Frágil

Odio

Bakugou nunca había sido valiente, no de verdad. Era solo un niño con ojos bañados en violencia, con el corazón estrujado, frío y carente de amabilidad. Pero tan débil de manera emocional como solo se le permitía a él.

Y siempre era igual.

Revivía, memorizaba, recordaba. Y aunque lo negara, sentía de nuevo. Y dolía, dolía por qué el sentir era la manera más cruel de sufrir.

Cuando veía a Deku la ira afloraba en su pecho, por qué él lo tenía todo y a la vez nada. Por qué siempre fue mejor que él, pero aun así él lo siguió y apoyo sin esperar nada a cambio. Y ahora es Deku quién se roba la delantera, es él quién hereda todo de All Might mientras que Bakugou solo se puede quedar a esperar atrás, viendo sus fracasos y sus victorias. Y eso duele.

Y lo odia.

Por qué Deku tiene el apoyo de todos. Por qué Deku va siempre en potencia. Por qué Deku tiene amigos. Por qué Deku la tiene a ella.

Ella, quién con una sola sonrisa puede recobrar el sentido a sus días aburridos.

Pero no le gusta.

Solo la respeta.

Y no importa si es el inútil de Deku el que la tiene prendada a él.

Pero—.

Si es así, entonces porque duele.

Cuando Bakugou la vence, siente culpa.

Y él nunca siente culpa, no de verdad.

Se preocupa, por qué ella cayó dando todo para poder dar el golpe final.

Sus compañeros dicen que fue demasiado lejos, que su piedad es la diminutiva de lo inexistente y lo acusan de ser demasiado bruto con una chica tan frágil.

Y él se solo responde.

—PERO QUE RAYOS, YO NO FUI....No, ella, ella no es nada frágil.

Por qué nada es frágil en Ochako. No es débil como se pinta con su apariencia de faldas en revuelos y los estampados de ositos en su lonchera. Ella lucho y casi gano. Casi-, si no fuera Bakugou más fuerte.

Y cuando camina a su camarín, el imbécil de Deku está ahí. Y se enfurece por qué últimamente Deku siempre parece estar un paso por delante de él.

Incluso con la chica.

Y Bakugou no lo entiende. Desde el festival deportivo solo puede pensar en ella. En su forma de atacar, en su violencia hacia él, en la forma en que sus mejillas se tiñen de rojizo cuando come su platillo favorito. En todo. Y más de una vez es sorprendido viendo a su pupitre, buscando desesperando sus ojos otoñales blindados con él fuego. Y solo puede recaer en que no es a él a quién ella mira. No, sus miradas acarameladas siempre son para una persona.

Deku.

Lo odia, de verdad que lo odia.

Pero no lo odia tanto como se odia a sí mismo y a sus sentimientos que le prohíben ver hacia adelante.

El capítulo esta especialmente dedicado a AllinsonBlake y Snow_Angel_D. <3

 

¿Por qué subí un capítulo un día después que el anterior? Bueno, no sé, quería dar un pequeño regalo a las bellas personitas que se toman el tiempo de leer este coso feo haha.