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El omega posó su rostro en el cuello del mayor haciendo que ese delicioso olor a café con un toque de canela le embriagase, le transmitía tanta tranquilidad y le reconfortaba su presencia.

—¿Estás bien?

El menor no hizo más que asentir con la cabeza.

—Tra-tranquilo, Park— El mayor deshizo el abrazo, su lobo quería salir, y hacer suyo al pequeño ángel entre sus brazos. Pero cuidar del omega era su mayor prioridad— Estás a salvo.

El mayor se quitó la chaqueta y la amarró en las caderas del omega que se encontraba con los ojos llenos de lágrimas, se tensó por el tacto de sus manos con esas gráciles caderas. Prontamente su pensamiento se llenó de imágenes en donde tomaba al omega de las mejillas y lo besaba, pero se golpeó mentalmente, no debería de pensar en eso.

No aún.

—Bien—suspiró y tomó la mochila del menor para acto seguido colocársela en el hombro— Iremos a tu casa y tomarás tus supresores, ¿de acuerdo?— sonrió y el olor a menta de el menor se hizo más presente.

—Gracias hyung— el pequeño omega sorbió su nariz y esbozó una tierna sonrisa.

Caminaron juntos hasta el auto de Yoongi, estando allí,  se colocaron los respectivos cinturones de seguridad, y el alfa echó andar el auto.

—Es muy peligroso que salgas así a la calle, Jimin— regañó fijando su vista en el omega y después a la carretera— ¿Por qué no dijiste nada a tus padres?

—Pe-Pero hyung, yo juro que tomé mis pastillas, me rocíe incluso con el neutralizador— Explicó el omega con la mirada en sus relucientes zapatos—. Además mis padres no están, regresan mañana, ¿no te llamaron?

—Tu madre me llamó en la mañana diciendo que iría en la noche a cuidarte y después al otro día en la tarde poder irme... ¿Taehyung no está?—preguntó con curiosidad.

—No, se fue con su no-novio Hoseok. Me pidió que lo cubriera y dijera que había ido por tareas, mi hermano es un poco idiota—rió por lo bajo—. Mamá desde un principio sabía sus planes porque Hoseok le marcó para pedir permiso.

Por un momento el omega se quedo callado pensando, ¡pero claro! Ésta mañana su hermano le había dado sus supresores porque a Jimin se le agotaron, maldito TaeHyung, el sabía la enorme diferencia de sus pastillas.

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