para Sehun; una batería, una trompeta, un micrófono, también una guitarra eléctrica y un bajo. La sala estaba pintada de un azul cielo precioso con varios posters de música de diferentes tipos en las paredes.
—Esto es hermoso—Dijo ella mirando la habitación—
—Sí, sin duda—Sonrió Sehun— ¿Piano o guitarra?
—Piano—Respondió ________ sin pensárselo—
—Perfecto—Dijo con una sonrisa torcida y se sentó frente al piano, mientras tiraba de la mano de ________ para sentarla junto a él—Bueno, ¿Lista para escuchar?
—Claro—Dijo encogiéndose de hombros—

_________ escuchaba la hermosa melodía que creaban las mágicas manos de Sehun completamente atónita; él tocaba hermoso, cada nota parecía ser perfecta, cada movimiento de sus dedos era exacto; era simplemente perfecto, completamente perfecto.
—Diablos, Sehun…sólo… wow—Dijo sonriendo—. Tocas… tocas hermoso.
—Gracias—Él la miró— ¿Te gustó? Aún tengo que inventarle una letra
—Está muy linda
—Igual que la chica que tengo al lado

Pensó que ella sonreiría, pero su rostro palideció de pronto.

—Lo sabía—Dijo ella parándose bruscamente—
—Oye… ¿Qué te sucede?—Preguntó confundido—
—Que no me has traído aquí para que escuche tu canción, a ti no te importa mi opinión—Espetó enojada— A ti sólo…sólo te importa flirtear con todas
—No, ________ yo…
—Ahórrate tus comentarios, por favor

Salió de la habitación hecha una furia ¿Por qué había creído que a él de verdad le interesaba algo acerca de ella más que meterla en su cama? No le extrañaba ese comportamiento, porque así era Sehun: no sabía lo que era tener a una chica como una simple compañera o amiga, pero eso no significaba que no le doliera que él quisiera seguir lastimándola; primero la había traicionado como amigo y ¿Ahora quería llevársela a la cama para usarla por una noche y luego… y luego desecharla como lo había hecho hace 11 años atrás?

—Hey, preciosa—La llamó Sehun mientras la seguía—Espera, lo lamento… no quería que pensaras que…
—Te lo dije, no me importan tus explicaciones

Sehun negó con la cabeza, esa chica era peor de lo que creyó… ¿Qué había dicho? Sólo la había alagado, ¿Que no era eso lo que le gustaba a las chicas como ella? Claro, pensó que le molestaría si le decía que tenía unas buenas curvas o un buen trasero, pero no que se molestaría si le decía “Linda”.
—Buenos días Sehun, buenos días ________-
________ miró a la pequeña que venía bajando la escalera con cara de sueño. Suspiró y se acercó a revolotearle el cabello.
—Buenos días, cariño—La saludó Sehun—¿Cómo durmió la niña más hermosa del mundo?
—Bien—Respondió ella—
—Hey cariño, ¿Quieres desayuno?—Preguntó ________—
—Bien
—¿Te gustan las tostadas con mantequilla?
—Son mis favoritas—Sonrió la pequeña—
—Iré a prepararte unas—Le dijo y se fue a la cocina— 
—Preciosa…—La llamó Sehun—
—¿Qué quieres?—Le preguntó de mala gana—
—No quería que te enojaras—Frunció el ceño—Lamento si te ofendí
—Vale, como sea
—¿Puedo recompensártelo?
—No lo creo
—Oh vamos, dije que lo sentía… hablo en serio
—Bien, perdonado ¿Feliz?
—Oh, no seas así de antipática, preciosa…déjame recompensarte… te invito a ese restaurante francés que tanto te gusta

Había dado en el blanco, si había algo a lo que no se podía resistir desde que tenía 7 años, era a la comida de ese restaurant. Le sorprendía de sobremanera que él lo recordara. Evitó sonreír; él aún recordaba algo, al menos había sido un poco importante en su vida.
Claro, porque cuando tienes 8 años, nada es importante, todo es un juego, y todo es inocencia, todo es lealtad.

—No es necesario
—Claro que sí, podemos llevar a mis hermanos, también les gusta esa comida
Bueno, eso sería un peso menos; no tenía ninguna intención de quedarse a solas con Sehun.
—Bueno, está bien—Sehun arqueó una ceja—
—¿Ahora aceptas? ¿Por qué te dije que irían mis hermanos? ¿Que acaso me tienes miedo o algo?
—Más que miedo, mi querido Sehun, es repugnancia, sin contar de que no me agradas para nada
—¿Sueles ser siempre así de directa? Vale, yo no te puedo llamar linda pero tú sí puedes llamarme repugnante
—Eso es diferente
—¿Por qué es diferente?
—Porque tú te mereces que te lo diga ¿O crees que no conozco tu reputación, Oh? Todo el mundo conoce tu reputación
—¿Y cuál es, según tú?
—Eres un mujeriego, o sea que tengo argumentos para decirte repugnante
—Oh, pues si estamos con esas, tú eres sumamente guapa, entonces sí tengo argumentos para llamarte linda
—No es igual, y ya basta con tus halagos. Quizá con las perras con las que acostumbras andar le encanten, pero a mí Sehun, me molestan 
—Oye, que te halague, preciosa, no significa que quiera llevarte a mi cama
—Oh pues, mejor así
—Sólo intentaba ser amable, cuando quiero llevar a alguna chica en mi cama, te sorprenderías lo cerdo que puedo llegar a ser, yo sólo te he dicho que creo que eres linda ¿Por qué te molestas tanto?

