Frágil

Al principio todas las mujeres son personajes secundarios.

Y él ni siquiera puede recordar sus nombres.

El las conoce a todas por sus rostros, más no se ha tomado la molestia de recordar sus nombres, ni quirks, ni color de ojos, ni el tamaño de los pechos ni nada —por qué las considera a todas aburridas y sin gracia y débiles y tontas.

Por ello se sorprende cuando Mineta y Kaminari hablan de manera libertina sobre quién de las chicas es más guapa. Qué sí Momo por su figura exuberante, qué sí Tsuyu por el trasero bien formado, qué sí Ochako por su sonrisa deslumbrante y así. Pero claro, él no forma parte de su revuelta de perversiones y hormonas volando por toda la estancia del 1-A.

                                                                           X

En los versus del festival deportivo, a Bakugou le toca enfrentarse a la tal Ochako. Se sorprende de ver que es la que siempre va pegada a Deku y el cretino alto de los lentes. Y vaya que la recuerda de las conversaciones de sus compañeros, pero no le encuentra lo atractivo a esos ojos grandes de chocolate derretido en malvaviscos, ni toma en cuenta su cabello tan castaño como las hojas en otoño, o su sonrisa que podría iluminar hasta el salón más oscuro. Por qué no le importa, además. Las chicas de su salón son todas iguales, y joder, que desde el preescolar que se topaba con niñas así de rosas, empalagosas y llenas de perfume.

Cae en seguida que una pelea con ella no vale la pena, total, que seguro y se rompe igual de fácil que todas las demás mujeres. Por qué eso son, mujeres, frágiles y débiles. Es sencillo, ni ella ni las demás lo valdrán.

Y ahora le toca su primera ronda con ella. Y él no espera nada grande, la verdad. Quizás la apoyen, probablemente la animen, pero tiene entendido que ya todos han asumido que no durará ni cerca de quince segundos en la misma plataforma que él.

Pero Uraraka Ochako no es lo que Bakugou asumió, no. Ella no es lo que todos asumen. Ella se levanta a pesar de que él ya la hizo explotar diez veces seguidas. Ella corre, no se rinde y pelea, pelea y pelea.

Llega un momento en que Bakugou siente una nueva emoción flotando en su pecho, allí donde está su corazón. Es adrenalina, es pasión, es sentirse feliz de encontrar a una oponente digna de él. Pero ella cae, y pierde. Pierde por qué agoto todas sus fuerzas hace mucho, y aun así, ella siguió a pesar de que ya todo estaba perdido.

Y por primera vez, Bakugou Katsuki empieza a notar más que una falda color verde y una corbata bermellón. 

Hace un montón de tiempo tenía inmensas ganas de escribir sobre una de mis Otps, ¿y qué mejor espacio que wattpad? Pues a eso, que si este capítulo llega a tener un poco de éxito, seguiré subiendo.  

-Spxiler