¿Por qué le molestaba tanto? Porque de verdad pensó que él quería llevársela a la cama… oh, había sido una tonta… ¿Por qué él querría tenerla a ella en su cama cuando tenía a todas esas mujeres despampanantes detrás de él?
Pero no era sólo eso, cuando los chicos la elogiaban, solía ponerse roja y decir un nervioso “gracias”, el problema con Sehun, era que le guardaba demasiado rencor, y cualquier cosa que se relacionara con él, era mala, él era veneno, él era el amigo que la había traicionado luego de haber sido su único apoyo… Bien, no lo odiaba, lo había estimado mucho hace años como para odiarlo, pero ese rencor que le tenía, era algo parecido.

—Me molesta que venga de ti, no me agradas
—¿Y por qué no te agrado se puede saber?

En ese momento sólo quería golpearlo, ¿Que acaso él no recordaba nada? ¿Tenía el descaro de preguntar por qué no le agradaba? No pensaba revivir el pasado así que no pensaba explicarle nada.

—Simplemente tú y tu… aura de divo no me agradan
—Sé más específica, preciosa
—No me agradan la clase de chicos como tú: la clase de chicos que no pueden vivir un día sin tener a una chica en su cama, eres un sátiro, me sorprende que Pattie no se haya enterado acerca de tu vida sexual, conociéndola, te regañaría bastante
—Ya, ¿Y ahora tu eres experta en mi vida sexual?
—No hay que ser experta para enterarse de tu vida sexual… cuéntame Sehun… ¿Con cuántas chicas te has acostado en tu vida?
—Yo…—Sehun hizo una mueca— ¿Qué tiene que ver esto?
— ¿Lo ves? Me evades, es porque no tienes idea de con cuántas te has metido… también contemos lo narcisista que eres, pareciera que todo girara en torno a ti, lo cual no me extraña porque la gente te pone demasiada atención por el simple hecho de ser… guapo
—Oh, nos fuimos a otra parte—Él sonrió burlón— ¿Así que te parezco guapo?
—Que te encuentre guapo, no significa mucho, cariño—Sonrió sarcástica—Sólo digo que odio tu manera de ser y de comportarte, me exasperas
‘Sin contar que era un terrible amigo’
—Pero me encuentras guapo igual—Se rio—
—Oh, ¿Lo ves? Te digo guapo y se te han subido los humos, realmente eres desagradable—Rodó los ojos—
—¿Desagradable?—Él frunció el ceño—No es así, no soy desagradable, tú sólo me odias por ser sátiro y por ser algo egocéntrico a veces, esos no son motivos
—Para mí sí los son
—Hablas como un adolescente de los años 50
—Ya lo sé
—Me extraña que te hayas abierto de piernas para Luhan y Jongin
—¿Y cómo mierda tú sabes eso?—Dijo ella con el ceño notoriamente fruncido—
—Sé más cosas de las que crees—Dijo sonriendo y se fue a abrir el refrigerador—
—¡Oye!—Lo llamó, siguiéndolo—Es que es imposible que tú sepas que… oh, lo acepto de Jongin, que le ande con el cuento a todo el mundo ¡Pero Luhan no!
—Te escuché hablando con tu amiga hace un año aproximadamente, cuando mi mamá me obligó a ir a tu casa
—¿Qué haces escuchando conversaciones ajenas? ¿No sabes que es del todo incorrecto?
—Te sorprenderían todas las cosas incorrectas que hago—Él le guiñó un ojo—Podría agregarte a ti a mi lista
—¿Eso ha sido una insinuación?—Arqueó una ceja—
—Tómalo como quieras
—¿Sabes qué? Actuaré como si las cosas que dices no tuvieran doble sentido
—Las cosas que digo no tienen doble sentido, suelo ser directo
—¿Quieres un golpe como el que le di a Suho?—Sehun negó divertido—Entonces deja tus directas y tus indirectas
—No estoy flirteando contigo, no entras en la categoría de chicas con las que tendría una noche
—Mejor
—Pero—Él se acercó a su oído—Quizás sí dos o tres
Sehun se quejó de dolor mientras se reía, creando un sonido confuso luego de que ________ le diera un codazo en las costillas.

la niñera || sehun y tú Where stories live. Discover now